16; no ese tipo de juegos.

681 66 3
                                    

Dahyun movió la cabeza de Momo hacia un lado, revelando lo que parecía ser marcas de dientes, un raspón pequeño que se veía bastante fresco

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Dahyun movió la cabeza de Momo hacia un lado, revelando lo que parecía ser marcas de dientes, un raspón pequeño que se veía bastante fresco. — Espero que no haya sido una omega

La pelinegra negó de inmediato, tanto con la cabeza como con las manos, apurándose a decir: — Yo nunca te haría algo como eso unnie, jamás — en un tono serio —. En realidad fue Sana.

— ¿Sana? ¿Qué pasó?

Momo se rió un poco nerviosa, tocándose el cuello justo donde el raspón se encontraba. — Ayer cuando íbamos de regreso a casa después de acompañarte, Nana estaba un poco extraña, así que le pregunté y ella...

— No dejo de pensar en lo que pasó con unnie, el último día — fue su respuesta inmediata, intrigando mucho más a la alfa mayor, quien solo se mantuvo en silencio esperando a que dijera lo que estaba preocupándole — ya sabes, cuando tú

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— No dejo de pensar en lo que pasó con unnie, el último día — fue su respuesta inmediata, intrigando mucho más a la alfa mayor, quien solo se mantuvo en silencio esperando a que dijera lo que estaba preocupándole — ya sabes, cuando tú... uhm...

— Lo siento si eso fue lo que te incomodó, no volverá a pa—

— ¡No! — interrumpió con rapidez, deteniéndose a medio camino, causando que Momo también lo hiciera. Ambas mirándose frente a frente — Es que es que no me incomodó.

— ¿Entonces?

Jugueteó un poco con sus dedos, su rostro coloreándose, de pronto tímida. — Nos gustó — fue lo que murmuró, tan bajito que Momo creyó haber oído mal, y antes de que preguntara de nuevo, Sana agregó: —. Nos gustó y por eso me he estado sintiendo un poco extraña, porque creí que sería doloroso y traumante, pero en realidad fue mejor de lo que creí.

Y la pelinegra no supo qué contestar, se quedó ahí de pie frente a ella con los ojos bien abiertos y sus labios formando muecas nerviosas, su mano izquierda comenzando a jugar con su cabello en un hábito característico, pensándolo. Había pensado que Sana estaba enojada con ella o incluso incómoda después de lo que sucedió, ya que la alfa menor había estado un tanto distante y hasta esquiva, pero saber que en realidad era algo como eso la dejó sin palabras. No esperó escucharle decir que le había gustado ser dominada, ¿qué tan extraño era eso? ¡En serio! ¿Qué tan probable era escucharlo venir de una alfa?

Cappuccino Candy [SaiDahMo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora