Happier Than Ever

Capitulo 27

—Pensé qué estarías en casa–dijo Keisuke al no obtener respuesta de Kazutora, ¿era aquí dónde pasaba últimamente el tiempo? un sentimiento de molestia invadió el cuerpo de Baji, no iba a mentir por su cabeza paso aquello, pero se dijo que era imposible.

¿Desde cuándo Kazutora y Chifuyu se volvieron tan cercanos?

—Ya ves que no–respondió con un tono que Keisuke desconoció, uno que le decía que para Hanemiya no era agradable verlo ahí.

El pelinegro no se equivocaba, para Kazutora no era nada agradable ver a Keisuke en ese momento, la razón era simple, el pelingero robaría la atención del rubio, los momentos en el departamento del menor, lejos de Keisuke eran los únicos donde Chifuyu  ponía más atención a Kazutora o mejor dicho le ponía atención y aunque la mayoría del tiempo estuvieran alrededor Hanagaki y Seishu no le importaba, tener la presencia del menor, verlo relajado y aunque a veces le llamaba la atención por distraerse fácilmente cuando lo estaba ayudando en alguna tarea no le importaba, para él incluso Chifuyu enojado era de lo más lindo.

Kazutora sabía que aquello era la único que podía obtener del menor, además desde que había empezado a ir a casa del trío, el interrumpir la recámara de Matsuno y platicar un poco con él se estaba volviendo algo normal, aunque al inicio Matsuno parecía estar a la defensiva y algo incómodo con su presencia. Aquello estaba cambiando y Chifuyu parecía estar más relajado y menos tenso cuando platicaba, esas conversaciones que eran confortantes para el de ojos amiba.

Kazutora deseaba poder tener más que una amistad con Chifuyu, algo que nunca pasaría y era tan avaro deseando algo como eso.

Pero ahí estaba Keisuke interrumpiendo y alterando lo que él creía iba hacer un buen fin de semana para ellos, sin embargo, no podía hacer nada más, incluso ni quejarse. ¿Quién era él para Chifuyu? Absolutamente nada, solo un compañero, porque no podía nombrarse ni amigo, no lo merecía.

Keisuke arrugó su entrecejo al escuchar el tono de Kazutora, tenía muchas cosas que decirle, pero no era el momento.

—¿Necesitas algo?–preguntó Kazutora, aquella pregunta hizo que Baji alzará una ceja, Hanemiya le estaba hablando como si él fuera dueño también del departamento incluso si estaba ahí por algún motivo que desconocía, le enojaba que se sintiera de lo más confiado en el departamento de Chifuyu.

Una tercera presencia y una mano sobre el hombro de Kazutora hizo que el rostro de Keisuke se relajará.

Hanemiya sabía de quién se trataba, sin necesidad de mirar a la tercera persona que ahora los acompañaba, aquel aroma a durazno y naranja que le gustaba había picado su nariz y el rostro de su amigo delataba a la persona.

Ambos chicos se relajaron al instante.

—Creo que es a mí a quien buscan, Tora. –la voz resonó a lado del mayor, haciendo que Hanemiya girará su rostro, dejando ver el perfil y las lindas facciones del rubio.

Entonces se dio cuenta que el rostro de Chifuyu estaba tenso, había una línea inexplicable en su rostro y si Baji no se había dado cuenta, él si.

Chifuyu no estaba feliz de ver a Keisuke.

Lo más estúpido es que eso le alegro.

—Gracias Tora –el rostro de Chifuyu se giró para mirar al mencionado, ambas miradas se encontraron y Hanemiya pudo comprobar su teoría, —Takemichi te está esperando, terminen el ensayo y lo ayudo más tarde. –señaló con un movimiento de cabeza y Hanemiya no dijo nada más, sin mirar a la tercera persona que veía todo en silencio con cierto asombró y haciendo que se consumiera cada vez más por los celos.