Tocando el cielo

cuidado!! (editada)

   Eran las 4 de la tarde, ya habían terminado las clases en la universidad, y dos chicos estaban hechos un manojo de nervios, se repetían por décima vez, que jamás volverían a ser tan confiados, no se esperaban que ese mismo día tuvieran que ir al lugar que toda persona "normal" teme, ellos sabían cuan peligroso era ese lugar, siempre escuchaban rumores con respecto a esas carreras, sabían que siempre había gente herida, drogada o incluso muerta. Para ellos ese sitio era prohibido. Si bien querían disfrutar, conocer e incluso cometer algún pequeño error, sabían perfectamente que ese sitio jamás sería el indicado.  

    Comenzaron a averiguar cómo llegar al lugar y que atajo tomar para que no fuera tan tedioso ir y volver, ya que era un lugar muy apartado del sitio de donde ellos Vivian, porque sí; ellos eran los niños ricos de Busan, sus familias era gente muy importante, ellos lo sabían, pero así como sabían las comodidades que ellos tenían, también sabían que no era su culpa, no eran personas hostiles, ni mucho menos hijitos de papa, sabían que podían obtener ciertos beneficios, pero siempre eran ganados con base en sus propios esfuerzos, el sitio donde Vivian distaba mucho de la vida normal, grandes mansiones, enormes jardines, y habitaciones que perfectamente cabían más de 10 personas sin estar incómodos, pero efectivamente como dijo soobin, ellos no sabían lo que era luchar por el peso del día a día, y de eso se darían cuenta más tarde. 

— ¡Tae! ¿Crees que sea realmente malo ese lugar?— preguntaba el rubio.

 — tú sabes que no tengo miedo, al contrario de alguna manera esto me tiene extasiado, pero no dejo de pensar que puede ser demasiado peligroso, jamás hemos salido del centro, y ahora estamos en camino a un lugar que en primer lugar, no tenemos ni la mínima idea de dónde queda, y segundo, no sabemos con qué nos encontraremos ahí—  tae soltó un soplido.

 — la verdad Mimi, no tengo idea que nos depara esta noche, solo espero poder salir vivo, y que nuestros padres no se enteren de esto, porque si eso pasa Mimi, ¡¡estamos muertos!!!—.

Siguieron el rumbo que le indicaba la gente, ellos estaban muy intimidados, las personas de los alrededores lo miraban como carne fresca en medio de una jauría hambrienta, y no, no exageraban, los miraban así, las personas sabían que esos niños bien vestidos, no eran de por ahí, se notaba en su pelo demasiado brillante, sus joyas y sus ropas.

— ¡cariño! — Un hombre se acerca a ellos... — ¿qué hacen por acá, dos bellas damitas?—, el tipo reía de manera extraña.

— este no es lugar para Uds., ¿qué buscan? ¡Talvez los pueda ayudar y guiar! — ellos no volverían a confiar en nadie, eso lo aprendieron el día de hoy, — no, solamente necesitamos llegar a las carreras del Distrito Geumjeong— el hombre sonrió de lado.

 — ¡ahh!!! ¡Las carreras!!! ¡Si están por comenzar, si quieren los puedo llevar, será gratis niño bonito! — dijo mirando a Taehyung; jimin no se perdió de esa mirada y se puso más cerca del peligris.

 — ¡no gracias, señor!, estamos bien, solo necesitamos saber cuánto más debemos caminar para llegar, nuestros novios nos están esperando, pero como hoy correrán no pudieron venir por nosotros— dijo jimin, mirando serio al hombre, este se tensó, ¡no quiso preguntar quiénes serían los novios de esos chicos, con solo saber que corren ahí, ya para ellos es prohibido, sin imaginar que se estaba tragando tremenda ¡mentira!

— Oh, ok chicos, no hay problema, solo caminen dos cuadras más hacia abajo, llegaran a una bodega solitaria, entren ahí, y sigan el camino de banderines, esos los guiaran a las pistas, y por ende a sus novios— jimin sonrió de lado, y dio una leve reverencia al tipo, sabía que se había tragado todo.

— muchas gracias, señor, que tenga buena noche—, y comienzan a caminar, solo dan un par de pasos más, y jimin comienza a reír a carcajadas, tae lo miraba sin saber qué le pasaba a su amigo.

— ¡Mimi que te pasa!— se detiene — ahí tae, no viste la cara del idiota, cuando le dije que nuestros novios eran corredores jajajá— jimin solo reía, tae ya estaba muy nervioso, necesitaba llegar cuanto antes a ese lugar, para poder retirarse lo antes posible y olvidarse para siempre de ese día.

Pero el destino le tenía una sorpresa, y claramente jamás se olvidaría de ese día.

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  Siguieron el camino trazado por los banderines; al llegar, escucharon la música, la risa, incluso fueron capaces de ver a lo lejos a parejas teniendo sexo, sobre el pasto, los autos, incluso en sus motos. Era una locura total, sonaron unos altavoces, indicando que comenzaría la carrera, todos los que estaban ahí se acercaron a los límites de las pistas esperando el pitido que daría inicio a la primera carrera.

Jimin tomo la mano de tae, se acercaron al límite un poco más adelante de la línea de meta, sin evitarlo sus ojos chocaron con unos ojos cafés que lo miraban con rudeza, trago saliva sin dejar de mirar al chico, jamás pensó que una mirada haría que su cuerpo sintiera esa pequeña corriente que le atravesó todo el pecho, se llevó su mano a lado del corazón y sin de dejar de ver al chico de ojos café, sonrió ladino.  

Yoongi, no supo en qué momento su corazón comenzó a latir de esa manera, ni siquiera la adrenalina de la carrera le provocaba lo que ese chico rubio de labios gruesos provocó. Sintió un pitido que lo nublo, no se dio cuenta en qué momento comenzó la carrera, solo se quedó mirando a ese chico. 

—¡¡¡SUGA, mierda avanza, que te pasa idiota!!— le gritaba Jungkook.

 Tampoco sabia que le estaba pasando a su amigo, yoongi a los segundos salió de su trance, ya había perdido bastante tiempo necesita ganar esa carrera, y mucho más necesita saber quién es ese lindo niño, acelero su moto, se perdió entre los demás competidores, dio varias vueltas hasta que llego a la meta, había ganado. Jimin lo miraba sonriente y muy extasiado, no sabía por qué, pero necesitaba felicitar a ese chico, y aunque su amigo se lo impidiera.

ÉL lo haría.

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