Capitulo 33: Pelea contra los diablillos

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Vaal Hazak hipotermico era un dragón anciano que vivía en el paraíso de hielo, era delgado no atlético, la piel congelada de sus victimas sobre la suya lo hacia parecer andrajoso en lugar de elegante, y sus delgados y afilados dientes parecían frágiles en lugar de poderosos.

Vaal Hazak hipotermico era un dragón anciano que vivía en el paraíso de hielo, era delgado no atlético, la piel congelada de sus victimas sobre la suya lo hacia parecer andrajoso en lugar de elegante, y sus delgados y afilados dientes parecían frá...

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Era un dragón anciano  mal hecho lo único que lo salvaba de la miseria eran sus habilidades y aun así monstruos normales lo retaban, lastimaban incluso espantaban. Por eso siempre admiro a velkhana el era todo lo que no era, todo lo que el deseaba ser.

Se juntaron muchas veces y nunca pelearon, velkhana posiblemente ganaría aunque un ataque desprevenido podría hacerle daño pero aun así nunca lo hizo a su vez el aura helada y de corrupción del Vaal Hazak no afectaba casi a velkhana.

Fue la primera vez que estuvo con otra criatura sin que se atacaran los que eran mas débiles que el morían, los que eran mas fuertes lo atacaban pero por primera vez fue fue tratado como un igual o por lo menos algo tolerable.

El dragon anciano había experimentado un sentimiento que creía olvidado, la compañía fue el único ser que no lo rechazo el único ser con el que esperaba mas  que muerte y así siguió hasta un día el hermoso ser conocido como velkhana apareció volando sobre su sitio habitual pero sin su gracia habitual cayo descuidadamente estaba herido su sangre semi-transparente, pero sus hijos brillaban con increíble intensidad.

algo le había provocado un cambio profundo ¿era fascinación era miedo? no lo sabia pero tenia que hacerlo durante días el vaalzhak hipotermico estuvo atendiendo a su compañero como pudo le entrego presas y agua así como espanto a los monstruos oportunistas deseosos por poder probar la carne de un dragón anciano debilitado.

En esos días había expandido su plaga helada como nunca antes lo había hecho antes muchos sucumbieron ante su infección y a los que les toco un destino peor, se habían convertido en criaturas casi muertas pero mutadas y endurecidas por la energía casi sin mente una especie de zombies helados que marchaban y seguían esparciendo la plaga.

Esto fueron los enemigos que encontraron boreas y glacius eran abominaciones mutadas por una infección proveniente de un dragón anciano las bestias cánidas y salvajes rugieron desagradablemente antes de lanzarse de manera descuidada sobre los 2 wyverns glacius el primero fue recibido por un poderoso zarpazo de las garras de glacius sus patas eran cortas pero poderosas así que el cánido fue  mandado a volar el otro fue interceptado por un coletazo de Boreas.

Ninguno quería morder a esas cosas pues se veían peligrosas de consumir una de estas bestias se levanto con heridas que hubieran matado a la mayoría de animales de ese tamaño, "verdaderamente aberrantes" dijo Glacius todo su instinto le gritaba que algo estaba mal con la condición de tales animales, como si fueran un terrible presagio.

Uno de ellos intento clavar sus dientes en la cola helada de glacius afortunadamente su armadura helada lo protegió, sacudió su cola violentamente mientras le rompió el cráneo a uno de los wulg de otro zarpazo con la carne de su cuello expuesto pudo ver mejor lo que estaba mal, la sangre en varias partes tenia un tono entre azulado y cristalino la carne de un tono palido enfermizo y algunas partes negras en necrosis.

Unas criaturas en constante agonía que se lanzaban en un frenesí ciego de locura boreas hizo algo que glacius no esperaba de su boca lanzo un proyectil de liquido que fue una presión que aplasto a los wulg infectados que quedaban, fue un forcejo tenso pero relativamente corto.

Las 2 bestias jadeantes.

"¿Falta mucho?" pregunto glacius notablemente irritado

"No mucho, ya casi estamos allí pero mejor apuremos el paso por si acaso" los 2 wyverms caminaron y caminaron con el páramo nevado mientras los wulg infectados fueron tragados por la nieve y los vientos.

El infierno helado era hermoso blanco he impecable sin embargo todo eso era cruel consumiendo y condenado al olvido a los que no soportaban su malvado abrazo.

La cueva de boreas estaba por fin delante suyo, glacius estaba aliviado al principio pero su alivio pronto se remplazo por un sentimiento extraño, sintió una punzada en su cerebro una atracción hacia algo boreas noto su confusión y le dijo "¿También puedes sentirlo verdad?" glacius asintio algo dentro de esa cueva comenzo a llamarlo su breve viaje talvez estaba por terminarse.



La llegada de los monstruos!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora