Ese día había sido agotador para Iván, a él le gustaban mucho los viernes, porque comenzaba el fin de semana, pero habían sucedido cosas que mermaron su humor una tras otra. Para la tarde, ya se encontraba completamente cansado y sin ánimo alguno de siquiera respirar.
Y eso Rodrigo lo había notado, a pesar de los insistentes «Estoy bien» de Iván, él sabía que pasaba algo más, y haría algo para hacer sentir mejor a su chico.
-Ivii- llamó el muchacho mayor, apoyándose en los hombros ajenos para rodearle el cuerpo con un abrazo cariñoso. Dejó un casto beso en su mejilla, que provocó el sonrojo en el rostro del apodado Spreen, y Rodrigo rió ante su reacción tímida. -Tengo algo para vos.
-¿Ah, sí? ¿Qué es?- indagó con curiosidad, volteándose para quedar frente a frente con el petiso y posicionó ambas manos en sus caderas, repartiendo pequeñas caricias en éstas.
-¿Te gusta el pastel?
Iván le miró, algo confundido por la repentina pregunta, sin embargo, respondió positivamente con el sonido «mhm» que hizo temblar su garganta.
La sonrisita que surcó los labios de Rodrigo se ensanchó por la respuesta ajena y se alejó para sacar de su mochila un envase de plástico con una rebanada de pastel de moras dentro. -Lo hice ayer con mi vieja, te guardé un pedazo- pronunció al fin, para luego extenderle el tupper.
Iván se enterneció por la inocente acción de Rodrigo, y se permitió regalarle una de sus sonrisas más genuinas, aquella que denotaba la felicidad de tenerlo a su lado. Aceptó el pequeño obsequio y se dedicó a comerlo con el oji-verde.
Después de eso, sus ánimos se habían renovado mágicamente.
Una oleada de sentimientos cursis llegaron junto con el recuerdo de aquél viernes del mes pasado, sonrió casi inconscientemente y colocó la segunda cosa que le hacía feliz.
2- El pastel de moras.
-¿Y esa sonrisita? No me digas que estás escribiendo cosas relacionadas con Carre- se burló Tomás, dándole una mirada graciosa que provocó que Iván se apenara aún más.
-Cerrá el orto.
Tomás soltó una carcajada bastante ruidosa, y a consecuencia de ello la profesora le reprochó por hacer ruido y no concentrarse en su tarea. -Pelotudo- exclamó el pelinegro.
-Así me querés.
-Yo sólo quiero a Rodri.
Rob puso los ojos en blanco, y sin más, continuó con su lista.
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cinco cosas que me hacen feliz.
Fanfiction𝐑𝐎𝐃𝐑𝐈𝐕𝐀𝐍 𖤐﹙𝒊̲.﹚' if i have to make a list of the things that makes me happy, your name will never be missing. ' © 𝖻𝗒 ﹫𝘄𝗵𝗼𝘀𝗯𝗹𝘂𝘂𝘃 | 2O22 𝗡𝗢 𝖽𝖾𝗆𝖺𝗇𝖽𝖺𝗋, 𝗇𝗈 𝗌𝖾 𝖼𝗈𝗇𝗌𝗂𝖽𝖾𝗋𝖺 𝗼𝘁𝗽 !!