Capítulo 11: Perdóname

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Pov (T/n)

Sus labios jugaban con los tuyos mientras te pegaba contra una pared y te veía serio. Sus ojos dorados se notaban más de lo normal y pasaba su mano por tu cabello ¿Sabes cuánto esperé por esto?

Su voz era extraña... No era el tono molesto o preocupado de siempre... Ésta vez era diferente.

Muzan tiene un punto, ERES MI MUJER Y NADIE MAS QUE YO, PUEDE TOCARTE.

Nerviosa lo miras y tratas de alejarte de él pero te toma del cuello y se acerca a ti no, ésta vez no...

⚠️ Ya saben, cuidado con el contenido ⚠️





Abriste los ojos de par en par y negaste cómo podías n-no... Por favor... Kyōjurō y yo...

Yo soy Kyōjurō, tú eres mi mujer. Bajaba poco a poco tu ropa dejando ver tu hombro derecho y éste comenzaba a besarlo y morderlo con desesperación. Tu cerrabas los ojos y con su mano libre comenzaba a estimular tu zona.

Dejabas salir un leve gemido y éste te besó pegando su cuerpo al tuyo. Estabas perdiendo el control sobre ti misma y sentías cómo introducía un dedo dejando salir un pequeño grito de satisfacción. Nadie más que yo, te tocará... Eres mía, mía y de nadie más... Éste gruñía mientras rompía tu ropa interior y te estimulaba más deprisa.

Tu mente estaba en blanco, no sabías cómo reaccionar. Tu cuerpo se estremecía y el solo se limitaba a besar tu cuello y pecho.

Sentías cómo algo tibio bajaba por tus piernas y tratabas de zafarte, pero nada lo detenía.

P-por favor... Detente...

Sin aviso, tomó una de tus piernas para alzarla y entrar en ti. Cerraste tus ojos mientras dejabas salir un gemido.

Comenzaba a moverse con cuidado sin soltar el agarre de tu cuello y jugaba con tu oreja izquierda. Al paso de unos minutos, toma ambas piernas para terminar cargándote y pasabas tus brazos por su cuello mientras sus pieles chocaban y sus respiraciones se escuchaban.

Haré que lo olvides y no conozcas a nadie más que a mí... Lo permití una vez... Ya no pasará de nuevo... Muerde leve tu cuello, se gira y te lanza a la cama que había en el cuarto.

No intentaste moverte siquiera, algo te decía que si lo hacías, sería más intenso y así fue. Se subió sobre ti y entró empezando a moverse con más brusquedad cómo si intentara borrar el hecho de que habías estado con Kyo anteriormente.

Se escuchaban gemidos, gruñidos y risas de satisfacción por su parte, mientras tú solamente jadeabas o gemías a ratos rasguñando su espalda.

No pensabas con claridad, sentías varias sensaciones recorriendo tu cuerpo y apretabas las manos en las sábanas de la cama. Se detuvo, se separó de ti levemente y te giró en la cama pegando un lado de tu cara a ésta desgarrando parte del kimono que tenías puesto, comenzaba a estimular de nuevo tu zona y jadeabas acelerada.

Entraba sin aviso y gritabas apretando tus manos en las sábanas de la cama con más fuerza.

Mmmm, solo ésta vez... Solo ésta... Llegaba al clímax fuera de ti y sonríe al ver cómo arqueas tu espalda y jadeas en la cama.

En Mi Otra Vida: Hasta encontrarte (Kyōjurō x Lectora) 2ª parteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora