Pareja Por La Eternidad {Bakudeku}

Capítulo: 2

Han pasado varias horas desde la llegada del desconocido humano en la manada, me estresa tanto la situación en la que pasé, por que actúe así, actualmente estoy en un lugar donde me trae tranquilidad para poder pensar con calma.

Este lugar también es especial aparte del campo de flores, es un lugar amplio con pastos alrededor con una majestuosa cascada, trayendo el ruido natural cayendo desde una altura alta hasta chocar con las rocas. Un lugar magnífico para poder pensar con calma.

Katsuki camina hasta llegar al borde del agua para luego sentarse en posición de meditación, pensando con tanta calma que se podía escuchar las salvajes aguas golpeando ferozmente las rocas y el sonido natural del bosque.

Qué podría hacer en estos momentos ¿quién era?, ¿será qué realmente es humano?, o ¿tal vez es una criatura que está en su estado humano?, o ¿quizás es un humano que escapó de su manada por eso estaba con ese estado? . Era bien sabido que los humanos se hacían daño entre su misma especie y no solo eso también hacia daño a la madre naturaleza, pero si es humano ¿cómo destruyó el bosque?, y la pregunta que me hago es ¿cómo hizo para que mi Alfa hablara?

Tengo entendido que yo ya estaba destinado a estar solo sin pareja, por esa razón acepte mi destinó de convertirme en un salvaje sin solución. Ya que soy el único de mi especie desde la muerte de la última pareja que eran mis padres.

Dejo escapar un gruñido de tan solo recordar el amargó recuerdo, estoy tan confundido y enojado, sólo me hago mas preguntas sin respuesta alguna. Es hora de regresar ya que no puedo confiar con un simple extraño, mi manada estará en peligro si lo dejo ahí hasta averiguar de donde proviene y si no es un miserable humano.

Mientras en la manada, en especial donde se encontraban alrededor de una choza de la curandera cuatro pares de ojos curiosos por saber quién era ese chico, tenían tanta curiosidad de saber porqué bakugou actuó de manera protectora con el chico, como si fuera que su pareja estaba en peligro, siendo que era un extraño; aparté era bien sabido que los dragones son muy territoriales con sus tierras que son capaces de matar a cualquiera que se atreva a pisar sus terrenos si es que no son parte de su manada o misma especie.

Pero a pesar de la curiosidad la abuela no le dejaba verlo, ya que según las noticias que dio fue que el chico entró en una especie de coma por el cansancio y las heridas, pero estaba fuera de peligro, eso fue todo lo que nos dijo ya que después tenia que darle a detalles a bakugou.

Pasaron al rededor de unas horas, el sol se asomaba con una elegante luz dando la bienvenida a un nuevo día para los seres vivos, Bakugou ya avía llegado hacia un par de horas en la manada, se le veía sin duda da alguna enojado, que prácticamente nadie se le acercaba por su fuerte aroma a enojo que confirmaban las dudas.

Bakugou se dirigía hacia la choza de la abuela que prácticamente le mandaron a llamar, una vez que llegó la abuela la recibió, pasando dentro del lugar con pasos intimidantes por si el intruso atacaba, le indicó que tomará asiento, atacando la orden tomando asiento esperando a que hablará.

"Bien por dónde comienzo, el joven que trajo usted estaba en un estado crítico, prácticamente al borde de la muerte, pero pude salvarlo la vida a mediante las medicinas naturales" informó la abuela chiyo, ofreciéndole un té al joven bakugou.

bakugou agradeció por té con un movimiento de cabeza escuchando atentamente las palabras de la abuela.

"las heridas del muchacho eran bastantes graves a consecuencia de los cortes que tubo, también rasguños y moretones, pudimos desinfectar las heridas y bañarlo con paños húmedos sacando lo más que pude la suciedad para evitar una posible infección" dijo tomando un poco de su té para luego continuar.