CERCA DEL PURGATORIO

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Puertas cerradas

Pasó un día de lo sucedido, y el grupo volvía a estar reunido como de costumbre. Cada vez que volvíamos a mirar la ubicación, nos llegaba ese gélido escalofrío en la nuca.

Algunos se negaban a volver, como Marco y Dani, Marco por lo que le pasó la anterior vez, y Dani, por el bien de su hermano (aunque, muy en el fondo, también tenía un poco de miedo de que algo pasara).

- Manu, venga, vamos a ver de nuevo -. Le dijo su hermano.
- Eso, un vistazo -. Animé.
- Venga, vamos rápido, no vaya a ser que jueguen un partido sin nosotros.
Manu accedió y fueron los tres juntos a la ubicación destinada.

Cuando estábamos cerca de la zona, seguíamos sin sentir esa sensación extraña que nos transmitía el lugar, de hecho, nos era bastante agradable estar por esa zona ahora. Llegamos hasta donde el pasto se elevaba sobre los ladrillos del pavimento, pero, esta vez, sin conseguir ver el castillo. Ni siquiera el más alto pico de este. Optamos por avanzar un poco más, aunque en vano, ya que no estaba ahí, no había nada en realidad.

- ¡¿Q- q- q- qué?! - Exclamé intrigado.
- Pe- pero, si dice que está- aquí -. Balbuceó mientras señalaba el castillo en su móvil y su ubicación en frente.
- Vámonos ya, lo habrán demolido -. Razonó Antonio.
- Pero si sale en Google Maps -. Protestó Manuel.
- Manuel, eso es de hace mucho tiempo, esas cosas no se actualizan cada dos días -. Dije en modo de convicción a Manuel.
- Pues vámonos ya -. Refunfuñó Antonio, que estaba ya a punto de cruzar la calle.
- Aunque -, pensé yo - ¿por qué demolerían ese castillo? ¿Qué van a hacer ahí? Y, lo más importante, ¿cómo han conseguido demolerlo todo de un día para otro?
- No sé, no le des más vueltas, vámonos ya, que al final juegan sin nosotros -. Concluyó Antonio.

Nos fuimos los tres de nuevo, y llegamos a la urbanización. Contamos lo que estaba pasando a todo el grupo, pero no se lo creían y tampoco le interesaba mucho. Se nos ocurrió jugar un rato al fútbol, como era de costumbre, y poco más hicimos, aunque Manuel y yo no paramos de discutir sobre el tema en todo lo que quedaba de día.