Give Me Love

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No sé cuánto tiempo exactamente pasamos en la fila para comprar las entradas al concierto de Ed. Lauren ya estaba estresada, si hubiera podido estoy segura de que hubiera maldecido a todo el mundo. Después de mucho, logramos comprarlos y salimos muy animadas.
Llegamos al hotel y luego pedimos algo para comer, mi estómago no dejaba de sonar. Mientras yo tomaba un baño, Lauren se quedó acomodando el desorden que habíamos dejado antes de salir a dar nuestro paseo, como ella tenía más gracia en eso, dejé que se encargara. Cuando regresé la comida ya estaba ahí, nada más y nada menos que strogonoff, literalmente amaba aquello.
Después de comer lo máximo que pudimos, caímos las dos en la cama riéndonos de cualquier mierda que se nos vino a la cabeza, creo que comer de más causa alucinaciones en las personas. Iba a proponer un nuevo tema cuando el celular de Lauren comenzó a sonar, haciéndola saltar de la cama. Suspiré frustrada, siempre alguien tenía que arruinarlo.
"Hey, Dj."
La escuché gritar un poco alejada de mí. Dinah Jane, me vas a pagar caro todas estas interrupciones.
Mientras Lauren hablaba por teléfono, tomé el mío y entré a Twitter un rato. Comencé a reírme de los comentarios, ellos estaban literalmente muriendo con nuestras fotografías en París. Imaginen si supieran que le hice masaje a Lauren en la espalda después de quitarse la blusa frente a mí. Me reí sola por un tiempo, nuestros fans estaban locos. Mal sabían ellos que estaban llenos de razón.
Después de largos minutos ella regresó a la cama con una sonrisa en el rostro, yo ya había guardado mi iPhone.
"¿Qué quería DJ?" pregunté volviendo a un lado.
"Hablar sobre que no sabe cómo dejar de tener relaciones." Lauren hizo una careta y yo reí. "No tenía que escuchar eso."
"¿En serio esa loca te llamó solamente para hablar sobre eso?"
"No, solamente te mencioné esa parte." Me sacó la lengua. Sentí ganas de chupar. Sí, terminé colorándome. "Llamó para saber cómo estábamos, preguntó qué nos estaba pareciendo Paris y que, si todo sale bien, ella verá si puede venir la semana que viene."
"¿En serio?"
Me animé, sería excelente tener a Dinah con nosotras, ya que Ally y Normani murieron en el tal spa.
"Ajám." Lauren arqueó una ceja mientras frotaba su nuca. "Espero que no traiga a Siope, porque imagínate solo tener que pasar la noche escuchando la cama ranger. No, gracias."
Morí de la risa y le lancé una almohada.
"Ay, por favor. Eso fue innecesario." Ella rio hermosamente, llorando.
"Innecesario es que ella traiga a Siope."
"No te gusta ver la felicidad ajena, ya me di cuenta de eso, Jauregui." Hice una careta y gané una mordida en el brazo. Maldita. "¡Ay!"
"Me gusta ver la felicidad, no el sexo ajeno." Froté mi brazo rápidamente. De verdad estaba doliendo. "Dejo claro que si el sexo no es conmigo prefiero no saber ni escuchar, ni siquiera de DJ que es casi como una hermana."
Tuve que parpadear varias veces para asimilar lo que había dicho. Quería reír, pero reprimí mi rasa para verla seriamente.
"¿Quieres decir que eres de esas que solo tú puedes tener sexo? Nadie más en la Tierra tiene sexo, solo Lauren Jauregui."
Entrecerré los ojos y ella me devolvió la mirada.
"Me voy a callar mejor, Cabello. Porque no quiero ser grosera contigo."
Una sonrisa traviesa creció en la comisura de sus labios cuando llevó su cabello hacia una lado. Ave maría.
"Eres una cobarde"
"¿Soy una qué?"
Le recé a todos los Santos por haber dicho eso. Lauren ya estaba en la cama gateando hacia mí y ya sabía lo que seguía.
"Nada." Me alejé ya explotando en una carcajada. "Te juro que nada, yo..."
Perdí la voz cuando ella me tomó de la pierna, sentándose sobre mí, atacando mi estómago con estúpidas cosquillas. Pasaría el resto de la semana con dolor de panza, con toda seguridad.
-
La mañana del día siguiente no tardó mucho en llegar, pronto estaba saltando en la cama para despertar a Lauren que insistía en ignorarme con una almohada en la cabeza. Cuando decidió despertarse ya era casi medio día, así pasamos el resto del día antes del show decidiendo qué ponernos. Ya que hacía frío no habían muchas opciones.
El show estaba marcado para comenzar a las 19hrs, a las 17:30hrs Lauren y yo comenzamos a alistarnos.
Lauren decidió que salir casi toda de negro era la mejor opción. Reí cuando casi le daban ataques eligiendo la ropa. Terminó usando un vestido negro muy por encima de los muslos, pantis negras, botas altas negras y un abrigo largo blanco. Creo que suspiré por esa vista todo el tiempo que nos restó. Tan mujer y... dejémoslo ahí.
Yo terminé usando un pantalón de cuero negro, blusa azul, zapatos de tacón y un abrigo igual al de Lauren solamente que negro. De verdad saldría conmigo, por primera vez en toda mi vida me sentí jodidamente bien, y eso era bueno, creo que Lauren pensó lo mismo. Pasó todo el tiempo viéndome sentada en la cama mientras yo terminaba mi maquillaje, quería sonreír, pero me aguanté. Cuando terminé, giré sobre mis talones y deslicé mis dedos entre mi cabello preguntándole qué le parecía. La vi tragar seco antes de sonreír y decir que había pasado en la línea de la belleza treinta mil veces. no hace falta decir que me derretí, ¿no? No.
Después de toda la admiración la tomé de la mano y salimos, casi era hora del show. Estaba nerviosa, mariposas en mi estómago, regresaría ronca al hotel de tanto cantar.
No tuvimos ningún problema para entrar, todo estaba muy bien organizado y acogedor.
"¿Será que se va a llenar mucho?"
Lauren me preguntó mientras tomaba mi mano entrelazando nuestros dedos. Sonreí con el gesto.
"No lo sé, Lolo. Pero no creo." Me acerqué para hablar en su oído. "Vamos a ese lugar allá atrás, así evitaremos que alguien nos reconozca y todas esas cosas."
Ella tan solo asintió, abriendo camino entras las persona que ya estaban ahí hasta quedar al fondo del ambiente, bien al fondo. Estaba un poco oscuro, a casi nadie le gustaba quedar atrás en conciertos, así que agradecí mentalmente por eso. Lauren se recostó en un pilar detrás de ella y me llevó con ella.
"Hey, no voy a huir."
Dije risueña haciendo un gesto.
"No quiero que nadie te vea con deseo, el solo hecho de pensar en eso me dan ganas de llorar, Camz."
Aquella mujer frente a mí estaba vestida para matar a quien quisiera, ¿y me estaba diciendo que lloraría si alguien me volvía a ver con deseo?
Iba a reír, pero me quedé tan solo en el "awwn" cuando la vi hacer un puchero maravilloso, acelerando mi corazón. Levanté mi mano y presioné su puchero con ganas de besarla.
"Deja de ser boba." Susurré. Sus manos fueron a para a mi cintura. "Nadie va a volver a verme, casi ni nos pueden ver aquí. Quita ese puchero."
Ella suspiró rendida y se encogió de hombros. Iba a continuar con nuestra miel hasta que fui interrumpida por gritos. Lauren soltó mi cintura y yo me volví, el show iba a comenzar.
"Drunk" fue con la canción que abrió, en donde me movía al ritmo de la música y cantaba con los ojos cerrados. Amaba demasiado esa canción, quería poder actuar como una fan loca, pero no quería llamar la atención. Una que otra vez Lauren tocaba mi cintura, tomaba mi mano, me mantenía lo más cerca posible de ella. Me encantaba eso, estaba amando el momento.
