Haré lo que sea por volver a ser tuya - Jenlisa ¡GiP!

Primera vez

POV JISOO

- Jisoo, amor, espera... - Decía Rosé mientras la seguía besando el cuello.

- Mmmh, no quiero parar. - Volví a mi lugar y seguí besándola.

- Jisoo estamos en la sala de tu casa, siento mucha vergüenza de que hagamos esto aquí, además tus padres no tardan en llegar, que pensarán de mí, cuando vean que prácticamente nos estamos comiendo aquí... - Traté de regular mi respiración y de ocultar la ternura que me causaba su nerviosismo, prácticamente yo estaba igual, pero lo tenía que disimular.

- Mmm comernos, me gusta... quiero, lo quiero... - Mordí mis labios intentando acercarme nuevamente a ella, pero puso su mano en mi rostro con la señal de "detente".

- ¡Ashhh!... no tiene nada de malo. - Me quejé y estiré mis labios en un puchero.

- Mi amor, por favor entiéndeme, estoy muy nerviosa, esto... esto realmente no me lo esperaba, cuando recibiste la llamada de ellos pidiéndote que me trajeras a cenar, literalmente quise correr de donde estábamos. - Confesó apenada mi novia.

- Um, sí lo sé Rosie, también me asuste cuando me dijeron eso, la verdad no me imaginé que iban a dar ese paso, después de que haya discutido con ellos sobre nosotras.

- ¿Qué? ¿Discutiste con ellos por nosotras? - Cuestionó con los ojos bien abiertos.

- Sí, es que Rosé... yo ya no estaba dispuesta a separarme de ti, y cuando por fin aceptaste estar conmigo, yo enfrente a mis padres diciéndoles que, aunque no lo acepten o se interpongan yo seguiría estando contigo... Rosie, yo estoy muy segura de lo que siento por ti y no pienso volver a separarme de ti nunca. - Estaba demasiado enamorada de la chica que tenía en frente mío y haría lo que sea por demostrárselo.

- Jisoo, no sabes cuánto te amo, te amo demasiado... - Esta vez fue ella la que agarró mi rostro y me beso, ya no era un beso tierno, ni suave, sino todo lo contrario, esta era feroz y hambriento, mis manos fueron directo a su cintura, las apretaba intercambiando la presión entre suave y luego fuerte, podía sentir como la piel de Rosé se erizaba, causando esa presión en mi estomago que me gritaba excitación, ella me estaba excitando con los movimientos de sus carnosos labios.

Un sonido de carraspeo hizo que nos separáramos abruptamente, y maldecí por dentro al ser interrumpidas, pero mi maldición se quedó a medias cuando me di cuenta de quienes se trataba.

Eran mis padres, quienes se mantenían estáticos en su lugar, pero mi padre tenía los ojos cubiertos con las manos de mi madre, quién los tapó para que no viera semejante escena.

- ¡Mapres! - Dije de los nervios.

- Jisoo... - Susurró Rosé e hizo que corrigiera mi palabra.

- Quiero decir padres... yo... bueno, ella es Rosé, creo que ya la conocen, bueno... ella y yo, nosotras, ustedes... ¡AAAAA! ... ella es Rosé, mi novia. - Agarré las manos de Rosé para darle un poco de tranquilidad, tranquilidad que obviamente yo tampoco tenía.

Mi padre seguía teniendo los ojos cubiertos. - Cariño, puedes ahora, digo, si quieres, no sé, quitar tus manos de mi rostro, por favor. - Pedía mi padre enredándose, y dejando a la vista que tan parecidos éramos.

- Sisisi cariño, lo siento... - Quitó su mano y mi padre ahora pudo fijar bien su vista hacía nosotras.

- Señores Kim, mucho gusto, yo... yo me llamo Roseanne Park, pero me pueden decir Rosé. - Mi novia saludaba tímidamente, sin saber cuan feliz estaba por tenerla ahí, una sonrisa se deslizaba por mi rostro sin darme cuenta.

- Desde ahora en adelante preferimos llamarte nuera, claro si ¿eso no te molesta? - Decía mi madre y mi corazón empezó a latir más rápido de lo normal.