LA HIJA DEL ARCHIDUQUE || Adaptación Jenlisa G!P

21

Jennie se levantó con los primeros rayos de sol, no había podido dormir en toda la noche. Recorrió con la vista su dormitorio y contemplo todos los baúles con sus cosas ya cerrados, tras la boda su casa ya no sería esa, su vida ya no sería igual... respiró hondo y se secó las lágrimas. Se había jurado a ella misma que nadie más la vería llorar por su compromiso, tenía que ser fuerte

Un par de horas más tarde alguien llamó a la puerta delicadamente.

-Señorita siento despertarla pero... ya estaba despierta...- Sofía no pudo contener su cara de preocupación al contemplar las grandes ojeras que decoraban el precioso rostro de Jennie.- ¿Qué acaso no ha dormido?

-No te preocupes Sofía.- Intentó tranquilizarla Jennie.- La novia no puede salir huyendo al verme.- Dijo con una sonrisa amarga.

Pronto el resto de doncellas aparecieron y ayudaron a Jennie a bañarse, tras tres horas de grandes esfuerzos por cubrir el cansancio de su rostro, ella se encontraba frente a un gran espejo de cuerpo contemplándose. Por mucho que lo intentaba Jennie no se reconocía, el reflejo que le devolvía el espejo era la imagen de una preciosa y fría novia. Y en efecto, esa era ella.

Todos los Kim pasaron por las habitaciones de Jennie para decirle lo hermosa que estaba y poderse despedir de ella en la intimidad. Pero para sorpresa de Jennie no fueron los únicos.

-Jennie...- Dijo alguien entreabriendo la puerta de su dormitorio.- ¿puedo pasar?- Los ojos de Jennie se iluminaron al contemplar a su buen amigo Taeyhung, y sin pensar en las normas ni el protocolo corrió a sus brazos.- Pequeña ... estas preciosa.

-Yo....- Era la primera vez que se veían desde que él le había propuesto matrimonio y ella había desaparecido sin darle una respuesta.- Tae... yo quería hablar contigo sobre la noche del baile...

-No es necesario Jennie, yo te quiero y sé que tú también a mí, por eso soy feliz de que te cases con la mujer que has elegido.- Jennie se puso rígida y apretó los puños... no podía llorar, no debía.- ¿Estás bien?

-No quiero entristecerte...- Dijo Jennie bajando la mirada.- pero... debería haberte dicho que sí cuando tuve la oportunidad.- Jennie no sabía de donde había salido aquella valentía, pero la verdad ya estaba dicha.

-¿Qué?- La sorpresa se reflejaba en el rostro de Taeyhung.-¿Querrías ser mi prometida ...? No, no lo comprendo...-Tartamudeo Tae.

-Nada es como tú piensas... nadie quiere que se lleve a término este matrimonio.

Tae cerro la distancia que había entre los dos y abrazó a Jennie. La paz reinó por momentos hasta que Tae la rompió.

-Debemos huir ... nos casaremos a escondidas y volveremos... será un escándalo, pero por amor se cometen locuras...Jennie..- Pregunto acercándose todavía más a ella.-¿Te casarás conmigo?.- Y sin más acercó sus labios a los de ella y la besó. Jennie tras unos instantes de confusión lo aparto cariñosamente.

-Tae....nada me haría más feliz que huir de mi horrible destino, pero no puedo desobedecer las órdenes del Rey, eso acarrearía la muerte para mi padre... estoy atrapada en este matrimonio...

Taeyhung mantuvo su mirada fija en la de Jennie, el amor que se profesaban era puro. Taeyhung la había amado desde que ella se convirtió en mujer, y siempre pensó que sería suya... sin embargo, Jennie a pesar de solo quererlo como a un amigo sabía que junto a él la vida habría sido feliz, habrían sido un matrimonio amigable, se habrían respetado y cuidado... Sin embargo todo aquello ya no importaba...

Un carraspeo hizo que ambos desviaran su mirada hacia la puerta, Taeyhung no la había cerrado al entrar, por lo que Lalisa había contemplado parte de la escena. A ninguno de los dos pareció importarle o incomodarle la presencia de este, ya que no se separaron.

-Si no le importa señor, me gustaría hablar con mi prometida a solas.- Lalisa sonó cortante y firme, por lo que Taeyhung no tuvo más opción que obedecer.

-Resérvame un baile.- Le dijo a Jennie al tiempo que besaba su frente, después se acercó a su oído y le susurró.-Te amo, siempre voy a estar ahí para lo que necesites, sea lo que sea.- Jennie no pudo evitar rodearle con sus brazos y darle un tierno abrazo, jamás encontraría a nadie tan fiel como él.

Cuando Taeyhung cerró la puerta tras de sí Jennie se atrevió a dirigir su mirada a Lalisa.

-No diré nada sobre esto si eso es lo que piensas. El rey me ha enviado un mensaje, tras la boda debemos irnos.

-Menuda novedad...- Contestó Jennie sarcástica.

-Si yo fuera tu... haría que las doncellas cargaran en un único baúl las pertenencias que consideres indispensables.- Jennie no comprendió el motivo de aquello, pero Lalisa no le dio tiempo a responder, puesto que le dio la espalda y se dirigió a la puerta.