Lovers

Capítulo 2

Advertencias: smut, slut-shaming y dacrifilia muy ligeros, otros fetiches pequeñitos.

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Tal vez se había excedido un poco...

Akaza se retiró con cuidado del cuerpo inconsciente del cazador, ni siquiera se había molestado en quitarle el fundoshi, solo lo había retirado un poco para meterse como un animal, ahora que Kyojuro estaba desmayado, se vio en la tarea de quitar la última prenda, apreció con morbo el miembro flácido recién descargado y sonrió con deleite al notar que había manchado la prenda, la tiró a un lado para flexionarle las piernas y dejarlo expuesto, después comenzó a masturbarse vigorosamente.

No fue difícil venirse cuando tenía a Kyojuro desnudo e indefenso frente a él, esa visión fue estímulo suficiente para satisfacerlo.

Exhaló relajado al terminar, se sentía afortunado por haberse encontrado a Kyojuro esa noche, los demás cazadores no le importaban, de hecho, debería estar encargándose de eso, pero contemplar el cuerpo del atractivo Pilar era una tarea mucho más placentera.

Se sentó a un lado de Kyojuro y permitió que este descansara un rato mientras él lo miraba fascinado.
Y aunque era muy bonito de ver, después de varios minutos se aburrió de no hacer nada así que se le puso encima y comenzó a besarle el cuello, hambriento de más placer.

Iba a aprovechar al máximo esa oportunidad, no siempre se encontraba con un Pilar que le moviera tanto la brújula, literal.

Se dedicó a besar y chupar toda la piel que tenía a su alcance al mismo tiempo que lo acariciaba, por momentos el rubio suspiraba por las atenciones recibidas, posiblemente estuviera soñando algo agradable, luego Akaza pudo ver que tanto él como Kyojuro se estaban excitando de nuevo, cuando estuvo completamente duro se introdujo una vez más, en esta ocasión más suave.

Kyojuro jadeó asustado despertando repentinamente del profundo sueño en el que estaba.

- Akaza, ¡¿Qué haces?! -reclamó molesto.

- Despertando a mi príncipe. -respondió divertido sin dejar de moverse dentro de él.

Kyojuro apenas estaba recobrando la conciencia cuando Akaza ya había tomado un ritmo, cada embestida era profunda y directa, en cada una el rubio gemía extasiado, no quería admitirlo en voz alta, pero realmente lo estaba disfrutando, se sentía culpable de reconocer que muy en su interior eso es lo que había buscado desde el principio.

- Adoro que lo estés disfrutando tanto, Kyojuro. -le dijo con la voz cargada de deseo, como si le hubiera leído el pensamiento.

Kyojuro se mordió los labios para silenciar un jadeo al escuchar aquello, Akaza río un poco ante el gesto, ya sabía que el cazador se calentaba aún más con sus palabras.

- No te preocupes Kyojuro, no voy a juzgarte por tus gustos. -dijo dándole un beso en la mejilla. - Puedo hablarte como si fueras un príncipe o si lo prefieres como si fueras una zorra.

Esa vulgar degradación, junto a las penetraciones incesantes hicieron que Kyojuro alcanzara otro orgasmo, gimió avergonzado y cerró fuertemente los ojos al darse cuenta qué es lo que lo había provocado.

- No sabía que te excitara tanto que te dijeran zorra. -gruñó Akaza aun empujando en su interior.

- Ya cállate. -gimoteó Kyojuro abochornado, soltando varias lágrimas.

Al verlo llorar, Akaza sintió una inexplicable sensación.

- Creo que me voy a venir. -jadeó al borde del clímax.