El dios de la guerra discapacitado se convirtió en mi concubina

Capítulo 48

Sin embargo, la alegría de Jiang Suizhou no duró mucho.

Después de que Chen Ti fuera condenado, porque Qi Min se negó a dejarlo en libertad, repetidamente envió declaraciones escritas a la cúpula, esforzándose mucho para provocar a Hou Zhu. Poco después, varios miembros relacionados con Chen Ti en el Ministerio de Ritos fueron condenados. Aunque los cargos no eran tan graves como los de Chen Ti, fueron más o menos degradados.

Pero Jiang Suizhou no esperaba que Ji You también estuviera entre esos rangos.

Este caso originalmente se detuvo en este punto, y de ninguna manera estaba relacionado con él, pero después de dos días de haber sido liberado de prisión, fue degradado bajo la jurisdicción de cargos laxos y fue trasladado a Huizhou.

Huizhou no estaba muy lejos, ni tan remota como Lingnan, pero a la edad de Ji You, ser degradado fuera de la capital equivalía a terminar su carrera como funcionario.

Ji You no tenía cargos penales, pero Pang Shao aún intentó por todos los medios ponerle las cosas difíciles, por lo que pensó en esta idea. Cuando lo pensó, Jiang Suizhou supo que Pang Shao estaba usando a Ji You para pelear consigo mismo, para darle una advertencia.

Pang Shao le estaba diciendo, que mientras este bajo el liderazgo de Pang Shao, incluso si el rescate de alguien fuera exitoso, no tendría un buen final.

Jiang Suizhou sintió que su aliento se atascaba en su pecho.

Durante dos días consecutivos, no buscó a Huo Wujiu. En su estudio, encontró algunos de los libros raros ocultos del propietario original, junto con algunos billetes de plata para viajar, e hizo que Meng Qianshan los llevara a la residencia de Ji You.

Meng Qianshan pronto regresó.

Ji You aceptó esos libros, pero devolvió los billetes de plata.

Meng Qianshan le devolvió los billetes de plata a Jiang Suizhou y dijo: "Su Alteza, Ji-daren dijo que sus gastos de viaje son suficientes, por lo que no tiene necesidad de gastar".

Dicho esto, sacó una carta delgada de sus brazos y se la entregó a Jiang Suizhou. "Ji-daren también escribió algunas palabras y le pidió a este humilde esclavo que se las pasara a Su Alteza".

Jiang Suizhou abrió la carta y vio una escritura elocuente y desenfrenada en el papel.

【Gracias por el rescate de Su Alteza, y le pido a Su Alteza que no se culpe.

"Huizhou tiene un paisaje encantador, las flores de ciruelo son especialmente abundantes, he anhelado verlas durante mucho tiempo. Si lo piensas bien, si me voy un poco antes, puedo alcanzar ver las ciruelas verdes de Huizhou por mí mismo antes de que se marchiten. ¿No sería maravilloso?】

Jiang Suizhou leyó hasta este punto, y la comisura de su boca se relajó, antes de finalmente formar una curva muy poco profunda.

En la vida, cada uno tiene sus propias preferencias y actividades. Pero Pang Shao impuso sus preferencias a los demás, pensando que la carrera y la riqueza eran las cosas que les gustaban a todos, lo que le hizo pensar que arruinar las perspectivas futuras de Ji You era el castigo más apropiado.

Pero él no sabía, su supuesto castigo no era nada para Ji You. Para Jiang Suizhou, esto fue suerte en la desgracia.

Pero...

Jiang Suizhou estudió la carta por un momento y la guardó como si fuera algo precioso.

Aunque esta degradación solo hizo cosquillas a Ji You, y en cambio le dio la oportunidad de disfrutar del paisaje a su gusto, Jiang Suizhou nunca olvidaría la animosidad de Pang Shao.