-3-

1.1K 108 15
                                    

Asta vigilaba a los bandidos, sabía que no escaparía por que los había dejado inconscientes con un golpe de su espada, mientras Vanessa trataba de darle los supresores al capitán mientras que Noelle llamaba a alguien, las feromonas no le afectaban en gran medida por estar enlazado con Yuno, quien era su alfa destinado, pero aún así el capitán de las Águilas Plateadas era un alfa puro.

-Luck esta cerca, vendrá pronto y Finral también- dijo Noelle.

-Mis hilos no lo detendrán durante mucho tiempo- dijo Vanessa volviendo a atarlo con más hilos, estaba preocupada por lo que pasaría si se liberaba, al ser la mayor de los tres omegas presentes era su deber protegerlos.

-Tenemos que esperar más?- pregunto Asta preocupado por la manera en la que las feromonas del alfa afectaban a sus compañeras.

-¡LEGAMOS!- escucharon el grito de Luck.

-Por aqui- les respondio Vanessa.

-Que paso?- pregunto Finral que corría junto a Luck.

-Ellos atacaron al capitán- explico Vanessa volviendo a atarlo a Nozel.

-Yo me encargó- dijo Luck sonriendo antes de darle una descarga eléctrica a Nozel.

-Por que hiciste eso?- pregunto Noelle preocupada al ver a su hermano desmayado por la sobrecarga de electricidad.

-Al menos fue efectivo- dijo Finral con una gotita en la cien.

-Por lo menos- dijeron Asta y Vanessa.

-Volvamos, tenemos que llevarlo con Owen-San- dijo Finral mientras abría un portal.

Cuando llegaron al ala medica el doctor se sorprendió al escuchar que un grupo de omegas llevaba a un alfa inconsciente mientras discutían, pero no se alarmó al descubrir que eran los cachorros de Yami, esos niños no caían fácilmente ante las feromonas por estar casi todo el tiempo expuestos a las feromonas de los alfas de la manada, pero aún así era peligroso que se expusieran a otros alfas que no eran de la manada.

-Que sucedió?- pregunto Owen.

-Unos tipos usaron una droga y entro en celo, una de sus lanzas atraveso el escudo de plata y lo hirió en el hombro- explicó Vanessa.

-Me encargaré de él- dijo Owen.

-Gracias, nos vamos chicos- dijo Vanessa tratando de evitar que Luck peleará con Asta.

-Hasta luego Owen-San- se despidieron los Toros Negros.

En el reino común estaban dos omegas junto a varios niños jugando.

-No toques a Marie-Chan- dijo el omega pelicafe a uno de los niños.

-Niichan, no les hables a si a mis amigos- se quejo la niña.

-P-Pero Marie-Chan- trato de decir.

-Me molestarte contigo- dijo Marie.

-Dónde está mamá?- pregunto un niño pelicafé, quien estaba jugando con una pelota junto a Magna.

-Pronto vendra- dijo Gouche, aún si no lo admitía siempre que visitaban a Marie y llevaban al niño lo tenia en su rango de visión, odiaba no poder tener a Marie en la base, pero sabía que Yami estaba haciendo lo posible para que pudiera pasar los fines de semana junto al escuadrón.

En un callejón cerca de la iglesia se abrió un portal, Finral había dejado a los chicos en la base, excepto Asta, que había querido visitar a su alfa, y había ido a recoger a su cachorro.

-Con quien te revolcaste?- pregunto un alfa pelicafé furioso, mientras lo empujaba a un callejón.

-N-No se de que hablas Langris- dijo Finral mientras levantaba sus manos en son de paz.

-De quien es ese mocoso?- pregunto en un gruñido el alfa.

-...Es mio, nada más mio- dijo Finral seriamente.

-No me mientas Finral, eres mío y nadie puede tocarte- dijo Langris acercando sus colmillos al cuello del omega.

-Somos hermanos- Finral intentaba no llorar, sabía lo que era capaz de hacer el alfa frente a él.

-Y eso que? Eres un omega que quiero en mi cama y lo tendré con solo ordenarlo, sabes que si te marco el mocoso morira, tendré todo el derecho de matarlo frente a ti- dijo Langris divertido de ver al omega tensarse.

-N-No lo dañes, por favor- pidió Finral.

-Acepta mi marca entonces y lo aceptare como mio- dijo Langris sonriendo con esperanza.

-No... no puedo aceptar tu marca, matarás a mi bebé- dijo Finral cabizbajo.

Langris golpeó la pared detrás del omega agrietandola, Finral tembló ante esto, sabía que cuando el alfa se enfadaba no salía nada bueno.

-Que quede claro que eres mio- gruño Langris antes de irse.

Finral suspiro de alivio y salio del callejón para ir con sus amigos y su hijo.

-¡Mami!- grito el cachorro pelicafé corriendo hacia Finral.

-Hola cariño, has sido bueno?- pregunto Finral cargando al niño.

-Sip, tío Magna estaba jugando con nosotros- dijo con felicidad.

-Estas bien?- pregunto Magna.

-Si, gracias por cuidarlo- agradeció Finral con una sonrisa.

-Bueno los dejo, tengo que comprar algunas cosas- dijo Magna despidiéndose de los cachorros con los que había jugado y de sus compañeros.

Sin saberlo un alfa oculto en las sombras seguía al omega rebelde, mientras se alejaban de la iglesia Magna frunció el ceño al sentirse nuevamente observado.

En una de las habitaciones de la orden del Amanecer Dorado, Yuno besaba a su omega.

Cuando Asta llego y Yuno olfateo el olor de otro alfa en su omega lo arrastro a su habitación para limpiar las feromonas que no pertenecían a ningún compañero de manada de Asta.

-Deja de morderme- regaño Asta en un gemido cuando Yuno mordió su cuellos, justo donde estaba su marca de unión.

-Eres mio- gruño posesivamente Yuno.

-Lo se- susurro Asta abrazando a Yuno.

-Te quedaras a dormir?- pregunto el pelinegro.

-Puedo?- la interrogante de Asta hizo que Yuno frunciera el ceño.

-Eres mi omega, puedes venir a mi habitación cuando quieras- respondió Yuno acariciando el cabello de Asta.

-Entiendo- la voz de Asta mostraba que ocultaba algo y eso molesto a su alfa.

-Alguien te ha dicho algo?- pregunto Yuno.

-... No quiero molestarte, será mejor que vuelva a la base- dijo Asta acomodando su chaleco.

-Responde- ordenó Yuno usando su voz alfa.

Asta tembló paralizado, eran pocas las veces que Yuno usaba su voz alfa con él, no le gustaba que la usará, pero ahora había resivido una orden de su alfa y debía contestar.

-U-Un chico dijo que solo venia a molestarte... eres él vicecapitán ahora... no quería molestarte- respondió Asta usando su voz omega, mantenia su cabeza baja con miedo a no ser suficiente para Yuno, después de todo solo era un omega resecivo.

Problemas Amorosos De Los Toros Negros Donde viven las historias. Descúbrelo ahora