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La bella noche se había hecho presente un día más, permitiendo le a la luna superior número tres correr entre los techos y árboles para llegar junto a su amado quien dormía tranquilamente luego de una misión . . . Aunque cuando llegó a su destino verlo de es manera le rompió el corazón, nunca podrá acostumbrarse a verlo de tal manera, su pareja estaba lleno de vendajes y por lo visto su corazón latía muy lento ¿ Él estaría bien cierto? ¡Claro que sí! Kyojuro era el humano más fuerte que conocía. . . Esto no era nada para él.
— Kyojuro. . . Psss pss, hey despierta por favor mi lindo sol~—
— Kyo lindo . . . —
— Mi lindo omega ~—
Aunque quería no podía abrir sus ojos o moverse para saludar al dueño de esa hermosa y grave voz, kyojuro se encontraba descansando en la finca mariposa ¿Motivo? Regresaba de una misión que le dejo muy mal herido, quería creer que no era de gravedad, solo recuerda que había recibido un fuerte golpe en la cabeza y la cadera cosa que le dejo inconsciente al instante de decapitar al demonio, si sus recuerdos son ciertos al menos lo logro antes de caer matar al enemigo y eso lo dejaba muy tranquilo.
— Kyojuro. . . Por favor abre los ojos ¿Si? Te traje comida . . .—
“ Akaza. . . Mi dulce alfa ”
— Son panes rellenos de ah . . . Lo olvide jaja pero estoy seguro de que te gustará sol mío, así que levántate y veme . . .—
“ Siempre tan distraído amor ~ . . Vaya, tengo hambre y realmente huelen deliciosos ”
— Kyojuro por favor. . . Promete que vas a despertar.—
“ ¿Porque no lo haría? Solo fue un pequeño golpe ”
— Kyojuro se que eres muy fuerte y vas a cumplir con tu promesa ¿Verdad?—
“ Siempre cumplo Akaza sin importar que. . .”
— No me dejes kyojuro. . . Te necesito —
“ estoy bien no estés triste ¿Ok? ”
— No quiero estar solo . . . No soportaría vivir sin tu sonrisa. . . Kyojuro yo . . . Te amo—
Escuchaba pero no podía hablar, verlo o estirar su mano para transmitir a su querido demonio que todo estaría bien y esos golpes no eran nada para el pilar, Akaza sollozaba a su lado y no podía hacer nada para tranquilizarlo . . . Esa noche fue bastante larga para ambos amantes que lo único que deseaban era poder compartir el calor de ambos cuerpos en un tierno abrazo y consolarse mutuamente.