Cuando comenzó a sonar "Lego House" quise llorar, tantas veces habíamos cantado esa canción, era como estar en el estudio con los ojos cerrado. Las personas a nuestro alrededor cantaban alto, levantaban sus brazos, sentimientos fuera, podía sentir la voz ronca de Lauren cantar a mi lado. La miré y tenía los ojos cerrados, sus hermosos labios formando una sonrisa, su cabello hacia un lado. Podía olvidarme del mundo y sentarme para admirar la escena. Pero cuando creí que las cosas no podían ponerse mejor, Ed Sheeran comenzó a tocar "Give Me Love". Mi corazon se aceleró cuando Lauren me observó, juro que si no estuviera recostada a la pared hubiera tropezado en mis tacones.
"Give me love like her..."
Me sentía extraña, confieso que aquella miraba ponía a temblar mis piernas. Todos cantaban y gritaban y todo lo que nosotras hacíamos era intercambiar miradas. Los verdes en los castaños. ¿Será que alguna vez en tu vida sentiste una intensidad igual?
"Give a little time to me and burn this out,
We'll play hide and seek to turn this around..."
Mi cuerpo tembló cuando Lauren me tomó de la cintura hasta unir nuestros cuerpos. Ella estaba caliente, pude sentir cuando su mano tocó mi mejilla, deslizando una mecha de cabello detrás de mi oreja. Mis ojos estaban perdidos en los suyos, mi boca babeaba, no sabía qué hacer con mis manos. No me esperaba eso, ella no tenía el derecho de maltratarme de esa forma. Su cuerpo tembloroso me mostraba que ella estaba tan nerviosa como yo, pero no me dejaba pensar que iba a retirarse.
"All I want is the taste that your lips allow.
My, my, my, my, oh give me love..."
En cuestión de segundos su mano libre estaba entre mi cabello, sujetando los mechones que estaban cerca de mi nuca. Separé los labios para suspirar, lo que sentía era poco comparado a lo que ella estaba haciendo conmigo.
"Lauren..."
Susurré con un poco de la razón que me sobraba. Subí mis manos por sus brazos.
"Por favor, Camila, no digas nada ahora."
Fue todo lo que pude escuchar de ella en medio de la música antes de tener sus labios en los míos. La sensación fue enloquecedora, una corriente eléctrica inundó mi cuerpo inmediatamente. Creo que morí unas treinta veces cuando Lauren deslizó su lengua caliente y veloz hacia el centro de mi boca. Santo Dios. Suspiré entre sus labios y llevé mis manos hasta su cuello cuando ella tomó mi cabello, en donde comenzamos una apasionado beso.
¿Quieres saber cuál es la sensación al besar a Lauren Jauregui? Ni siquiera yo podía describirlo. Había esperado tanto tiempo por ese momento y la tenía justo ahí frente a mí, una mano maltratando mi cabello mientras la otra acariciaba la piel de mi cintura, su lengua se deslizaba deliciosamente contra la mía, su olor entraba por mi nariz, dejándome completamente tonta. Estaba loca. Había besado solamente una vez en mis diecisiete años, y puedo decir con toda seguridad que nada podía compararse al beso de Lauren. Nada. Ella era un volcán en erupción. Cuando nuestros pulmones comenzaron a reclamar la falta de aire, Lauren finalizó nuestro beso con una mordida en mi labio inferior, haciéndome gemir. Vi sus ojos oscuros, nunca los había visto de esa forma. Creo que Ed todavía cantaba, no sabía decir, no sabía escuchar nada más. Mis labios estaban adormecidos, era el olor de Lauren por todo mi rostro. Sonreí uniendo nuestras frentes.
"¿De verdad acabas de hacer eso?"
Pregunté con las manos perdidas en su espalda. Era demasiado bueno para ser real. Su corazón latía desesperadamente contra mi pecho, el mío no muy atrás.
"Vámonos." Su voz era un poco ronca. Temblé de pies a cabeza. "Por favor, regresemos al hotel."
Abrí los ojos para encararla.
"¿Qué pasó? ¿Quedaste mal por lo que acaba de pasar o algo así?"
Pregunté con miedo y ella sujetó mi rostro entre sus manos.
"No, nunca me sentí mejor que ahora, Camz." Sonreí llevando mis manos sobre las suyas. "Quiero irme, quiero estar a solas contigo, quiero besar tu boca de nuevo." Cerré los ojos para escucharla, todo ese juego me estaba erizando. "Pero lo quiero entre cuatro paredes, sólo tú y yo. Vámonos, por favor, no puedo esperar más."
¿Tenía cómo negarme? ¿Tenía cómo decirle que no a la dueña de los ojos más hermosos del mundo? La abracé con fuerza antes de sujetar su mano, llevándola y dejando atrás el show, las personas, el mundo. Yo la quería y daría lo fuera para tenerla suspirando junto a mi cuerpo una vez más.
-
POV Lauren.
Camz y yo dejamos el concierto de Ed atrás y tomamos un taxi rumbo al hotel. Mi cuerpo estaba en llamas, mi cabeza procesaba mi actitud, mi corazón latía en mi garganta. Quería sacar la cabeza por la ventana del taxi y gritar y "Fuuuck" muy alto. ¿Cómo es que pude esperar tanto para hacer eso? ¿Cuánto tiempo perdí creando miedo en vez de lanzarme de cabeza por todo lo que sentía? Pasé todos esos meses intentando huir de mis certezas, corriendo lo más lejos posible de lo que sentía por aquella chica y, en cuestión de segundos, todo se fue río abajo.
Camila me enloquecía, me dejaba en un estado tan grande de disturbio mental que mordí mi labio para reprimir una risa. ¿De qué me iba a reír? De felicidad, estaba segura de que no podía existir nada mejor en el mundo que entregarme de corazón y alma a Camila Cabello.
Cuando llegamos al hotel y entramos a nuestra habitación, la llevé contra la puerta cerrado y uní nuestros labios. Ya no tenía calma, sólo quería besarla con todo el fervor, quería probar su lengua hasta que quedara sin aire en los pulmones. Su sabor era maravilloso, podía pasar el resto de los años degustando su sabor.
Camila sujetó mi cabello con las dos manos, tomándolo con fuerza mientras la otra me presionaba contra su cuerpo. Gemí bajo con la sensación. París podía tener el frío que fuera allá afuera, pero dentro de esa habitación apuesto que llegaba fácil a los cuarenta grados. Cuando el aire me faltó, saboreé su labio inferior lentamente escuchándola suspirar.
"Besar tu boca me dejó sin juicio, Camila." Ella era tan jodidamente mala que puso la punta de su lengua fuera, haciéndome chuparla con gusto. "Es casi un frenesí."
"Si me permites confesarte una cosa, Jauregui..." El castaño de sus ojos estaba quemando. Ella era hermosa, hermosa. Aquel cabello perfecto con olor delicioso, la boca roja y suave, su lengua caliente y sabrosa. Mierda. ¿En dónde estabas que dejaste todo esto lejos de ti por tanto tiempo, Lauren? Me pregunté a mi misma mientras la admiraba.
"Confiesa."
Pedí bajo y ella sonrió entra un respiro cortado, tomándome del abrigo para llevar su boca a la mía nuevamente, hablando entre mis labios.
"Me mojaste."
Ese momento en el que guardas un poco de cordura, ella pasa a deshacerlo. Esa información hizo a la región debajo de mi ombligo adormecerse más de lo que ya estaba.
Respiré hondo y la miré a los ojos mientras envolvía mis brazos en su cintura.
"Era por eso que tenía tanto miedo de besarte."
Camz mordió su labio inferior, mientras sus dedos recorrían mi nunca.
"¿Por qué?"
"Porque sabía que cuando eso pasara no tendría vuelta atrás."
Confesé sin desviar nuestras miradas.
"¿Y quieres regresar?"
¿Regresar? ¿Regresar a dónde? ¿Regresar al mundo en donde no se puede besar a Camila Cabello y sentir el corazón acelerarse por tenerla tan cerca? No, no quiero.
"Nunca." Sonreí uniendo nuestras frentes. "Nunca, Camz."
"Creo que pondré esta noche al principio de la lista de las diez mejores noches de mi vida."
"Deja para ver el resultado después. Nuestra noche apenas comienza."
Uní nuestros labios nuevamente, no quería perder tiempo hablando cuando podía mostrarle a ella lo que causaba en mí. Siempre estuve segura de que estaba incondicionalmente enamorada de Camila, pero no sabía que podía considerar todo ese momento como el más verdadero que ya viví en dieciocho años, y no quería que tuviera vuelta atrás.

Falling In Love For The Last TimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora