Capítulo 6 " La Apuesta"

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▶ "Pero antes deja, que te dé un dato. Pa que tú sepas bien que yo si no gano, empato"🎶

Capítulo 6 "La Apuesta"

PASADO

8 de Agosto de 2019. Tulum, México.

Lando POV

<<Los primeros días de vacaciones, sin duda fueron los mejores...>>

Estábamos pasando el rato en la playa, disfrutando ya del atardecer y el calor del verano. George, Carlos y yo, nos habíamos tumbado en la arena, cuidando de un dormido Alex. Que después de tan solo una noche en México, cuando despertó en la mañana, juro y perjuro que nunca volvería a tomar tan descontroladamente. George y yo, no le creímos nada.

Elara y Priscila, por otro lado, jugaban al vóley. La mexicana era bastante terca, llevando tres partidos sin ganar, pero asegurando que en el siguiente lo lograría. Elara por su parte, parecía simplemente estar haciendo el mínimo esfuerzo por vencerla, seguramente ya cansada de tanto ejercicio.

Llevaban ya un par de horas así, pero yo parecía no cansarme de contemplar a Pri. Mientras que las chicas en general me llamaban la atención por su cuerpo, había algo en la morena, que siempre lograba dirigir mi mirada a su rostro. Tenía una sonrisa espontánea y bonita, que hacía que cuando sonreía, sus ojos se achinaran.

─ Estas babeando de nuevo ─ me interrumpió George.

─ ¿Qué? ─ me toque mi barbilla asustado.

Pero el muy infeliz comenzó a reírse junto con Carlos de mi gesto, dejándome en claro, que solo se estaban burlando de mí.

─ Idiota ─ le gruñí, mirándolo molesto.

─ Tienes que aprender a disimular tus expresiones Lando. Cualquiera podría darse cuenta que te gusta Priscila así ─ me indicó mi compañero de escudería.

─ Porque tú eres un especialista en eso de disimular expresiones, ¿no? ─ lo cuestioné, imitando una de sus famosas caras de perdido.

A mi lado George se atragantó con su risa.

Cabrón ─ masculló el español por lo bajo, tirándome un poco de arena.

Me reí. Carlos era sumamente cuidadoso con sus palabras y declaraciones, pero sus expresiones faciales, a veces terminaban hablando por él.

─ El que realmente está babeando de lo lindo es Alex. ─ señaló George, bajando sus gafas para mirar mejor a nuestro amigo.

Desde que habíamos llegado a la playa, Alex se había tirado sobre una toalla y allí no más se había dormido. Llevaba ya casi tres horas durmiendo de lado, y una leve marca de saliva le corría por la mejilla

─ ¿Sigue vivo?

George se inclinó de hombros, y con cuidado se acercó al tailandés, picándolo con su dedo. Alex se estremeció un poco, pero apenas se inmutó, y enseguida se dio vuelta para seguir durmiendo.

─ ¡Sí, GANE! ─ el grito de triunfo de Priscila nos llamó a todos la atención.

La mexicana festejaba con la pelota en sus manos, bailando de manera graciosa, mientras la americana la veía con una sonrisa divertida en su rostro.

─ Ya era hora. ¿Cómo cuantos partidos iban? ─ preguntó George.

─ Tres ─ respondí rápidamente.

Las chicas volvieron caminando hacia nosotros y mientras que Priscila parecía irradiar energía por los poros, Elara arrastraba los pies por la arena.

El Gran Circo: La esperanza de McLaren (Lando Norris)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora