El dragón custodio

2

Kunikida pone a Dazai atrás suyo mientras se pone una posición defensiva ante el dragón

Verlaine había mencionado que era consciente, tal vez pueda hablar con él.

—Príncipe, no venimos a lastimar a tu hermana— Dice en voz alta, ve a Chuuya caminar rodeándolos en un círculo como acechando y esperando un momento para atacar.

Kunikida gira con él para que no haya momento donde le dé la espalda.

El dragón no responde, solo los sigue observando tan fijamente, Kunikida quiere creer que eso es una oportunidad de dar explicaciones.

—Venimos a despertar a tu hermana— Continúa, pero parece que esas palabras ponen agresivo a Chuuya.

El dragón entiende las alas y sisea hacia ambos hombres.

Dazai piensa que es un buen momento para intervenir.

—Tenemos un antídoto para su maldición — Dice el castaño —Podemos curar a tu hermana —

El dragón no se relaja, incluso avanza un poco haciendo el círculo más pequeño.

“¡Mentiras!” “¡Van a lastimarla!” “¡Largo!” “¡Largó o los mato!” Es lo que Chuuya piensa, aunque no puede comunicarlo, solo puede valerse de gruñidos y siseos.

Yosano, se desliza entre un par de muebles rotos y luego gira por un pasillo, si Dazai no se equivoca al finalizar del corredor está la habitación donde dejaron a la princesa.

Ve la puerta, es grande y lujosa.

Abre la puerta y nota que la habitación está impecable, tal vez algunas cosas en el suelo, pero no ve polvo o telarañas, parece que alguien viene a limpiar.

Se acerca a la cama, ve a la princesa, es la mujer más hermosa que Yosano ha visto en su vida, también parece estar limpia y bien alimentada.

Está algo confundida, pues solo viven ella y Chuuya aquí.

Se acerca a su pecho y ve que su corazón late, también toma su pulso, ella realmente está viva.

De su bolsa saca una botella.

Yosano había logrado descubrir un antídoto para el veneno que había puesto a dormir a la princesa.

Con mucho cuidado abre la boca de Kouyou, abre la botella y vierte lentamente el líquido, tiene que ir poco a poco para que no se ahogue, noto que ella aún traga automáticamente, eso le facilita el trabajo.

Le tomó casi 10 minutos terminar

Luego cierra su boca nuevamente y se queda a esperar a que haga efecto.

Vio efectos secundarios como una ligera fiebre y confusión recién despiertan, entonces debe estar atenta para que la princesa no se aterre al despertar.

Pasan los minutos y ve a Kouyou abrir los ojos lentamente.

—¿Do-donde estoy?— Pregunta.

Yosano sonríe.

—Buenas noches, princesa, soy la doctora Yosano Akiko, la he despertado de u…— Antes de que pueda terminar Yosano está bajo Kouyou, la mujer la está ahorcando.

—¡¿Quién eres?! ¿¡Qué es lo que quieres!?— Le gritó la mujer pelirroja.

Yosano toma las manos de Kouyou, en realidad no se está ahogando, los músculos de Kouyou están atrofiados, en realidad es sorprendente que la haya podido tirar de esta forma.