- ¿Estás listo, mi amor? -
- Espera -
Por un momento no distinguió nada, y luego pudo ver a su hermoso esposo sonriéndole a través de la cámara.
- Te ves lindo - mordió su labio - ¿te hiciste algo? -
- No me he afeitado en dos días - tocó su rostro.
- Te ves tan sensual -
- Tú te ves sensual - lo observó completamente - déjame verte -
- ¿Qué quieres que haga? - canturreó juguetón.
- Abre tu camisa -
El menor sonrió y obedeció la orden, comenzando a acariciar de arriba a abajo su trabajado abdomen.
- Bien. Eso me gusta -
- Yo también quiero verte -
Sin necesidad de preguntar, Jeno se deshizo de su playera en un movimiento rápido y colocó la cámara a la altura de sus abdominales.
- ¿Quieres esto mi amor? -
Sintió su boca aguarse.
- Cariño, quisiera tanto estar contigo -
- Puedo hacer que sientas que estoy ahí - sonrió - mete tu mano en tus... -
- ¡Jaemin! -
Su sangre hirvió de rabia.
Puto.
Anciano.
Decrépito.
- No puede ser - respiró hondo - juro que ese hombre va a matarme -
- ¿Crees que esté bien? -
- Jeno... -
- Nana - hizo un puchero - ¿que tal si cayó? -
- Tu papá no se cayó - bramó, incorporándose para abotonar su camisa con desgano - solamente está fastidiándome -
- Pero irás a revisar ¿no? -
- Por supuesto que sí - lanzó un beso a la cámara - ¿te llamo después? -
- Lo retomaremos luego -
- No creo que me queden ganas - murmuró enojado.
Sintiéndose profundamente molesto, se encaminó a la habitación de su suegro, encontrando que el mayor lo esperaba a la orilla de la cama.
- ¿Ahora qué quieres? -
- Buenas noches - saludó sarcástico.
- Buenas noches - respondió - ¿qué quieres? -
- Mira, niño insolente. Realmente no te pediría esto de no ser absolutamente necesario, pero... -
Se detuvo a medias, limitándose a mirarlo avergonzado.
- ¿Pero? - presionó - el tiempo es oro, Jung -
- ¿Puedes ayudarme a tomar un baño? - dijo finalmente.
El joven lo miró perplejo.
- ¿Qué? ¿Por qué? -
- No logro colocar bien la estúpida bolsa y el otro día casi me mato en la regadera -
- ¿No puedes solamente no ducharte? - sugirió - estás enfermo. El mundo lo perdonará -
- Pensé que sí. Pero llevo solamente un día y me siento asqueroso. Además - negó - no puedo mantenerme así esta noche -
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Just the two of us
أدب الهواةLo primero que hizo, fue arruinar las rosas del jardín. Pero se lo merecía. Su estúpido suegro merecía todo lo que le pasara todo ese mes que pasarían varados juntos y en completa soledad. Se aseguraría de que sufriera tanto como él. Ninguno de lo...