Día 9 》Planear

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Contexto: Comics IDW (más específicamente, del primer volumen)

Izzy volvió a mirar hacia arriba, con las esperanzas puestas en que alguna de sus amigas bajaría en cualquier segundo

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Izzy volvió a mirar hacia arriba, con las esperanzas puestas en que alguna de sus amigas bajaría en cualquier segundo. Ella se mantenía con la guardia alerta para el momento en el que Sunny descendiera y se acercara a sentarse con ella, o para recibir a Pipp que aletearía elegantemente hasta su lugar, o cuando Zipp planeara en dirección al suelo e hiciera uno de sus comentarios ingeniosos.

Perdió la cuenta de las veces en que subía y bajaba su mirada porque ninguno de esos momentos llegó. No al menos en el tiempo que Izzy había estimado y esperado. Pero era lógico, ellas se estaban divirtiendo mucho en ese juego de pegasos que las tenía tan entusiasmadas, ¿por qué se detendrían y bajarían a saludar y preguntar si ella también se divertía? No había ninguna necesidad.

Además, ¡Izzy no estaba aburrida! Absolutamente no. La banca en la que estaba sentada tenía una temperatura adecuada para su estadía, y su smoothie estaba algo caliente por el día soleado y a punto de terminarse, aunque no era nada que no pudiera manejar. Estaba rodeada de ponis comerciantes que parecían tener un día más interesante que el suyo, y tenían compañía de otros ponis más.

Técnicamente, no era una tarde tan miserable. Sin embargo, tampoco sentía una esencia positiva en sí misma, su brillo estaba más apagado que de costumbre y odiaba ese sentimiento de impotencia que desde hacía días la tuvo atada de cascos. Había estado tan saturada de pensamientos intrusivos y paranoicos al punto de ignorar sus instintos creativos y dejar pasar muchas buenas ideas. Tal vez no eran tan buenas en realidad, no tan buenas como ese juego para gente con alas. Exclusivo de gente con alas, y no para unicornios como ella.

—¿Está todo en orden, Izzy?

La de melena azul saltó en su asiento, era Hitch quien le habló. Se veía preocupado, ¿tan triste se veía por fuera?

—¡Claro, sheriff! ¿Por qué no lo estaría?

—Nunca estás tan... tranquila —se sorprendió a sí mismo con el hecho de extrañar la parte hiperactiva de la unicornio. ¿Pero cómo no hacerlo? —Noté desde la esquina que estabas muy callada y cabizbaja, a diferencia de hace un rato en el bosque ¿segura que estás bien?

Acto reflejo, ella vio hacia arriba una vez más, una mueca siguió a su respuesta. Su intención no fue delatar a sus amigas como "responsables" de su imperturbable comportamiento, pese a que lo había hecho. Aunque no era su culpa, era suya por sentir tan personal algo tan vago como un juego de pelota. —Por supuesto.

Hitch observó hacia la misma dirección, y entonces dedujo el problema. —¿Es porque las demás están jugando allá arriba?

Izzy ya no se molestó en disimularlo, él iba a descifrarlo de todos modos; asintió avergonzada. 

—Entiendo —agregó, y luego se puso a pensar en qué decir. —Bueno, estar en tierra firme no es tan malo.

Hizo un movimiento rápido con sus patas delanteras, y con ello hizo crecer una margarita, lo que atrajo completamente la atención de la más baja. 

—Sé que esto no es nada parecido a la experiencia de vuelo que ellas tienen, pero no creo que debas solo quedarte sentada a mirar cómo ellas la pasan bien en sus propios pasatiempos —tomó la flor y se la entregó. Izzy la tomó con su magia y siguió escuchándolo. —Es normal que con habilidades de magia diferentes, todos los ponis quieran experimentar con otras actividades, y no tienes porqué quedarte atrás. Apuesto a que hay un montón de cosas que te gustaría hacer con tu poder de unicornio ahora mismo.

—Pues sí, bastantes —rio ella.

—Entonces, ¿qué estás esperando? Estoy seguro que ya tienes alguna bonita creación en mente —estuvo a punto de irse a seguir con el grupo de ponis a los que guiaba hasta que se volvió a Izzy. —Tal vez sientas que ellas te están dejando atrás, pero te aseguro que no es así. A ellas les agradas y les gusta tenerte a su lado, de otra forma no seguirían siendo amigas ahora que la magia está de regreso.

Ella sonrió, esa última afirmación le había gustado. Hitch sonrió de vuelta. —Y si alguna vez necesitas a algún compañero de tierra para hacerte compañía, sabes que estoy disponible todo el tiempo para ti.

Finalmente se retiró, no sin antes lanzarle un guiño a Izzy, gesto que a ella le pareció adorable y amplió más su sonrisa. Jugueteó con la margarita que él le había dado, poniéndosela en el cabello para después pegar un brinco de la banca al suelo. Hitch tenía mucha razón, ella no podía quedarse a ver cómo los demás vivían sus vidas mientras ella moría de aburrimiento. Trotó con una nueva actitud hacia Crystal Brighthouse, junto a ideas innovadoras y cierto pony de melena perfecta rondando en su cabeza.

 Trotó con una nueva actitud hacia Crystal Brighthouse, junto a ideas innovadoras y cierto pony de melena perfecta rondando en su cabeza

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Una vez más, Valeria perdió el otro separador. El moradito de arriba ya estaba puesto desde hace varios meses jjds. Dejo el viejito temporalmente, solo porque me encantan los fanarts y para que no quede tan vacío el final xD

Tenía otra idea para este drabble, pero al final lo cambié porque recordé este asunto de los comics que CREO FIRMEMENTE debió involucrar la visión racional de Hitch, pero en este momento, al mero principio. Nos habríamos ahorrado tantos dramas con Sunny ah

El tema eliminado de este drabble probablemente lo use en otro día, o en su propio one-shot, quién sabe :O


Tintes de azúcar | FictoberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora