⠀⠀⠀04. THE FEAST OF DEATH

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—LO ASESINARE Y LE DARÉ SUS HUESOS A SU DRAGÓN COMO PREMIO CUANDO NUESTRO NUEVO HERMANO NAZCA.

—No harás tal cosa, Jace —le detuvo la chica agarrando su brazo para que se calmase—. Le estarás dando lo que él quiere.

Jacaerys Velaryon bufó ante lo política que era su hermana aún con bestias despreciables como lo era su tío, eran mellizos pero un océano de diferencias los separaba cuando se trataba de tomar justicia a mano propia. Rhaelle era sabia con las palabras —una lengua filosa y estratégica que solo usaba cuando más lo necesitaba, pero aborrecía las espadas y batallas a tal punto que siempre esquivaba los pasillos que llevaban a los campos de entrenamiento.

Habían pasado horas desde que la encontró llorando en su alcoba con trozos de vidrio destruido en el piso, quiso buscar ayuda cuando la vio en aquel estado, llamar a los maestres o a su madre pero cuando Rhaelle agarró de su ropa para apretarla en sus puños lo único que pudo hacer fue abrazarla hasta las lágrimas y el hipo se detuvieran.

—¿Y qué es lo que quiere? ¿vernos enloquecer? pues te tengo una sorpresa, ya lo hizo.

—Serias estupido si creyeses que eso es lo que quiere —murmuró acomodándose en una de las sillas de su alcoba. Aguardaban a que los guardias los acompañen al salón de la cena como su madre había ordenado, incluso fue ella quien los eligió—. Quiere que nuestra madre pierda el control. Jace, hemos crecido escuchando esto de todos pero él quiere que corramos a decirle a nuestros padr— a Daemon y madre para desencadenar una guerra.

—Entonces lo resolveremos nosotros.

Luke —quien había estado guardando silencio en la cama de su hermana y escuchando todo lo que los dos Velaryon mayores decían, saltó de su asiento para encaminarse a la mesa redonda en donde los demás estaban.

—Lo hicimos una vez, ¿por qué no de nuevo?

—Porque cada cosa que nosotros hagamos afectaría a madre, Luke —mencionó la chica—. Pudieron salirse con la suya en Driftmark porque eran jóvenes, pero ahora no y mucho menos sabiendo que nuestro abuelo está en ese estado.

—Tienes razón —susurró Jace agachando su cabeza—. Los verdes casi nos ganan hoy si no fuese porque el rey se presentó justo a tiempo, pero nos tenían acorralados y Luke casi pierde su legado. Los Hightower tienen a Vhagar, a la Mano del Rey y tienen a Aegon.

—Entonces tenemos que mantenernos juntos, los tres somos más fuertes si nos apoyamos entre nosotros.

Rhaelle se sintió orgullosa de cómo su hermano menor había perdido cualquier rastro de temor al mencionar aquellas palabras. Lucerys Velaryon estaba en lo cierto, habían sido tres hermanos quienes obtuvieron Westeros y serían tres hermanos quienes pelearían en contra de los mismos dioses para mantener a su casa en el poder y lo que por derecho les pertenece.

—Pero no hablemos de guerras esta noche, por favor —pidió Rhaelle odiandose al escuchar el cansancio en su propia voz, la guerra aún no había comenzado y el peso de ella ahogaba sus pulmones—. Nuestro abuelo quiere una cena pacífica y no sabemos cuánto tiempo le queda, hay que darle eso al menos.

Una extraña calidad creció en su pecho al ver como sus dos hermanos hablaban —mientras esperaban a que los guardias los llevasen al salón en donde su madre los esperaba, sobre tres niños desesperando a la Septa para lograr escapar de las clases de como ser una dama para volverse aventureros sin miedo.

El viejo recuerdo que buscaba escaparse de las jaulas que Rhaelle había construido para lograr que su corazón se curase del dolor que este le producía. Quiso volver al pasado y advertirle que una de las personas en las que más confiaba terminaria por destruirla con su frívola actitud, Aemond Targaryen había sido un rayo de luz en el medio de la oscuridad que su familia lo encerró, y pensó que tan diferente sería su mundo si aquello no hubiese ocurrido. El chico atormentaba sus tal vez, haciendo que se pregunte cada día que hubiese pasado si ninguno fuese hijo de reyes, tal vez serían niños soñando con ser hijos de grandes señores. Era un ciclo infinito que nunca veía forma de romperse.

EPIPHANY. . . house of the dragonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora