Fetiche | NOMIN (ADAPTACION)

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Jaemin espero muchas cosas al despertar, bien, el había imaginado que el vampiro sería de esos que «follan y se van» ¡De verdad! Y cualquiera pensaría igual.

Sin embargo en cuanto abrió los ojos lo primero que notó fue que la almohada que estaba abrazando y que olía tan bien no era exactamente una almohada, no.

Él estaba prácticamente sobre Jeno, abrazado a él como si estuviera encadenado y lo curioso era, que sentía que estar encadenado a él así no sonaba tan mal como debería ser.

Lo observó por lo que parecían ser horas, detallando cada mínima característica del vampiro y amando cada vez más ese pequeño lunar bajo uno de sus ojos.

Ah~ se estaba volviendo más idiota de lo que pensaba por tener ese tipo de ideas.

— ¿Ya terminaste de alabarme? — la voz del vampiro fue ronca y rasposa, lenta y perezosa, fue sexy.

— ¿Por qué te alabaría?

— Soy un dios. — el toque de burla en sus palabras más la media sonrisa divertida que se formaba en su rostro mientras sus ojos seguían cerrados fue lo que le hizo pensar a Jaemin de que...

— Eres malo en los chistes.

Jeno bufó antes de pasar un brazo por la cintura del pelirrojo mientras la otra jugaba con el cabello de este.

— Soy el mejor en eso, cómo casi en todo.

— El ego por los cielos es lo único que te hace un Dios.

— Deja de hablar y vuelve a dormir.

— Pensé que los vampiros no dormían.

— No lo hacen... bueno, no por mucho tiempo, pero me siento muy cómodo así y quiero disfrutarlo.

Jaemin sonrió inconsciente antes de acomodarse y reposar su cabeza en el pecho desnudo del azabache mientras que sus dedos hacían figuras imaginarias sobre este.

— ¿No teníamos hoy una caza con el líder de Byota? — preguntó luego de largos minutos.

Jeno jadeo frustrado antes de cubrirlo con todas las mantas que encontró aún teniéndolo sobre él.

— ¡Nayeon! — grito él y Jaemin no dudo en esconderse debajo de las mantas cuando la puerta fue abierta y de esta una chica de cabellos rosados entró.

La vergüenza en color rojo se pinto en sus mejillas mientras se aferraba al cuerpo desnudo de Jeno observando a duras penas a la chica que había entrado, pero la mano de Lee en su cintura era una distracción, que pasaría si bajara un poco más... solo un poco.

— ¿Si señor? -— preguntó ella no atreviéndose a alzar la mirada.

— Dile al señor Mark que pospondremos la caza hasta la próxima Luna llena.

La chica asintió y tras una reverencia salió de la habitación dejándolos solos nuevamente.

— Y... ¿que piensas hacer durante todo ese tiempo?

Jeno rió ronco y Jaemin tuvo miedo.

El azabache lo tumbó de nuevo sobre las sábanas para posicionarse sobre él nuevamente.

— Amarrarte a la cama.

Si Jaemin pensó que lo de ayer había sido cosa de una sola vez estaba muy equivocado, el pelirrojo experimentaría que se siente tener más de siete orgasmos en menos de dos horas.

Serían días largos y duros... muy duros.

∆

— ¿Y cómo estaban? — sus pies se balancearon de adelante hacia atrás mientras prestaba atención a las palabras de la chica.

— No pude ver mucho, no sabía que me haría el señor Lee si observaba demasiado pero por lo que noté el joven pelirrojo estaba sobre él tapado con las mantas.

Taeyeon chilló alto mientras zarandeaba a Tiffany con fuerza preocupante.

— Ah~ espero que ya lo haya marcado si no lo hace yo misma le daré una mordida en el cuello y no será para una linda marca.

— Eso es incestuoso — se metió Tiffany mientras desviaba la mirada a los lápices sobre el escritorio.

— Eres tierna cuando estás celosa cariño. — la vampira rió cuando la chica ocultó de ella su sonrojo. — ¿Y para que te llamó?

— Dijo que le avisara al señor Mark que pospondrían su casa para la próxima Luna llena.

— Eso es en tres días... ¿pensará que puede quedarse en esa habitación por tres días?

— Yo creo que esa es su idea mi señora.

— Ugh, ni siquiera sé va a acordar de comer, quiero que le lleven cada medio día y por la noche una bandeja con comida para él y su pareja.

— ¿Pareja de quién?

Tae ya no sabía que hacer para deshacerse de esa chica, tal vez podría lanzarla a una fosa con serpiente y sellar la salida con una enorme piedra.

Era buena idea.

— De mi hijo mayor claramente — contestó la peli negra con una sonrisa orgullosa. — Jeno piensa quedarse con su pareja tres días en su habitación.

Observó con deleite como Ryujin apretaba sus manos en puños, a ese paso no dudaba de que las uñas de la vampira rasparían su piel.

— Tal vez debería decirle a ese humano que no se haga muchas ilusiones, no me gustaría verlo herido después de que Jeno lo bote por la rampa como todos los demás. — dijo ella con una sonrisa cínica.

— Si quieres, pero tendrás que esperar tres días porque Jeno tendrá ocupado al chico todo ese tiempo, por lo que Nayeon me dijo ellos dos han disfrutado mucho el día de ayer, no me sorprendería que el chico ya estuviera marcado.

Y la chispa ardiente se apagó para dar paso a la explosión de la bomba.

Ryujin grito al cielo antes de salir de aquella habitación echa una furia dejando atrás a las tres mujeres.

— Volviendo al tema, también llévenle a mi hijo más botellas de lubricante, estoy segura de que ya gastaron la que guardaba ahí.

— ¿Por qué usted pidió botellas de lubricante para todas las habitaciones mi señora? — preguntó Nayeon sumamente curiosa y con el ceño fruncido.

— Joy para casi todo el día ordenando cada habitación en esta casa.

— Y eso que tiene que ver mi señora. — Nayeon aún no entendía, pero lo haría...

Taeyeon sonrió antes de bajarse del escritorio y alisar los doblez de sus prendas.

— Pregúntale a ella.

Y se fue de ahí sin decir nada más con la cabeza en alto y el orgullo inflado.

— Tiffany...

— No preguntes y ve a decirle tu mandado al señor Mark.

Tiffany huyó antes de que fuera demasiado tarde.