Rosé

14.8K 1K 201
                                    

Desde otro punto de vista...

Habíamos llegado a la pizzería con Lisa, le pedí que cumpliera con lo prometido y es que me comprará mis papitas antes de que Irene y su amiga llegarán, obviamente lo cumplió y me compró, no sin antes reclamarme el hecho de que la haya extorsionado, me ofendí muchísimo por su acusación, pero lo acepté.

- Lo tomó, pero me ofende muchísimo. – Dije después de que me hayan entregado las papitas, ella sólo rodó los ojos.

- En dónde nos sentamos. – Preguntó.

- En dónde quieras, con tal de comer, estoy bien en dónde sea. – En verdad no tenía preferencia, así que, no tenía problema con eso.

Una vez ya sentadas, Lisa me empezó a contar lo que había pasado en casa de Jennie, mientras yo seguía comiendo obviamente.

- ¡Zas! No te atrevas a tocar mis papitas Lalisa, te lo advierto. – Le había pegado en la mano antes que lo tocará.

- Enserio no piensas compartir conmigo Rosé. – Reprochó.

- Tu no querías, te pregunté si ibas a querer, para que compraras dos y dijiste que no, ahora te aguantas. – Y seguí comiendo.

- Bien. – respondió con un puchero en los labios.

- No, no te atrevas a hacer ese puchero, que yo no soy Jennie y no pienso caer ante tus encantos ¿ok? – Sentencié, sabía que Lisa tenía ese poder en Jennie, pero en mi no.

- Ok, ok, basta, te invitaré, pero solo un poco, okeeeey. – Esta bien, no pude aguantar, soy tan débil.

- Eres adorable. – Lisa río ante mi cambio repentino, ya me parecía a Jennie con tantos cambios de humor.

- Lo sé, pero no te aproveches, ¿ok? – Lisa festejó que le haya dejado comer conmigo, obviamente le dejaría comer, solo quería molestarla un poco.

Terminamos de hablar de su ex novia y sin poder creernos las jugadas de la vida, la misma estaba entrando en el mismo lugar que nosotras, ella venia con la fastidiosa de Jisoo y el idiota de Sam, realmente no tenía nada en contra del chico, pero a mi amiga le cae mal, así que es motivo suficiente para que me caiga mal a mí también...Ley de la amistad le dicen, bueno yo lo digo.

En verdad ni quería mirar a Jisoo, es una fastidiosa, sangrona, estúpida, babosa, hermosa, guapa, sus ojos son lo más bellos que he visto, sus labios, esos labios de corazones como le suelo decir, bueno solo me lo digo a mí, son mi debilidad, jamás le admitiría eso a ella, ashhh a veces no la soporto, siempre me lleva la contraria y odio verla con otra que no sea yo, pero a la vez no puedo estar cerca de ella, porqué, ay ya ni yo sé por qué. Esto me pasa por juntarme con Jennie, sí, definitivamente.

- Ahí viene tu amor. – Otra fastidiosa despertándome de mis pensamientos.

- Tu amor dirás, porqué yo no veo a Lauren Jauregui por acá y ella es mi único amor. – Bromeé, porque mi primer amor es la fastidiosa innombrable.

- Y la mia Camila Cabello, asi que no viene al caso. – Ni ella misma se lo creía, pues sigue babeando literalmente por Jennie.

- Lo que tú digas, Liziada, lo que tú digas. – Su cara se volvió seria después de eso.

- Cómo sea. – Cortó. – ¡A que hora dijeron que vendrían Irene y su famosa amiga?

- No lo sé, me imagino que en breve, al menos ya me contaste todo lo que querías? – Indague mientras seguía comiendo mis papitas e ignorando a las personas que habían entrado al lugar.

- Hola Lisa. – Una Jisoo sonriente llegando a nuestra mesa.

- Hola Jisoo, cómo estás? –Lisa saludo de vuelva.

Haré lo que sea por volver a ser tuya - Jenlisa ¡GiP!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora