Chosen Bride +18 [Completado]

Final

Dayeon

Todos lo saben...

Todos saben que cada vez queda menos tiempo para que muera y Jin me está evitando, ya han pasado 6 meses desde que tuve a Hoyeon y Jin tiene un mes escondiéndose de mí, cada vez que está solo y yo aparezco, él desaparece y vuelve luego, solo está conmigo si hay otro presente, pero aunque él haga eso moriré igual, debo apresurarme.

Me llegó la idea de hacerlo por la mañana, cuando está duro al momento de despertar, me sentaré y haré el trabajo, pero primero debo atarlo. Esa noche no dormí porque sé que si duermo despertaré casi al mediodía, cuando noto que el sol está saliendo fui hasta su habitación, allí con sumo cuidado lo até a la cama, bajo su sábana sin hacer un movimiento brusco, bajo sus pantalones deportivos, el se movió varias veces pero al final no despertó, lo dejo por un rato hasta que decido bajar su ropa interior pero lo suficiente para que saliera su polla la cualquier está muy dura y lista.

Comienzo a estimularme un poco para poder lubricar, me subo a la cama y él despierta con mi peso.

—¿¡Qué crees que estás haciendo!? —no dije nada solo me penetré hasta el fondo gimiendo en el proceso, él echa su cabeza hacia atrás y suelta un gruñido.

Comienzo a embestir sin decir nada, sé que quiere detener esto así que tengo que excitarlo para que no quiera detenerse, por ese motivo no dejo de moverme en ningún momento, sus gemidos y los míos se mezclan en la habitación, a veces dice mi nombre suplicando que me detenga, pero solo aumento la velocidad, sus dedos aprietan mis caderas y se que está por llegar, igual yo. Me embisto rápido y llegó gritando su nombre y luego se viene él, mis manos están en su pecho el cuál sube y baja, agotado por la actividad física que acabamos de tener.

—¿Así que decidiste violarme? —me río.

—Si lo disfrutas no es violación —su semblante cambia— Esto iba a pasar, tarde o temprano, igual moriré Jin, déjame dejarte este regalo —dije tocando mi vientre.

—Igual ya no puedo hacer nada, ya está hecho —suspira mientras me salgo de él y caigo dormida en sus brazos.

*

En los siguientes meses podía sentir como mi cuerpo me dejaba de responder, a veces dormía tres días seguidos y los chicos lloran casi todos los días viendo cómo mi cuerpo se deteriora, ya no puedo levantarme, tengo 7 meses y ya me he mentalizado lo que me pasará en pocos meses, es algo que tengo claro, pero tratamos de no hablar de eso, los chicos siempre me tratan bien y nos hijos pasan tiempo en la habitación.

Cada uno se tomó una foto conmigo y otra con nuestro respectivo hijo o hija y fueron al mundo humano para imprimirlo y colocarlo en un marco. De verdad que los amo, no cambiaría el hecho de haberlos conocido. Espero que estas fotos le duren muchos años y así mis hijos sepan quién fue su madre. Hoy los reuní a todos en la mesa, estoy en una silla de ruedas que ellos trajeron del mundo humano, los chicos sirven las comida con los hijos en brazos, cierro mis ojos y trato de imaginarme allí ayudando a poner la mesa, cuando los abro todos me están mirando.

—Solo estaba pensando, estoy bien —les doy una sonrisa que ellos saben que es falsa.

—Debes dejar de darnos esa sonrisa falsa, sabemos por lo que estás pasando —dice Yoongi.

—No sonrías si no quieres —menciona Jungkook.

—Quiero que me recuerden con una sonrisa en mi rostro, ¿Es mucho pedir?

Todos niegan y volvemos a la cena, un dolor en mi parte baja me hace gritar de dolor, es más fuerte que todos los demás, mis huesos están crujiendo y he quedado sin aire, todos se acercan gritando cosas que no logro entender, solo sé que es grave.

—¡Va a nacer! —es lo único que sale de mi boca.

Jin me toma en sus brazos, veo que está llorando mientras me lleva a la cama, intento levantar la mano para limpiar sus mejillas, pero estás me pesan.

—El momento llegó —dije y puedo escuchar a los chicos llorar fuertemente— Ayúdame a traer a nuestro hijo sano y salvo, Jin.

Todos se colocan a mi alrededor mientras Jin está frente a mí, mi vestido cubre mi cuerpo así que él lo levanta para poder ayudarme con el parto.

—Voy a necesitar que pujes amor —yo asiento pero no tengo fuerzas para pujar.

—Dejáme esto a mí, anda a darle tu energía a Dayeon —le aconseja Namjoon.

Jin se coloca a mi lado pasándome energía y así fue como pude comenzar a pujar.

—¡Detente! —Namjoon grita— Viene con el cordón enredado.

—Hay que hacer una cesárea —todos niegan, yo sujeto las manos de Jin— Nuestro hijo debe nacer, ya mi destino ha sido fijado, él debe vivir. Jamás olviden cuánto los amo, gracias por haber estado allí para mí, cada día fue especial porque ustedes la hicieron especial, eso es algo que me llevaré conmigo, solo díganle a mis hijos que su madre los ama y estará cuidando de ellos.

Tae trae un cuchillo y yo tomo algo para morder y cuando estoy lista muerdo duro y asiento, proceden a cortarme mientras me sujetan y yo grito en la toalla que me han dado para morder, cuando escucho el llanto es que dejo de morder y sonrío sabiendo que se ha cumplido.

*

Narrador

—Amor mira a nuestro hijo —cuando Jin y los demás voltean para ver a Dayeon, está yace sin moverse en la cama.

Yoongi y Hoseok que eran quiénes sostenían sus manos lloran frenéticamente, los demás al verla sin vida comienzan a llorar.

Una luz brillante aparece en la puerta y allí está ella junto con el dios de los muertos.

—Esta vez, si me la llevaré —dice él y comienza a caminar, Dayeon derrama una lágrimas antes de desaparecer en la luz.

Siendo acto seguidos los gritos desgarradores de los chicos...

Esa noche llovió, los espíritus estaban perturbados así que eso afectó a la montaña, los espíritus habían perdido a su novia.