Prólogo.

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7:23 a.m, la universidad estaba prácticamente llena.
Aún había bastante alumnado mirando cual sería su aula asignada mientras que los otros se encontraban comiendo o merendando algún snack. Eso le pareció gracioso a Taehyung, pues él ni siquiera había podido desayunar, se encontraba muy nervioso. Sabía que saldría bien, después de todo estaba confiando.

Sin embargo el hecho de que ya era prácticamente un omega adulto y debería tener muchísimas responsabilidades incluso más que antes, le parecía algo aterrador. Siempre fue independiente, sin embargo jamás estuvo solo, para su desgracia solo pocos compañeros habían tomado la misma carrera que él, por lo tanto solo quedaba volver a iniciar un círculo social pero eso sería después, ahora tenía que apresurarse.

I don't want this feelin', I can't afford love. —Aquel omega de buen cuerpo y hermosa melena dorada tarareaba sin pena alguna mientras se balanceaba entre los pasillos disfrutando su canción favorita del cantante "the weekend", suspiro al ya encontrarse frente a la puerta del salón asignado para su primera clase.
Retiro sus audífonos logrando escuchar la voz del profesor resonar entre aquellas paredes puesto que la clase había comenzado y él llegaba tarde... ¡al primer día!

Taehyung desconecto el bluetooth de su celular mientras guardaba los audiculares en su cajita, también acomodo ligeramente su cabello y entró en silencio parando frente al docente para hacer una reverencia.
Sin problema alguno el pase le fue dado por lo cual Taehyung agradeció dándose media vuelta para buscar algún asiento vacío, sin embargo en su búsqueda de alguna mesa con disponibilidad sus orbes se toparon con unos iris ya bien conocidos...

Por Dios ¿era él? ¿de verdad? no puede ser él, no ahora, no quería ni podía compartir clase con él chico que su omega anhelaba, sintió como su interior se entristeció, suspiro en busca de oxígeno ya que este aparentemente se había acortado.

Pasaron escasos segundos para poder darse cuenta de que estaba parado frente a la clase entera con todos los ojos puestos sobre sí, incluso esos... ojos, carraspeo disculpándose manteniendo la postura en la cual llevaba firme hace años.
Escondiendo tras esta las ansias de verle, esa emoción que generó tal encuentro sorpresivo.
Simplemente se dirigió al último asiento algo ansioso mientras caminaba, dejo de ver a tal alfa destacado entre toda la clase, pero estaba seguro que él no había dejado de verle, pues sentía como lo perseguía con su mirada para nada discreta.

Se sentía asustado y a la vez nervioso; ello le llevo a maldecir en su mente tan solo pudo tomar asiento, dejando de lado la existencia de ese chico. Sacó su cuaderno y comenzó a anotar aquello que se reflejaba en la pantalla del profesor, distrayendose por completo de la reciente sorpresa que se había llevado.

Sin embargo para el alfa no era igual, se sentía desesperado, quería ir y rogar perdón tan solo lo vio, quería rogar tan solo recibir al menos una palabra dirigida para él.
Inconscientemente comenzó a mover su pierna inquieto ante la presencia qué ya esperaba ver; porque sí, sabía que estaría ahí. Tomó aire de manera irregular dejando de anotar todo lo que era mencionado por el beta mayor. Su alma salió de sí para ir a buscar la compañía de aquel lindo joven, que lamentablemente lo aborrecía. Jungkook sintió un gran nudo apretar su garganta, se sentía mal al ver como le ignoro sin siquiera darle indicios de gustó al mirarlo... era obvio ¿quien estaría gustoso de verle después de haber hecho la vida del rubio un juego?

Estos últimos años se había atormentado con las consecuencias de sus acciones, en desesperación froto sus palmas contra su rostro llamando la atención de su profesor.

— ¿Se encuentra bien, joven? —El profesor cuestiono al alfa en un notable colapso.
Jungkook simplemente asintió volviendo a tomar su lapicero para seguir anotando lo que era dictado.

La clase parecía ir a paso de tortuga, una tortura total si cuestionaban a los estudiantes con aquella historia en común.

De manera involuntaria Jeon volteaba a sus espaldas mirando a Taehyung; quien estaba unos asientos más atrás, este se miraba sumamente lindo, tan perfecto como siempre lo fue, ahora más que nunca. Estaba bien desarrollado, unas preciosas curvas, glúteos firmes y un aroma increíblemente dulce, maldijo internamente al sentir como su deseo de poder llamarlo incrementaba sacando un lloriqueo de su voz, quería a ese omega... ¡quería a su omega! odiaba la idea de tener que soportar ver como alfas cortejeaban con su pequeño. Y apesar de que la universidad estaba repleta por chicos de ambas jerarquías incluso uno que otro delta o beta, sabía perfectamente que el omega sería el centro de atención, siempre lo fue y siempre lo será ante sus ojos, pues su belleza era irreal, simplemente un delito que aquel rubio cometió con todo el descaro.
Ese chico es algo de otro mundo y no solo lo decía por el enamoramiento que tenía hacia este, sino porque realmente lo era. Ese chico es hermoso y nadie podía negarlo.

Esto definitivamente iba a ser una gran tortura tanto para Taehyung, como para Jeon.

♡𝆬 ︵ 🌷

¡les agradecería mucho si dejan su estrellita!
espero disfruten esta historia, cabe recalcar que no todos los créditos son para mi.
betaecito influyo mucho para que fuera posible publicar este fic. 💗

♥︎      ֺ      healing        𔘓        kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora