Emilia Morgan
Cinco días. Joder solo cinco días para casarme y ser la esposa de Sebastian. Todo era tan frustrante aun.
Tenía que ir a la última prueba de vestido solo con mi madre y abuela esta vez, más tarde me iría con Liam y Nick a la cabaña de mi familia para poder pasar un buen fin de semana.
Los invitados de la boda ya habían confirmado su asistencia y en dos días más empezarían a llegar a la ciudad para poder presenciar mi matrimonio con Sebastian.
—queda poco—comenta mamá
—poco—asiento
—¿nerviosa?—pregunta la abuela
—no tanto—murmuro—se como es Sebas y he tenido la suerte de llevarme bien con el.
Mamá asiente mientras entramos a la tienda de novias, la modista nos sonríe y nos hace pasar a una sala para poder hacer la prueba. Me desvisto y mi madre me ayuda a ponerme el vestido para luego subirme a un pequeño taburete.
—ya esta quedando poco, ¿estas nerviosa?—me pregunta la modista
—no—respondo
—muchas novias no pueden ni dormir de los nervios—comenta
—tiene razon—mi abuela bebe de su jugo—la noche anterior de mi boda no dormí casi nada, tuvieron que ponerme maquillaje extra para cubrir las ojeras
—yo no estuve tan nerviosa, más bien el nervioso fue Mattheo—murmura mamá
La modista soltó una risa y sonríe de lado.
—mi hijo estaba paranoico, creía que te escaparías con los niños
—Mattheo es tan exagerado—opina mamá
—así lo amas—canturreo
—tienes razon—sonríe mamá
—¿tienes todo preparado para tu noche de bodas? Supongo que quieres sorprender a tu marido —dice la modista
—quizas—reí—. ¿Que tan especial es la noche de bodas?
—es la consumación del matrimonio—dice mi abuela—. Antiguamente se usaba para probar la pureza de la novia y sobre todo poder consumar el matrimonio.
—¿pureza de la novia?—frunzo el ceño
—la virginidad, si no llegabas virgen eras un vergüenza para la sociedad—dice mi madre—. Ahora todo eso ha cambiado, muchas mujeres casadas no llegan virgen a sus noches de bodas pero aun existe ese grupo de personas que se espera hasta su boda
Asiento levemente mientras que ajustaban el corset a mi medida, definen los últimos detalles y después nos informan que el vestido llegaría en cuatro días más a la Residencia.
Salimos de la tienda para ir en busca de unos cafés y donas, mamá se pide un Ice Latte mientras que mi abuela se pide un capuchino, me pido un Frapuccino de chocolate y compartimos una caja de donas
—agradezco que no hayan venido la abuela y la madre de Sebastian. No tolero a esas mujeres—opino
—opino lo mismo—apoya mi abuela—estamos en pleno siglo veintiuno y aun creen que debemos de cubrir la piel
—me dan dolor de cabeza, no se como las tolerare después de la boda. Solo espero que el piso de Sebastian quede ya listo
—¿Mattheo esta en la bodega ahora mismo?—pregunta la abuela a mamá
—no, este día no fue, dijo que estaba cansado y que deseaba dormir por unas horas más así que envío a Christopher a encargarse de todo—explica mamá
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𝗬𝗼𝘂𝗿 𝗤𝘂𝗲𝗲𝗻
RomanceEmilia Morga ha tenido todo en su vida, y cuando digo todo es todo. Dinero, lujos, atención de sus padres, hermanos menores con los cuales compartir y entre aún más. Emilia no solo ante la vista de la gente es la hija de un importante empresario co...