Lazo Inquebrantable [KAGEHINA omegaverse]

¿Relación De 3?

—Bien, ya tenemos todo el plan listo, lo padres de Shoyo pensarán que ya hemos terminado, así que tu Shoyo bajaras con una cara de Tristeza, mientras tu Tobio-Kun, estarás consolando a Shoyo, todo el tiempo. Así nadie sospechara nada, si en algún momento llega a ser necesario besarse, háganlo.

—Entonces... ¿Como actuó?

—Bien amor, pon tu cara de decepción.

—Bien... ¿Así está bien?— Dijo Hinata para así bajar su cabeza y parecer deprimido.

—Deberían contratarte en Hollywood por lo lindo que eres.

Hinata da un par de risas y se acerca a Atsumu para plantarle un beso, Kageyama como siempre se les queda viendo y siente una punzada en el pecho.

—Dejen de estar tan juntos, tus feromonas se quedarán impregnadas en el.

—Ni siquiera eres nada de el y ya estás celoso.

—¡No estoy celoso pedazo de mierda!

—Eso ni tu te la crees tío, como sea. Quiero que sepas que no importa si tu eres el "Destinado" de Shoyo, el siempre será mío.

Un gruñido de parte de los 2 alfas se escucho en la habitación, ambos con el ceño fruncido, parecía que querían matarse.

—Oigan... Ha sido un día agotador, será mejor que dejemos de peleas y descansamos algo. ¿Atsumu te quedarás a dormir?

—Por mi esta bien amor.

—Bueno... Entonces, si Kageyama se queda a dormir, iré a buscar un futón.

—¿Y por que yo dormiría en un puto futón?

—Porque yo soy la pareja de Shoyo, tu solo eres un crío que apareció de la nada.

—Ya basta, la cama es grande, se puede levantar sospechas si duermo solo contigo Atsumu, así que durmamos los 3 en ella, yo pido ir en medio.

—Muy bien, dormiré con la ropa que he dejado en tu casa por las noches que tuvimos sexo.

—Así que si han tenido sexo...

—¿Que esperabas...? ¿Que Hinata fuera virgen mientras estaba conmigo?

—Atsumu no le des tanta información a este tío.

—Es que esta celoso— Dijo Atsumu para así sonreírle de manera diabólica.

—He dicho que no estoy celoso, solo siento curiosidad.

—Pues que se te quite tío.

Hinata empezó a quitarse sus prendas en frente de ambos, el azabache y el otro chico voltearon a ver a Hinata. La hermosa figura del pequeño los dejaba sin palabras, era como ver una hermosa figura de una chica. Su piel blanca, su cabello desordenado, sus muslos ni tan exageradamente grande, su cintura pequeña, sus piernas. Todo el era perfecto.

—¿Que les pasa a los 2?... ¿Nunca habían visto un puto hombre cambiarse?

—Claro, pero no a uno tan hermoso— Dijo el Miya acercándose a Hinata para atraparlo en la pared y dejarlo sin escapatoria.

—Atsumu... Nos están viendo.

—Da igual, a el no le importa, así que podemos hacer el ruido que queramos.

—Claro que me importa imbécil, yo también quiero descansar.

—Tks... Amor, ¿no puedes pedir permiso para ir a mi casa?