Amor Accidentado.~PARADA~

Bonita

Abrí mis ojos poco a poco, la luz del sol entraba por la ventana, anunciando un nuevo día. Me fijé que no estaba en mi habitación, entonces me puse a pensar en todo lo sucedido la noche anterior, y sentí una opresión en el pecho. Intente levantarme de la cama, pero me di cuenta que unos brazos me tenían agarrada por la cintura, me giré un poco y me encontré con su rostro. Dereck. Entonces con sumo cuidado retiro su brazo de encima de mí y me levanto despacio para no despertarlo, anoche no había dormido casi nada por estar pendiente de mí. Me desperté unas cuantas veces más después de que se durmiera conmigo. Ahora me da vergüenza mirarlo, ¿cómo pude decirle que durmiera conmigo?, no es que hubiéramos hecho nada, pero de todos modos me sentía extraña.

-Veo que te despertaste enana-oí detrás de mí. Yo estaba apoyada en la ventana mirando el hermoso día que hacia hoy.

-Si-dije sin mirarle. -¿Quieres que te prepare algo para desayunar? Te debo un favor. -dije mirándolo a los ojos. Él estaba con su cara de recién despierto y su pelo desordenado me encantaba.

-¿No me envenenaras verdad?-me dijo divertido.

-Claro que no, ¿qué clase de persona crees que soy?-dije frunciendo el ceño. -Y aunque lo hiciera, no te lo diría-dije guiñándole un ojo y saliendo de la habitación, dejándolo con la boca abierta.

Me dirigí hacia la cocina a ver si podía hacer algo, pero aunque quisiera, no podía hacerlo, ¿Es que este chico no llena la despensa?

De nuevo fui hacia la habitación para decirle que no había nada, pero cuando entré él se encontraba en el baño. Cogí mi ropa que ya estaba seca, y me vestí rápido antes de que saliera Dereck. Luego me daría un baño.

Busqué mi móvil por todos lados pero no lo encontré. Fui a por un vaso de agua, y me dispuse a esperar a dereck sentada en el sofá.

-¿Te apetece desayunar fuera? Recordé que no he hecho la compra del mes-dijo ubicándose a mi lado.

-Creo que ya es hora de que vuelva a casa. No encuentro mi móvil, y mi compañera tiene que estar preocupada por mí. - dije preocupada.

-Claro, claro como quieras-me dijo levantándose. Agarré su brazo y lo giré hacia mí.

-Gracias-le dije con una media sonrisa. Me miro y se quedó un rato hay, quieto mirándome. Yo baje mi mirada sonrojada y él me tomó por el mentón e hizo que lo mirara.

-¿Te han dicho que te ves linda cuando te sonrojas?-me preguntó. Sentí que mis mejillas volvían a arder, nuestros rostros están a escasos centímetros, mi corazón latía cada vez más rápido. Me iba a besar. Cerré los ojos y espere ese momento. Pero al darme cuenta que no llegaba los abrí.

-Cre...Creo que debemos irnos ya, tengo cosas que hacer. -me dijo rápido y seco.