Saved By The Spell // LUMITY // LUMELIA

1. Amelia ¿Que Sucedio?

Lucia's side

—¡Amelia! —escuché desde mi habitación, mi madre Camila gritaba el nombre de mi novia, salí con rapidez de allí con un top deportivo y unos pantalones de dormir, era media noche, no era normal que llegara a esa hora a la casa.

—¡Amelia, hija! ¿¡Que te sucede!? —escuché denuevo, mi mamá no sabía que Amelia sufría de asma y de ataques epilépticos. No vimos necesario contarlo.

Me apresure, al llegar encontré a mi mamá en la puerta, con Amelia en el suelo, desmayada. Luz y Luca, mis hermanos también habían escuchado los gritos de mi madre y siguiendo mis pasos, llegaron.

—Ok, tranquilicense —me agache al lado de mi mamá, estaba temblando.

Ella era veterinaria, sabía como tratar la epilepsia, pero el shock no la dejo actuar.

Mire a Amelia y.. sentí el terror recorrer mis articulaciones, ella estaba golpeada, su cabeza sangraba, parecía como si hubiera tenido un ataque epiléptico hace pocos momentos. La alce, la lleve a la sala y la acosté en el sillón.

—Lucia ¿Qué sucedió? —me preguntó mi hermano, Luca, el más calmado por el momento.

—Menos preguntas y más acción, ve a buscar las vendas a la cocina, Luz, deja de temblar así o te vas a desmayar —ordene mirando a mis hermanos, Luz temblaba de miedo, Luca corrió a la cocina por las vendas.

—Mija —dijo mi mamá mirando a Amelia—. ¿Q-que fue todo eso?.

—No te lo habíamos dicho por qué no quería que te preocuparas por ella, pero Amelia sufre de ataques de epilepsia y asma, ¡Luca demonios apúrate! —estuve presionando la pequeña apertura que tenía Amelia en su cabeza para que parará un poco el sangrado.

Luca me dio las vendas, pero no el algodón.

—Luz, pásame el algodón que está en la repisa —le dije a Luz, la pequeña que aún temblaba de terror, se apresuró para agarrar la bolsa de algodón y dármela.

En cuanto logré vendar a Amelia, me senté en el suelo y la tome de la mano. Pedía al titán para que no fuera un desmayo de horas, la última vez... Termino en el hospital.

Mi madre cerro la puerta de la entrada y mis hermanos se acercaron viendo si Amelia estaba bien.

—Tranquilos... ella estará bien —ambos miraban con preocupación, sabía que no creían mucho, estaban muy preocupados por ella al igual que yo. No era la primera vez que se desmayaba frente a mi, pero todavía me preocupaba mucho.

—Lucia —Luca me llamo, acercandome una botella de alcohol—. Esto servirá para que recupere la conciencia, pon un poco en el algodón y ponlo en su nariz, al sentir el olor... puede que despierte...

Le agradecí sonriendo, agarre la botella de alcohol y puse un poco del líquido en una bola de algodón, lo puse en la nariz de mi novia y ver si lograba recuperar la consciencia.

Pasaron largos minutos hasta que logro despertar, mi madre se fue a preparar un té para ella. Mis hermanos volvieron a la cama, tenían colegio en la mañana, mi madre regresó con nosotras a la sala y le dió el té a Amelia que todavía estaba algo perdida.

—Amelia, querida, ¿Qué sucedió? —le preguntó mi madre sentándose a su lado.

—Mamá, ahora no, le preguntaremos después, ¿De acuerdo? —le dije poniendo mi mano en la pierna de mi novia.

Amelia termino el té y se arrecosto en mi hombro, me preocupaba como se encontraba, los golpes que tenía no parecían por el ataque de epilepsia, parecían hechos por alguien más. Mi madre fue a dejar la tasa, mientras tanto, Amelia aprovecho para pedirme algo.