13: Calamidad Se Compromete

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El pequeño grupo de demonios se encontraban en una de sus acostumbradas reuniones, cada uno solía tomar su turno para hablar y contar una qué otra anécdota, el menor de los demonios acababa de terminar de relatar sobre la vez que asustó a un rubio de ojos azules y vestimentas guerreras en aquel bosque. Las hermanas rieron al unísono de sólo imaginar la escena descrita por el chico bicolor, fue entonces que la gran puerta fue abierta, Reborn había llegado.

- Hey Reborn - saludó pato al recargarse de la mesa

- Ya era hora, desde hace tiempo nos has estado abandonando - pronunció la rubia al acomodarse las gafas

Reborn simplemente entró a la habitación para enseguida tomar asiento, la mirada de sus compañeros se enfocaban en él, esperando una respuesta o algo, y por supuesto que el castaño se las daría.

- Me voy a casar - soltó sin más

El silencio reinó en la habitación, la frase que el mayor de ellos había soltado les hizo quedar completamente confusos ¿Habían escuchado bien? Reborn no solía ser alguien tan bromista pero es que aún así no tenían idea de que se refería.

- ¿Te vas a casar? - se atrevió a cuestionar Ari

- Eso mismo, he conseguido un prometido

- ¿Prometido? Osea... ¿Es enserio todo eso?

- Lo es, quería que lo supieran, la razón de mi ausencia es simplemente porque estaba encontrándome con él

- Pero... ¿Es verdad lo que dices o es una pésima broma? - Pato apoyó su espalda contra la silla, su mirada examinaba al contrario pues esperaba una respuesta

- ¿Qué pasa? ¿No creen que sea capaz de conseguir esposo?

- Bueno es que nunca has sido alguien muy entusiasta de las relaciones amorosas - respondió Ari al jugar con sus cabellos

- Entiendo, aún así que sepan que estoy siendo totalmente honesto, me he comprometido con un chico bastante peculiar

- ¿Se puede saber de quien estamos hablando? - interrumpió el demonio menor al apoyar su mentón sobre la mesa

- Para empezar, es un humano

- ¡¿Humano?! - pronunciaron al unísono

- ¿C-cómo es eso posible Reborn? - cuestionó la rubia con una expresión de incredulidad

- Simplemente sucedió, solamente quería que lo supieran y no tengo intenciones de escuchar sus protestas así que eso es todo por mi parte

El demonio mayor les dio la espalda y con la misma salió del gran salón, dejando a sus compañeros con la palabra en la boca.

"Se ha vuelto completamente loco"

Reborn continuó su camino con dirección a la salida de aquellas ruinas, había decidido a expresar sus planes de compromiso con Auron, más que nada para evitar problemas con sus colegas a futuro, no tanto por él; puesto que en realidad le daba igual lo que ellos lleguen a pensar, sin embargo no podía decir lo mismo de su prometido. No podía saber con certeza como reaccionarían aquellos demonios al encontrarse con el humano que iba a matrimoniarse con su líder.

El demonio detuvo sus pasos ante la imagen del chico llegando a su cabeza, definitivamente se encontraba completamente flechado por la belleza de su prometido, quería tenerlo a su lado por toda la eternidad, un sentimiento nunca antes experimentado por aquel ser maligno.

Por primera vez pasaba por cosas las cuales eran incomprensibles para un demonio qué se dedicaba a traer la calamidad y la miseria a su paso y ciertamente estaba seguro de que la maldición de Auron no tendría ni el más mínimo efecto en él.

"¿Cómo puedes maldecir a alguien que es la encarnación misma de las maldiciones?"

Dejando de lado esos pensamientos, lo siguiente que debía hacer era buscar una solución a la preocupación de Auron por hacer saber al pueblo acerca de su matrimonio, habían dos posibles salidas para ello, una era el que Reborn se haga pasar por humano y vivir juntos en el pueblo y la otra era que Auron acceda a quedarse junto a él en el interior del bosque, cortando así los lazos con todos aquellos que quiere proteger.

Reborn tenía que plantearle las posibles situaciones al joven, aunque ciertamente le preocupaba la respuesta de este, podía comprender que ambas opciones le podrían resultar problemáticas, sabía qué tener a un demonio entre humanos podía ser una carga terrible y por otro lado quizás Auron sufra al tener que aislarse de todas las personas que conoce. Desde luego que también estaba el cómo se lo tomarían sus compañeros, siempre se mostraron asqueados por la idea de relacionarse con humanos y por más que haya decidido adelantarse con la noticia del compromiso, eso no garantizaba que ellos no harían nada en contra de Auron.

El demonio se detuvo al llegar a un pequeño mirador, necesitaba hablar nuevamente con Auron, quizás debía tomar al toro por los cuernos y de una vez por todas y presentarlo con los demás demonios, si intentaban algo raro, Reborn se encargaría de ponerlos en su lugar, haría todo lo que esté en sus manos para proteger a su amado, incluso si eso significa extinguir a su propia especie.

Mientras tanto Auron se encontraba frente a la iglesia del pueblo, ciertamente dudaba si debía entrar en aquel lugar, no sabía con que cara se mostraría frente al cura, Rubius le había apoyado y dado una infinidad de oportunidades para limpiar su alma y expiar sus pecados. No sabía si era la mejor opción hacerle saber sobre su boda, definitivamente no debía decirle que el hombre que lo desposaría era un demonio pero sabía que el cura no era nada imbécil y tendría sospechas.

Sería catastrófico que Rubius descubriera la verdad, causaría muchos problemas y muy seguramente haría que Luzu mate a Reborn y eso era algo que Auron no podía permitir.

Reborn se había portado muy bien con él, le había enseñado muchas cosas, parecía amarle genuinamente y aunque Auron no podía corresponder a ese amor, lo cierto era que Reborn le daba la suficiente confianza al decirle que le respetaría y no le pondría un dedo encima una vez casados.

El pelinegro finalmente se decidió, se dio la vuelta alejándose de la iglesia, tenía que verse con Reborn de inmediato, tenía una pequeña idea sobre como hacer saber a la gente que iba a casarse sin necesidad de que Reborn se vea tan expuesto, solamente esperaba que el demonio pudiera ocultar su lado demoníaco y aparentar ser un humano por muy breve tiempo, lo suficiente para que Luzu pueda enterarse de la noticia de su boda y que este no pueda hacer más al respecto.

Continuará...

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⏰ Última actualización: May 18 ⏰

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