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27 DE MARZO DEL 2010

En mi habitación lo único que escucho son los gemidos de Kazutora saliendo de su boca mientras sigo con las fuertes penetraciones, pero no importa cuánto tiempo pase no puedo dejar de pensar en su piel blanca o en su voz.

Mas fuerte Mikey. - me empieza a exigir. - Por favor es la última vez que lo haremos. – alza sus manos para poder tomar mi cara y darme un beso, pero en ese mismo momento volteo la cara, de reojo puedo ver sus ojos llenos de tristeza.

No puedo, simplemente no puedo terminar de darle esa oportunidad que él quiere, mi mente ni mi corazón dejan de pensar en él.

Fueron dos años de relación seria, pero nunca me llegue a enamorar de él, es una locura no importa que tanto lo intente.

Nunca tuve otro amorío solo era y fue Kazutora.



"Tal vez necesitas estar solo"



Siento como Kazutora llega al clímax por ende decido darle penetraciones mucho más fuertes.

Mikey, más duro. – trato de complacerlo. - Mikey, hay. - me dice justo cuando Kazutora se corre en su estómago.

Me estoy a punto de venirme, y solo piensa en la piel blanca de Haruchiyo, en sus labios rosados adornados con las cicatrices que le hice en ese entonces, sus ojos azules llenos de lujuria. - Sanzu. - alcanzo a decir antes de correrme y caer en mi cama a un lado de Kazutora.

Siento su respiración se va tranquilizando y cuando llega a estar normal se empieza a levantar ve que empiezo a cambiarse.

Otra vez dijiste su nombre. - empiezo a hablar. - En estos dos años nunca lo olvidaste verdad? - me levanto para poder acercarme a él. - ¿Qué hay sobre nosotros?, dime Mikey alguna vez te importe. – cuanto estoy en una distancia considerable es cuando le doy un abrazo.

Lo siento tanto, Kazutora te quiero mucho, pero...- no puedo terminar de decir cuando solo me suelta un pequeño beso.

Lo sé, en tu corazón solo sigue Sanzu, verdad. – dice mientras me corresponde el abrazo. - ya verás que cuando salga con alguien mucho mejor que tu tendrás celos de lo que dejaste ir.

Por supuesto que sí. - le digo mientras sonríe. - eso no quita el hecho de que eres uno de mis mejor amigos Kazutora. - me regalo por ultimo un beso en la frente.

Sabes, el otro día lo vi. - me empieza a contar. - y me sorprendió saber que ...- pongo mi mano en sus labios.

No es necesario, no quiero saber nada. – le digo mientras sus ojos me miran con sorpresa. - Llevo casi 3 años sin saber cómo esta o que hace ya un así no puedo olvidarlo. - le doy una sonrisa. - Ahora imagínate si supiera algo de él, solo se lo necesario. - el solo siente con la cabeza.

Bueno me voy. - es lo último que me dice antes de dirigirse a la puerta. - No te preocupes conozco la salida.

Me vuelvo a tumbar en la cama para poder dormir, pero justo en el momento en el que cierro los ojos puedo verlo, con sus ojos de color Ámbar brillantes como el oro y su pelo rosa largo, pero de repente la imagen de mi mente cambia por esa vez, la vez que lo lleve al hospital con la piel pálida por la falta de sangre, y mis manos nuevamente se llenaron de sangre de Sanzu, justo como cuando teníamos 9 años, trato de dejar de pensar en el pero mi mente solo piensa en Sanzu ya son casi tres años en que no lo veo, solo he sabido cosas de Sanzu por parte de Emma, como el hecho de que regreso a Japón hace casi un año y que todavía mantiene una relación con Nana creo que había dicho que se iban a casar a finales de Diciembre.

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