EL SIRVIENTE DE OREJAS CAIDAS / 垂耳执事 (ABO)

Capítulo 79

¿bueno?

    
La palabra se atascó en su garganta, Lu Shangjin buscó a tientas durante mucho tiempo, levantó la colcha para Yan Yi, la concentración de feromonas calmantes se debilitó gradualmente y dejó de liberarse gradualmente.

   
 Mis ojos están un poco borrosos, y siempre puedo recordar vagamente el tiempo en que todavía estaba en la escuela, con mi edad y nivel, todavía era la primera elección en una escuela especial donde se reunían las élites.

    
En el primer semestre, obtuvo S en 16 materias y S en la evaluación general. No importa cuán frío y retraído sea un niño, en el momento en que obtiene una buena calificación, siempre quiere mostrársela a sus padres.

    
Fingió arrojar el formulario de evaluación general sobre la mesa sin darse cuenta, y esperó los ojos de Lu Rin por el rabillo del ojo mientras leía el libro.

    
Lu Lin miró el formulario de evaluación general sobre la mesa y le pidió que hiciera un entrenamiento diferenciado para superar el nivel M2.

   
 Ese día, Lu Shangjin lo contradijo nuevamente y le preguntó a Lu Lin con voz fría que solo era un alfa de nivel J1, qué calificaciones tenía para exigir que su hijo alcance A3, y debe haber un límite para el éxito de su hijo.

   
 Lu Lin casi nunca lo abofeteaba, pero ese día lo abofeteó frente a más de una docena de guardaespaldas, diciéndole que se fuera y que no esparciera ese asqueroso olor a narciso frente a él.

   
 El agua caliente de la ducha se derramó sobre la herida, lo que hizo que Lu Shangjin se despertara un poco.

    
Fue a bañarse, el olor del líquido del baño cubrió sus feromonas, y luego se subió a la cama y lo abrazó a través de la delgada colcha.

   
 "Tal vez, es un poco incómodo oler demasiado", Lu Shangjin sonrió levemente y frotó las glándulas de Yan Yi con la punta de la nariz, "Mi esposa huele bien y a nadie le disgustaría".

    
Yan Yi le dio la espalda , frente a él Dirección invisible, mordiéndose silenciosamente el labio.

    
Salí del trabajo un poco más tarde el fin de semana y las rosas de la floristería estaban agotadas. Lu Shangjin puso un pequeño montón de aliento de bebé en la caja de bocadillos que trajo.

    
Cuando Yan Yi pasó por la entrada, vio que su rostro estaba un poco cansado, pero tan pronto como lo vio, recuperó su energía y le entregó el regalo que traería todos los días.

    
Los ojos de Alpha son un poco extraños, como un cachorro abandonado en una caja de cartón en un basurero en un día lluvioso.

    
Tal vez el trabajo no ha ido bien últimamente y Alpha también está un poco cansado. Deje que se encuentre con obstáculos en todas partes después de regresar a casa, Yan Yi sintió que era innecesario, por lo que tomó el regalo de su mano.

    
"Muy bien hoy", Lu Shangjin sonrió como si se sintiera consolado, entró y abrazó la cintura de Yan Yi, bajó la cabeza y besó su frente, "¿El bebé te intimidó hoy? Le daré una lección más tarde". Yi empujó su pecho: "No"

    
"Te ves muy bien hoy" Lu Shangjin se aferró a él hasta que Yan Yi dijo que tenía hambre, luego fue a la cocina para lavarse las manos y preparar la cena.