Por cada melodia un arte #2

Capitulo 5

Camila Felton.

Frunci el ceño al mismo tiempo en que ambas me miraban con expectativa.

—¿Sobre? —carraspee.

—Queríamos saber si te gustaría hacer un trío. —preguntó de golpe, dejándome desconcertada.

Trague grueso. Era la primera vez que Danny me proponía hacer algo como esto. No sabía bien como tomarlo, debido a que en muchas relaciones cuando las personas se cansaban de la monotonía (yo diría que de la persona) estas solían proponer juegos sexuales con otras personas. Max sonrió, y Danny esperaba mordiéndose el labio.

—¿Qué? —repetí, —no, no lo sé... Ni sé como se hace.

Ella se inclinó sobre mi, —Solo debes relajarte bebé.

La detuve, mirando sobre su hombro a Max, —Déjanos un momento a solas. Asintió y ajustó un poco mas la puerta, —¿Estas cansada de mi, la relación?

—No, no de ninguna manera cariño. Solo quiero experimentar cosas nuevas, eso es todo. ¿O max no se te hace atractiva?

—Sí, pero no para estar con ella, a la única que quiero es a ti.

No es que no quisiera hacerlo, pero la manera en la que sutilmente me ofrecía hacerlo me da mucho que pensar, sin embargo, lo hice, por ella, solo por ella.

Llegó la tarde, Max de había ido a casa y Danny entró a la habitación sonreí al verla, me puse una camiseta grande de ella y me acosté a ver televisión, estaba algo cansada así que opté por ver una película mientras ella eligió preparar la cena; ramen.

Mientras comíamos decidí preguntarle.

—¿Te gusta?

Ella dejó de absorber su ramen y me miró con extrañeza, —Claro, sino no estaría comiendo. —río y aunque intente reírme no sentí que pudiera.

—Me refiero a Max, ¿Me lo propusieron por algo, no? ¿Querías sentirte menos infiel si accedía?

Ella frunció el ceño, —No, claro que no... Solo..

—Sé sincera, odio las mentiras.

—Si, me gusta. Pero no mas que tú, solo fue una simple atracción... —se encoge de hombros, —además admitiste que era bonita.

—Dije que era bonita, no que me atraía Dan. —contesté secamente, —Esa es la diferencia.

—Cam... No te pongas así, no fue nada del otro mundo, ¿Por qué exageras todo? Estoy harta de eso realmente.

—Y yo estoy harta de que respondas por la tangente cada vez que te pregunto algo. Me haces ver como la exagerada cuando sabes que tengo razón.

Resopla, apaga el televisor y la lámpara, para acostarse y darme la espalda, —Buenas noches.

—Siempre me haces esto. Esquivas todo y me dejas hablando sola, ¿No me tienes ni un poquito de respeto?

—Lo tendría sino hubieras aceptado estar con una chica que me gusta.

Sentí como mi pecho se contrajo. Me dolía reclamarle por esa chica, pero no lo hubiera hecho si no notará que entre ellas había algo raro en cuanto llegué. Me acosté a dormir, era lo único que podía hacer.

Abrí los ojos y me percaté de como la luz del sol daba en el espacio que yacía vacío a mi lado, me puse en pie y tomé el celular para revisar si mis padres habían llamado, no lo hicieron. ¿Qué pretendía? Estaban enfadados conmigo y de razón. Me encontré en la cocina a Danny, quién estaba desayunando y hablando por teléfono al mismo tiempo. Verla me causó nostalgia debido a la vez que nos conocimos, yo tenía 16 y ella 20 fue en una conferencia de arte, luego me inscribí a su misma Universidad, ella ya está apuntó de terminar la carrera, solo le queda ver una materia y sustentar su tesis espero estar ahí para entonces.