Capítulo 1

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La imagen de una enorme torre iluminada por los rayos dorados nacientes del sol, algunos pájaros cantando y volando cerca.

Un pequeño camaleón salió por el hueco de aquella ventana de madera, estaba agitado y asustado, giro su ojo hacia un lado corriendo hacia una maceta donde se camuflajeo escondiéndose de algo... Más bien de alguien.

¡JA! -Las ventanas se abrieron con fuerza mientras la voz de un adolescente se escuchaba, era un joven castaño-rubio, con el cabello muy largo, su piel porcelana brillaba con la luz solar y poseía unos hermosos ojos amielados- Jum, vaya, creo que Smuca se escondió en otro lado.

El joven miró sospechoso las macetas, peinando su cabello y fingiendo no saber dónde se encontraba su amigo, se alejo escondiéndose de la vista del camaleón.

El camaleón observó hacia la ventana y sonrió feliz al ver que no lo había notado.

¡Te tengo! -Un pequeño mechón de cabello amarró la cola del camaleón jalando lo hacía arriba, delante de la ventana apareció el joven de cabeza mientras jalaba su mechón y le sonreía feliz al camaleón asustado.

Ya son 22 a mi favor- Se bajó y desenrredaba su cabello de aquel gancho arriba de la ventana, miró al camaleón que estaba sobre el borde de la ventana y se ponía las manos en las cadera- ¿Jugamos 23 de 45?

Ok ¿y tu que quieres hacer? -El camaleon se quejo mirándolo serio mientras el joven se sentaba en la ventana y lo miraba. La sonrisa del camaleón apareció y con su cola señalo hacia afuera de la torre.

Si... Yo creo que no-Luca paso sus piernas delante de la ventana poniéndolas en el borde mientras jalaba al camaleon de la cola y lo ponía en sus piernas- Es lindo estar adentro y a ti te gusta.

El camaleon vio como lo señalaba y serio le sacó la lengua.

Ay, no te enfades Smuca no es tan malo estar aquí- Agarro al camaleon poniéndolo entre sus manos, levantó los hombros mirando de reojo adentro de la torre y regresaron rápido.

El largo cabello rizado y castaño-rubio se deslizaba por todo el piso, el joven se encontraba en los pilares de lo más alto de la torre donde jalaba su cabello para después lanzarlo hacia una manija que abría la parte de arriba de la torre dejando entrar la luz del sol, ilumando toda la habitación. Se agarro de su cabello cayendo hacia el suelo.

7 am, un día más inicio-Cayó delante del reloj donde estaba el camaleon y lo agarro con sus manos llevándolo hacia el centro del lugar comenzando a cantar.

A los quehaceres y a barrer muy bien-Barría el polvo que había en el lugar levantando con su pie su cabello llevando todo el polvo hacia el recogedor que tenía el camaleon, llenándolo de polvo.

Pulo y encero, lavo y saco brillo-La imagen del joven encima de dos cepillos apareció, limpiaba con jabón el suelo mientras su cabello estaba encima de un mueble y patinaba enjabonando más el piso junto a su amigo igual encima de un cepillo.

Subió las escaleras llevando un pequeño mueble hacia la parte de arriba y después la imagen del joven abajo estaba sacudiendo el polvo de las velas mientras le sonreía a su amigo. Después apareció lavando los trastes mientras su amigo se columpiaba en la manija del agua.

Terminé, ¿qué hora es? Siete con dieciséis-El chico apareció de nuevo delante del reloj con su amigo en la cabeza y suspiro cansado recargandose en la pared al ver la hora.

Enredados [Luberto Au] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora