𝐓𝐇𝐄 𝐖𝐑𝐈𝐓𝐄𝐑 - 𝐃.𝐌 © [CANCELADA]

Capitulo 5

AURORA ROSS'S POV

Follarte.

Es increíble como esa simple palabra hizo que sienta tantas emociones.

En el momento que lo dijo me quede en blanco, no sabia que decir y probablemente me había puesto pálida. Pero luego, estaba acostada en la cama de mi habitación con las piernas cruzadas y mordiéndome los labios ya que mi imaginación había pasado los límites, o prácticamente borrado todo lo que quedaba de respeto en mi.

Mis manos iban bajando desde mi pecho hasta mi vientre y de mi vientre hasta mis bragas, ya sentía lo mojada que estaba, empecé a mover mis dedos de arriba a bajo, subiendo la velocidad poco a poco.

Me preguntaba como sería Draco Malfoy entre mis piernas y que le gusta hacer cuando esta follando.

Estaba tan sumergida en mis pensamientos que cuando me quise dar cuenta estaba llegando al orgasmo. Sentí el líquido caliente en mis dedos y solté un gran suspiró.

Estaba agitada y con sudor que decidí darme una ducha para luego sumergirme en un sueño tan profundo y querer despertar en el siglo siguiente.

***

El día siguiente fui a una cafetería a desayunar, preferí salir y tomar aire fresco y dejar de pensar en que ayer me toque pensando en un total extraño, aunque fue su decisión quedar así ya que el nunca me escribió.

Había pedido un café y estaba disfrutando el mientras leía un libro, hasta que un chico mayor se sentó al frente, lo mire con el ceño fruncido esperando que hable.

— ¿Por qué tan sola? — preguntó con un tono arrogante y yo solo hice una mueca de asco, ya sabia a lo que venía.

— Te importa una mierda — dije fríamente y volví mi vista al libro.

— Ahh, ya entendí, eres de esas chicas difíciles — murmuró mientras soltó una leve carcajada.

— Porque no vas a joder a tu puta madre — no iba a dejar que un hombre inútil gaste mi tiempo.

— Perra estúpida — susurró mientras se levantaba y se iba.

Lo miré mientras se dirigía a la salida y cuando salió me reí, creo que la perra estúpida fue el.

Terminé mi café y ahora yo me dirijo a la salida... me sentía rara, desde que entré aquí siento que me observan.

Camine unos cuantos pasos hasta que escucho como se silban atrás, cuando me di vuelta vi al mismo chico que se había sentado conmigo en la cafetería.