El manto blanco comienza a cubrir a la enorme ciudad de New York y para Elsa Arendelle es otro recordatorio que se suma a su aburrida vida independiente.
En esta época del año la ciudad se adorna de luces, los árboles pierden sus hojas y las temper...
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"Coqueteo, risas y la campaña anual"
Estoy dando vueltas por todo el apartamento, literalmente. Tengo la tina lista, el vestido tendido sobre mi cama, el rizador sobre la mesita de mi habitación y el maquillaje esparcido por el tocador.
Todo es un desastre.
Ayuda porque me estreso.
Camino hacia la tina con miles de pensamientos en mi cabeza, sigo sin creer que el pesado de Jack haya aceptado, pensé que no lo haría y no es como si me importará del todo, pero, debo admitir que es satisfactorio que acepten tus invitaciones de vez en cuando y qué él lo haya hecho, bueno, jamás imaginé que eso me hiciera feliz de una manera difícilmente de explicar.
Salgo de la ducha y me visto con la ropa elegida, no soy una mujer que le importe mucho su imagen, sin embargo, esta noche quiero lucir hermosa, es esa sensación de sentirte bien contigo misma sin una razón aparente.
O bien, quizás habría una, pero, soy muy testaruda como para asumirlo.
Siento la tela satin deslizándose por mi cuerpo, es un vestido hermoso, es rojo, con las mangas cayendo a los costados de mis hombros, me ciñe la cintura y toda la parte superior, su caída es larga y volátil regalando ese toque de elegancia. Me ondulo el cabello y me lo peino en un simple recogido, — aquí le otorgo créditos a la chica de YouTube por su tan necesitado tutorial.—. Me maquillo con unas simples sombras en los ojos que profundicen más la mirada, aunque, dudo al momento de elegir un labial.
AnnPecas: Dime que te pusiste el rojo.
Sonrío al notar el mensaje de Anna, parece más entusiasmada que yo.
Elsa: Si, de hecho lo tengo puesto.
AnnPecas: Buena elección, espero un buen maquillaje con esa bomba de vestido.
Elsa: En eso estoy, no sé qué labial ponerme :(
AnnPecas: Ponte uno rojo y que no sea tan chillón.
Elsa: No es acaso, ¿Demasiado?
AnnPecas: Créeme, con esa piel quedarás divina. Por cierto, ¿Quieres que Hiccup y yo pasemos por ti?
Elsa: No, iré por mi cuenta.
AnnPecas: ¿Estás segura?
Y si, sonriendo como idiota veo mi apariencia en el reflejo del tocador.
Elsa: Si, estoy segura.
Deja de enviarme mensajes, por lo que intuyo que estará preparándose para la campaña también, creo haber escuchado a Hiccup comentar que el tiempo y la pelirroja no se llevaban precisamente genial.
Camino hacia la sala y me encuentro con una Winnie pegada al ventanal del apartamento. Es una noche preciosa y aunque la gata parece notar mi presencia, se limita a bostezar y erguir su cuerpo en busca de mayor comodidad.
