Epilogo.

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antes que nada, quiero decir, que, si estás conforme con el final que se dio en el antiguo capitulo,  no continúes leyendo esto, porque realmente puede ser todo lo contrario a lo que esperas o deseas, y si eres valiente, pues adelante, yo no te detengo, jsjs,

ahora sí, lo dejo a tu decisión uwu.


[...]

Minseok caminaba apurado por los pasillos de la empresa, correteando a los nuevos empleados que se encargaban de la vicepresidencia y asistente administrativo, todos viéndose realmente apurados.

Los movimientos en la compañía eran demasiados, preparando todo para cuando el presidente llegue, sabían que este querría todo en orden, sobre todo porque se iría de viaje por algunos meses y debía dejar todo en perfecto estado para que el trabajo fuera menos para vicepresidencia, y no ocurrieran percances en su ausencia. Minseok más que nadie sabía de lo importante que era que todo esté correcto, pues sabía de la obsesión que su jefe tenía por la estabilidad de su empresa. Mirando como los empleados se encargaban de dejar lista la sala de juntas dio unas cuantas ordenes más y miró a la chica que tenía a su lado.

—Está lista la sala de juntas, solo esperamos a que el señor Byun llegue —informó Sunny con su delicada voz mientras revisaba en su tableta los últimos detalles—. Minseok, ¿estás seguro de que nuestro jefe llega hoy? ¿y si cometo un error y me despide? Nunca lo he visto, y he escuchado que es demasiado estricto.

El chico sonrió con diversión al escuchar tal cosa de su jefe. Tenía mas de 7 años trabajando con él y pese a los errores que llegó a cometer, su jefe siempre fue amable con él, por lo cual, dudaba mucho que la chica tenga problemas con el mismo. Aunque era de esperar que la fémina sienta miedo, cuando era nueva en la empresa. La habían contratado hace casi un año, el mismo tiempo en el cual su jefe no se había parado en la empresa como tal.

Pensó en decir algo, pero, en cuanto las puertas del ascensor se abrieron, los empleados que andaban como locos por el pasillo hicieron una reverencia frente a su jefe, quien sonrió al verlos de nuevo. El presidente de la compañía camino con calma entre sus empleados, sintiéndose un poco extraño de ser recibido de esa forma, por lo que una sonrisa un poco avergonzada se formó en su rostro mitras caminaba al lado de su acompañante. Baekhyun miró a Minseok quien se acercó de inmediato a él esbozando una sonrisa alegre.

—Bienvenido de nuevo a su empresa, señor Byun —dijo Minseok con demasiada alegría, no podía decir que no lo extraño.

—Hola Min, ¿todo en orden? Todos se ven asustados —comentó Baekhyun mirando con una sonrisa divertida a su acompañante, quien le correspondió el gesto—. Te presento a Yifan, FanFan, él es Min, mi asistente personal y mi amigo —dijo el ahora rubio presentando a ambos.

—Un gusto, Hyunnie me ha hablado mucho de ti —dijo el hombre de casi dos metros de altura y rostro serio, pero que esbozó una cálida sonrisa al ver a Baekhyun.

—El gusto es mío —dijo Minseok correspondiendo al gesto.

Tras ese pequeño intercambio de palabras de cortesía Baekhyun no perdió más tiempo llevando consigo a Yifan a su oficina. Había estado de viaje en los últimos meses, tomándose unas cuantas vacaciones para relajarse del estrés, gracias a que el vicepresidente de la compañía se había ofrecido a hacerse cargo de sus responsabilidades, algo que le agradecía eternamente a Sehun porque sí, lo había necesitado.

Las cosas en la empresa no habían estado del todo bien después de todo lo que había pasado con su bebé, la ausencia de Chanyeol y la suya habían afectado a gran escala las ganancias, por lo que, levantar todo y estabilizar la economía requirió mucho trabajo en el pasado, y le costó demasiado porque de alguna forma no tenía una motivación viable, pero lo consiguió.

FELIZMENTE DIVORCIADOS ||CB|| MPREGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora