Accidentalmente casado con un tarro de vinagre

5. Compartir pijamas

La casa de Qin Yiheng es una villa dúplex de dos pisos con un tono de color frío. Después de la entrada venía la sala, que si bien contaba con todos los muebles necesarios, se veía vacía por la razonable disposición del espacio.

Chu Yi no se sintió cómodo haciendo más observaciones, después de caminar junto a Qin Yiheng, y se sentó en un sofá.

Qin Yiheng estaba contestando el teléfono.

—Mn, está bien, envíamelo, está bien.

Con unas pocas palabras, Qin Yiheng colgó en menos de un minuto.

Giró la cabeza para mirarlo y Chu Yi se puso de pie de inmediato.

Tengo algo que hacer ahora mismo —pensó por un momento y luego agrego —para el trabajo.

—Mn. —asintió en respuesta.

Después de hablar, llevó a Chu Yi arriba. Atravesaron un pasillo y luego se detuvieron ante la puerta de una habitación.

—Este es el dormitorio.

Chu Yi asintió.

—El estudio está al lado, ven a buscarme si tienes alguna pregunta.

—Está bien.

Y así como así, Qin Yiheng se fue a trabajar.

Sin él aquí, Chu Yi se sintió mucho más cómodo. Entró en el dormitorio, cerró la puerta, respiró profundamente aliviado y encendió las luces.

El estilo de decoración simple combinaba particularmente con el temperamento de Qin Yiheng, miró a su alrededor y admiró las preciosas decoraciones en los estantes y las famosas pinturas en las paredes.

Hay un baño en el dormitorio, Chu Yi dejó de demorarse, sacó una silla y puso su bolso encima.

Como si estuviera en un viaje de negocios, trajo el juego de artículos de tocador específicos para viajes de su casa, era un bolso grande y completo.

Solo después de llevar los artículos de tocador al baño, se dio cuenta de que no había traído su pijama.

Chu Yi se paró frente al espejo del baño mientras sostenía sus cosas y pasó unos segundos aturdido.

Por lo general, no necesita traer pijamas en viajes de negocios, se acuesta en ropa interior o, como mucho, agrega un par de pantalones.

Entonces, así, se olvidó de eso cuando vino aquí.

Chu Yi inclinó la cabeza hacia sí mismo en el espejo y miró la hora en su reloj, que marcaba las 11 en punto.

También podría ir a casa a buscarlo.

Guardó sus cosas, salió del dormitorio y llamó a la puerta del estudio.

No hubo movimiento en el interior, pero Chu Yi recordó que Qin Yiheng dijo hace un momento que puede ir a buscarlo si hay algún problema. Si es así, el él en este momento probablemente no sea una interrupción.

Por lo tanto, abrió ligeramente la puerta y asomó la cabeza.

Qin Yiheng estaba sentado frente al escritorio con la cabeza baja mirando su computadora. Probablemente porque escuchó algo de su lado, levantó ligeramente la cabeza.

Chu Yi se metió lenta y cautelosamente en el estudio. Al ver que la otra parte no parecía mostrar una expresión negativa, se acercó en silencio.

Estaba usando auriculares y no habló después de que Chu Yi se acercó, por lo que asumió que era un inconveniente para él hablar en este momento. Debe estar en una videoconferencia o algo más.