PLEASURE©

16 - Amor en la oscuridad

El amor de Sirius y Remus, así como el de James y Regulus, por más amigos que lo supieran o personas que sospecharan, seguía siendo un secreto. Claramente les gustaría gritarle a los cuatro vientos que se gustan, besarse en público e ir tomados de la mano a todos lados. Pero no podían, los setentas seguían siendo salvajemente homofóbicos, y el mundo mágico extremadamente conservador.

Peter seguía sin entender cómo sucedió, simplemente se dieron las cosas. Los chicos lo dejaron como carnada en medio de una broma y los Slytherin lo capturaron, pero fue uno, en especial, el que lo vio a los ojos y lo desafío a pelear por su dignidad.

Peter por supuesto no se negó, pero tampoco estaba seguro de hacerlo.

El castaño le dijo a los demás chicos que se retiraran, El, esposado en una silla temió por su vida.

— ¿Te gusta el fuego? — Hablo en castaño, con un encendedor en la boca.

Peter tomo aire para hablar.

— Tu padre es un hombre bueno, seguramente está orgulloso de ti. — Hablo Peter con sarcasmo.

Barty rodo los ojos arrogante.

— Oh, dime más, no sabes cuánto me importa. Me arrepentiré de todos mis pecados. — Exclamó, dejándose caer de rodillas frente a Peter.

— Deberías.

— Oh, tú tampoco eres un santo.

— Mejor que tú, sí. Sí, lo soy.

— Ay, no, entendiste mal. ¿Mejor que yo? Hm, no. Nadie. Pero que sabe un lame botas como tu.

Peter enfureció.

— ¿Yo? ¿A qué cabron se le ocurren estás cosas?

— Claro... Cómo si no te hubieran dejado de carnada para poder hacer sus bromas infantiles, a tus costillas. ¿Qué hubiera pasado si no me hubieras atraído, Pettigrew?

Peter abrió los ojos, ¿A qué se refería con eso?

— Moriría con honor.

— Cielos, tu honor está más abajo de donde yo me iré.

— El tuyo está más abajo.

Barty rio.

— Déjate de juegos, Peter. ¿No te sientes inferior? Digo, yo me sentiría. Esos chicos con sus bromas, siempre de un lado a otro, haciéndote pasar como el chico que sobra. Las sobras que nadie mira... Pasan como si fueran los reyes del mundo. ¿No estás cansado?

Peter gritaba.

— ¡Déjame ir! ¡Sueltame!

Barty acercó un cuchillo a su cuello.

— ¿Por qué tanto escándalo? Estás bien. No te haré nada que no quieras, Pete. Solo estoy diciendo la verdad.

Peter tomo aire para gritar aún más fuerte.

— Nadie te escuchará, nadie vendrá. Mientras tanto, cuéntame, ¿Tienes novias? ¿O todas están ocupadas viendo a James Potter y a Sirius Black? Oh, y me olvidó de Remus, que tonto. Sigues siendo su sombra.

Peter rio con enojo.

— Ni siquiera sabes nada.

— Oh, perdón, Pete. Solo quiero saber ¿Potter sigue de arrastrado con Lily? ¿Sirius salió del clóset?

Peter abrió los ojos con sorpresa.

— Por Merlín, no te sorprendas, se nota que Sirius, ya sabes, se prende con la varita equivocada.