Día 283

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Es difícil tratar de evitar reírme en esta situación, en verdad que me estoy esforzando demasiado, pero mi amado Takato-san me lo está complicando, más de lo debido


Para ser sincero me encanta verlo celoso, es una parte tan intensa de su ser, en verdad que es algo que quiere ocultar, pero a veces la situación puede salirse de control o de sus manos


Digamos que hoy nos toco realizar una firma de autógrafos, eran tanto por nuestro trabajo como modelos así como por la serie de Romeo y Julio


Nos encontramos con nuestros compañeros y con el pesado de Ayagi, pero al menos Narumiya-kun está con él, me ayudo con el favor que le había pedido


Le dije que como vendríamos a un pequeño evento, lo mejor sería si acompañaba a Ayagi, ya que todos iríamos en pareja y era el único que no tenía una pareja


Él acepto sin dudarlo, parece que a ese chico si le llama la atención, solo espero que Ayagi vea lo lindo que es y no se atreva a jugar con sus sentimientos


Narumiya-kun estaba tomando su brazo y preguntándole por cualquier detalle o algo que llamaba su atención, parece que se va acostumbrando, y en verdad que me alegra


Comenzamos a firmar todo lo que nos traían, hasta que un chico se colocó frente a mí y me mostro un dibujo que había hecho sobre mí, dijo que se basaba en una de las escenas que vio en la serie, el cómo actuaria de forma posesiva con Julio



-Te quedó increíble -comente

-¿E-Enserio?

-Sí, eres muy talentoso -sonreí mientras firmaba el dibujo

-Es que me gustas

-¿Huh? -lo mire

-Yo lo amo y...

-¡Cof, cof! -tosió mi amado al lado de mi

-Gracias por tus palabras, pero estoy felizmente casado -sonreí

-No importa, no soy celoso -sonrió coqueto



Mi amado me dio un puntapié y me sujeto del brazo con fuerza mientras le mostraba su anillo



-ES MÍO, ASÍ QUE SI YA TERMINASTE ¡¡¡LARGO!!

-Exagerado -bufo el chico

-Zorra -comento mi amado



Ese tipo estaba por regresar, pero se lo llevo seguridad, en verdad me alegra como me defiende, aunque quitaría ese puntapié, pero todo perfecto 



Mi Día a Día (parte 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora