Te querré en este y otros mundos

Una promesa que no olvidaré

Siempre pensé, porque lo hacían?
Porque Zoe quería terminar con las guardianas?
Porque Arhi se había vuelto una rebelde?
Que pasaba si rompías ese juramento...

- Podemos...ella lo hizo...

Me pare de golpe y empeze a caminar al rededor de la cama de Ekko, mientras mil ideas surcaban por mi mente, empecé a oír una risa y voces dentro de mi cabeza, eran raras, volteaba a ver a todos lados, de dónde salían

- JINX!! -su grito hizo que todo callara en mi mente- mirate!!

Voltee hacia abajo, mi piel empezó a tomar un azulado tornasol, y pude ver como las puntas de mis coletas empezaban a cambiar a un negro azulado...lo que me estaba pasando...esto era corromperse? 

- No podemos cambiar lo que pasará.

- Porque no!! -oh no, quería volver a llorar, así que me volví a recostar a lado de él.

- Porque es lo que tiene que pasar -decía mientras me envolvía en un abrazo, de esos abrazos que te tranquilizan todo- ...tu estarás por ahí, brillando con esa luz que tanto me gusta, protegiendo a las estrellas que tanto nos gustan y yo...estaré aquí esperando lo que me toque.

- Entonces...me quedaré! Hablaré con Lux, si quieren irse que se vayan!! Si me quieren tachar de rebelde que lo hagan me da igual!! Me quedo aquí contigo.

- No podría obligarte a eso.

- No lo harás, me quedo por decisión propia!

- Una vez me dijiste que si se separaban se podían extinguir más rápido, pero juntas brillaban más...no puedo dejar que pases por esto sola, el dolor que van a experimentar mis padres o mis amigos es algo que no quiero que sientas en soledad.

- Es que no quiero...no quiero dejarte...

- Quiero darte algo -se estiró hasta alcanzar su mochila y busco algo entre los cierres- es un obsequio, más bien, tómalo como una promesa -tomo mi mano y puso un objeto redondo un tanto pesado- este reloj me lo dió mi papá hace unos años, se lo dió mi abuelo, ha pasado por 4 o 5 generaciones creo.

- Porque me lo das? - lo mire mejor esa un tanto rústico, los números estaban reemplazados con rombos verdes, y las manecillas tenían el mismo color, protegidas solo por un vidrio, y cayendo de el una cadena con una argolla al final.

- Quiero hacerte una promesa, no se lo que me pase, pero, prometo encontrarte, no importa cuánto tiempo pase, o cuántas vidas tenga que vivir, te buscaré, lo prometo y cuando te encuentre, recuperare mi reloj.

- Y si me voy muy muy lejos tal vez...pasa algo peor?

- No importa aquel tan lejos vayas, o cuántas vidas pasemos, voy a buscarte en cada una de ellas.

Lo decía mientras se acercaba y me daba un beso...como extrañaba esos besos...su tacto, causaba calor por dónde quiera que pasaba su mano, se sentían asperas, y con forme recorrían mi cuerpo, se detenían unos segundos en las cicatrices hechas por antiguas peleas, no sabía que podía tantas sensaciones. Quería grabarme en la mente y se tacto. No pudimos resistir...esa noche...vimos las estrellas juntos, fue mío, y yo, fui completamente de él, supe en ese momento, que no iba a querer a nadie más que a él para el resto de mi vida, le di lo más valioso que tenía, puse mi corazón en sus manos y él puso el suyo en las mías, teníamos solo ese momento para nosotros, las responsabilidades, los juramentos, todo dejo de importarnos, solo éramos nosotros dos en ese cuarto.

Recuerdo que, después de que terminamos, se quedó dormido, abrazándome con una sonrisa en la cara, saque mi celular y tome una foto, era perfecta, la luz del amanecer estaba empezando a entrar por la ventana, nunca me percate de que tan rápido se había ido la noche, tome mi ropa, mis cosas y nuevo reloj y salir por la ventana no sin antes darle un beso en la frente, no podía quedarme ahí cuando él se despertara porque si no iba a decidir quedarme, y solo sería una preocupación para él.

Con cada paso que daba alejándome más del hospital, se rompía mi corazón, después de algo tan lindo como sobrevivir sin el? No entré al departamento por la puerta, preferí entrar por la ventana, no quería encontrarme a luz regañandome pero me encontré con otra sorpresa.

- Lulu que demonios haces aquí? -le decía mientras entraba por la ventana.

- Lux estaba un poco histérica, dijo que te ayudara a empacar - estaba acostada en mi cama comiéndose mis dulces.

- Y porque estás comiendo mis dulces? -puse mi mochila en el escritorio y me acerque a ella.

- Te noto diferente...que hiciste?

- Ammm no se de lo que hablas Lulu.

- Si, mira, tienen una cadena nueva.

- Ha, eso, si, es nueva, además yo empaco súper rápido!

Tome mi mochila de vuelta, tiré al piso todo lo de adentro y empeze a llenarla, cosas del escritorio, unas cuantas cosas del armario, mis dulces y listo ya esta lista para el viaje.

- Tu ya empacaste?

- Desde ayer -decía mientras se paraba y caminaba conmigo hacia la puerta.

Estaba pensando en que escusa inventarle a Lux cuando de la nada, al llegar a la sala ella me sorprendió abrazándome.

- Que bueno que llegaste, empacaste todo?

- Claro -le decía mientras le enseña a mi mochila, voltee a ver a las demás, llevaban al menos 2 maletas cada una - no llevan muchas cosas?

- bueno, son nuestros recuerdos después de todo no? -contesto Poppy desde la cocina.

Es resto del trayecto lo pase en automático, no sentí nada al dejar la casa, no era la primera vez que nos mudábamos.
Lo cierto, era que no quería pensar mucho, me dolía si lo hacía, Lux se dio cuenta supongo porque ya no me dijo nada después de eso.
La nave estaba a las afueras de la ciudad, nos tomo poco tiempo llegar en un taxi.
Fuimos entrando poco a poco y antes de subir sentí la mano de Lux en mi hombro.

- No te preocupes, regresaremos, y lo verás otra vez.

- No lo creo, solo...vámonos por favor.

- está bien, por cierto, linda cadena -miraba hacia mis bolsillos, veía como había enganchado la cadena a mi short y había guardado en el bolsillo-  un regalo de despedida?

- no, es una promesa...

El siguiente es el último, perdón por no poder hacer mucho, trabajo en un hospital :( y me come todo el tiempo libre, salgo muerta y regreso muerta.