El Encanto Prohibido [Harry Potter]

Cap 3

Ahora solo me importaba ver a Potter por los pasillos, algo que detestaba desde mi más profundo ser, esperaba alguna señal del universo que me alejara de aquel sexy chico que hacía que mi mirada se perdiera.

-¡Adhara! ¡No me escuchas!- dijo Zabini agitando su mano delante de mí cara.

-Si, estoy despierta, que idiotez quieres ahora- respondí con mi característica frialdad.

-¿En que piensas?- miro fijamente mis ojos y sonrio picaramente-¿En quién piensas?- Blaise te odio por conocerme mejor que yo misma.

-En nadie- lo miré y sus ojos negros me devolvieron la mirada - En Potter- dije y el me miró como la Niña del Exorcista

-¿¡En Potter!?- toda la sala común nos miró mal y yo le pegué fuerte en el brazo, - ¿¡en Potter!?- susurró

-Si, no se porque, pero el maldito no sale de mi cabeza

-Pues vete a hablar con el- encogió sus hombros.

-Si me besa no voy a rechazarlo

-No lo rechazarías aunque no te besara

Salí en busca de Potter, y lo encontré leyendo solo, estaba sentado en una ventana con la espalda apoyada, estaba muy entretenido en su libro que no sintió cuando me senté a su lado, y asomé mi cabeza por la ventana admirando las maravillosas vistas.

-¿Porque me buscabas Black?- preguntó directo, me giré y miré sus ojos verdes, hermosos.

-Porque quería hablar contigo- dije con un poquito de nerviosismo.

-¿Que querías decirme?- pregunto curioso.

-¿Porque me odias? Nunca te hice nada, nunca te odie- dije con los ojos fijos en su reacción.

-Tu padre mató a mis padres, a mi madre, nunca los conocí, soy huérfano por su culpa- dijo con algo de enfado contenido, yo pestañee con rapidez, no quería llorar delante de él.

-No los mató, yo no se quien es mi madre, mi padre está en Azkaban por un crimen que NO cometió, mis tíos me odian y me torturan, soy una marginada porque seré una mortifaga, solo tengo un amigo y muchos enemigos, todo el mundo me odio y yo también me odio, TÚ idiota de Potter, me odiaste sin conocerme, me hiciste llorar, me quitaste la sonrisa, me convertiste en un monstruo y ¡sigues creyendo que mi padre mató a los tuyos! ¿De verdad crees que tu vida es difícil?- dije eso con la voz rota al final, y me acurruque para no llorar, odiaba que al estar cerca de él mi cuerpo reaccionara de esta forma tan sensible, me miró fijamente a los ojos.

-No, no pienso que tiene la culpa- soltó al final- pero necesito echarle la culpa a alguien de que no tenga padres, de que nunca los conoceré, nunca me verán crecer, nunca conocerán a mi novia, nunca me verán casarme, nunca verán a mi esposa, nunca podrán jugar con mis hijos, necesito a alguien a quien echarle la culpa, para no echarme a llorar, porque he despertado en un cuerpo que nunca quise, en una situación que nunca pedí, me duele porque se que en el fondo por mucho que luche contra Voldemort, no van a volver- dijo escondiendo su rostro en sus piernas, ahogó un sollozo, temblando me acerque a Harry, él lo había pasado muy mal y tenía sus razones, demasiado justificadas, lo abracé con mucha torpeza y le susurré al oído.

-Te entiendo Harry- y el paró de sollozar, se limpió los ojos y se revolvió el pelo avergonzado por llorar delante de su supuesta enemiga.

-Tu también lo has pasado muy mal, se que te trate muy mal, perdóname Adhara, lo siento de verdad- susurró

-Te perdonaré cuando demuestres que lo sientes- dije en voz baja y el chico sonrió y plantó un beso en mi mejilla, cogió su libro y se fue con la sonrisa en los labios, me toqué con delicadeza la mejilla, y sonrei en medio de un suspiro, me sonrojé, cuerpo idiota que reacciona así.