EL SIRVIENTE DE OREJAS CAIDAS / 垂耳执事 (ABO)

Capítulo 65

Para equilibrar la tasa de crecimiento de las glándulas en un estado estable de recuperación, el Dr. Zhong retiró a Yan Yi de los medicamentos de crecimiento durante un mes, tiempo durante el cual solo confió en la feromona reconfortante que le dio Lu Shangjin para proporcionarle la energía necesaria para recuperarse.

   
 Lu Shangjin abrió el armario en el dormitorio, Yan Yi se acurrucó en una bola y se escondió en la esquina, enterrándose con ropa para fingir que no pasó nada.

   
 "Yanyan, se acordó anoche, sé obediente", Lu Shangjin se inclinó hacia el armario, tocó la cola de Yan Yi y tiró suavemente, "Sal".

    
Yan Yi seguía fingiendo estar muerta.

    
Lu Shangjin retiró la ropa esparcida y sacó a Yan Yi, sujetándose la axila y sacándola del armario: "Estará bien en un tiempo".

   
 Yan Yi fue llevado sobre sus hombros, incapaz de moverse, y su trasero las piernas se le caían: "No quiero ir al hospital". Si no quieres ir, tienes que ir". Lu Shangjin le dio unas palmaditas en el trasero, "Estoy contigo, ¿a qué temes? de."

    
Después de un rato de persuasión, eran las dos de la tarde cuando el automóvil llegó al Hospital Anphia.

    
Yan Yi yacía nerviosamente en los brazos de Lu Shangjin, apretando el brazo de Lu Shangjin, su cola temblaba.

    
Los pantalones acababan de bajar media pulgada, Yan Yi sostuvo la cintura de los pantalones con miedo y se apoyó contra Lu Lu en el cuello de Jin: "No, esto duele tanto, duele tanto, quiero ir a casa a cenar, ¿puedo hornearte un pastel por la noche?"

   
 Hace unos días, Yanyi aprendió a hornear pasteles por capricho, y cuando le llevó un trozo de pastel de fresa a Lu Shangjin, que acababa de regresar del trabajo, él conmovió a Lu Shangjin hasta la muerte.

    
Desde entonces, Yan Yi ha aprendido a usar pasteles para jugar coqueto con Lu Shangjin.

    
"Entonces tienes que ponerte una inyección", Lu Shangjin lo abrazó y le lanzó una feromona reconfortante.

    
Cada vez que lo llevo a tomar la hormona estimulante del crecimiento, tengo que tirar por la mitad de mi vida. El conejito que suele ser travieso y salta, y la apariencia lamentable después de la inyección es realmente angustiante.

    
Los ojos del conejito estaban rojos después de la inyección y se atragantó suavemente en los brazos de Lu Shangjin.

    
"¿Por qué necesitas inyecciones todos los meses?", Yan Yi se secó los ojos y preguntó, ahogado: "¿Estoy enfermo?"

    
"No, no lo pienses". Lu Shangjin apoyó su cabeza y besó la esquina de su frente. , "¿Puedo conseguirlo? Vámonos a casa. "El chico genial de dieciséis años sintió que era una pena llorar frente a los demás, y no podía dejar que su alfa se lo llevara.

    
Después de salir de la puerta del hospital, se limpió la cara y, en silencio, metió la mano en la palma de Lu Shangjin, tratando de sostener a su alfa, pero su mano se soltó.

    
Yan Yi se quedó atónito por un tiempo, mirando aturdido la mano liberada, su corazón de repente se sintió vacío y no podía decir de dónde venía esta pérdida familiar de pérdida.