Clases

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Jin había ido a buscar a Yoongi y aunque apenas eran las seis cuando tocó el timbre, sus "suegritos" ya estaban despiertos.

Los padres del más joven se sorprendieron al ver al novio de su hijo cuando abrieron la puerta de su casa, pero este les explicó que quería llegar temprano a la escuela porque este iba a ser su último primer día y había decidido ir a buscar al moreno para que llegaran juntos.

El más alto estaba tan alegre que los padres de su novio no pudieron evitar reírse cuando lo dejaron pasar.

-Ay, Jin. Si de verdad queres despertar al bello durmiente, que quede claro que lo haces bajo tu propio riesgo. No quiero una demanda de tu papá. - le dijo su suegro mientras recogía el diario de la entrada y se dirigía a la cocina para terminar de desayunar.

-No se preocupe Señor Min.

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-No puedo creer que sea nuestro último año. - dijo el más alto, arrastrando al menor que seguía refunfuñando.

- ¿Y por eso tenemos que venir antes de que salga el sol? - le pregunto un poco molesto, no le gustaba despertarse temprano, mucho menos para ir a esa cárcel de menores que cínicamente los adultos llamaban escuela.

-Nooo.- se río, para luego frenar delante de su salón y entrar.- Venimos por esto....- explicó señalando la habitación vacía

- Jin, te amo, pero o me explicas de que hablas o me conseguís café, porque no conectó dos neuronas a esta hora.- pidió el menor con la última gota de paciencia que le quedaba antes de matar a su novio por obligarlo a abandonar su cama.

El mayor lo arrastró hasta el fondo del aula, para luego sentarse sobre un banco y tomar las manos de Yoongi, que se dejó hacer ya que era demasiado temprano para discutir, y realmente en lo único en lo que podía pensar era en seguir durmiendo.

-A ver, venimos temprano porque me gusta pasar todo el tiempo posible con vos.- dijo mientras tiraba de las manos del menor para acercarlo a él. - Venimos temprano porque ninguno va a tener las tardes libres cuando vos empieces con las reuniones del club de música y yo con las del club de teatro.- ahora Yoongi estaba entre las piernas del más alto y podía sentir la respiración del otro en su rostro.- Venimos temprano porque vamos a salir tarde todos los días y nuestros papás no quieren que nos veamos después de las 18, no sea cosa de que tengamos ideas impuras cuando oscurece.- el más bajo no pudo evitar reírse, sus padres tenían muchas reglas respecto al tiempo que pasaban juntos, si solo supieran que ellos aún no habían ido más allá de besos.- Y porque considerando todas esas cosas, ¿en qué otro momento vamos a poder estar como ahora?- dijo para finalmente besarlo.

Yoongi respondió el beso, sintiendo como el otro sonreía mientras lo acercaba más a su cuerpo. Si ese era su premio por despertarse temprano, no tenía ningún problema en abrir la escuela con el portero.

Llamada perdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora