Menos que cero

Capítulo 6: Un pequeño problema.

Menos que cero de Kenchi618.

Kenchi618: Descargo de responsabilidad no soy dueño de DC. Sabes, me meto en algo como el superheroísmo de vez en cuando. Solo que en lugar de merodear por las calles en busca de delitos, hago llamadas y programo enfrentamientos con otras personas que, según mi conocimiento, no han cometido ningún delito, no realizo arrestos, no oculto mi identidad por miedo a mis enemigos, y Me pagan por ello.

¿Sabes que? Pensándolo bien, en realidad no se parece en nada a los superhéroes. No sé a dónde iba con eso.

Sin embargo , podría usar una máscara y una capa mientras entro a la arena. Mmm...

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Por quinta noche en una semana, Null se encontró sentado y esperando toda la noche en un almacén olvidado lleno de chatarra variada al final de Gotham City. Selina le había dicho que se escondiera en algún lugar disfrazado hasta que ella le dijera que había logrado atropellar a Batman. Para ella, no era tan simple como hacer brillar una luz en el cielo. Tenía que buscarlo de verdad.

Estaba disfrazado, porque si de alguna manera Selina lograba localizar a Batman, y el Caballero Oscuro podía encontrarlo y llamar a la puerta, Null no quería ser atrapado en modo Max. Podía verlo ahora. Estaría ocupándose de sus propios asuntos en uno de los lugares entre los que se había estado moviendo, y de repente Batman caería sobre él desde las vigas. Lo que sucedió a continuación varió de un pensamiento a otro, pero por lo general involucraba que le patearan el trasero.

Ugh... pero si alguien podía cruzarse con Batman, era Selina, así que todas las noches de esa semana se vistió y salió. En algún lugar apartado donde no pudiera ser encontrado fácilmente sin algún tipo de pista.

Pero aun así, Null no confiaba exactamente. Sin embargo, no tenía exactamente muchas opciones en este momento.

Su muslo todavía estaba extremadamente dolorido. Podía sentir el mordisco de su herida de bala con cada paso que daba, pero era manejable. En el traje, sus músculos estaban lo suficientemente bien apoyados que se ejercía una presión significativamente menor sobre su cuerpo para hacer el trabajo, por lo que podía poner todo su peso sobre las piernas sin demasiada incomodidad.

Afortunadamente, en realidad no necesitaba tener las piernas en perfectas condiciones para lo que estaba haciendo.

El traje era increíble. Después de haber superado en su mayor parte el estigma que la pieza de equipo se había ganado con él debido a que probablemente sería lo que provocaría su prematura muerte, una vez más pudo ver ese hecho.

A partir de ese momento, sabía de dos cosas que el traje le permitiría hacer fuera del aumento básico que se le otorgó automáticamente después de usarlo. Una habilidad le permitía convertir su cuerpo en una gigantesca pistola paralizante que variaba en fuerza, y la otra le permitía adherirse a las superficies a través del magnetismo inverso. Ambos eran geniales, pero si el traje podía hacer eso, ¿podría también hacer otras cosas?

Esa era la pregunta que necesitaba ser respondida en su libro, y fue el foco de su experimentación mientras pasaba noche tras noche esperando una cita que salvaría su vida o lo enviaría a prisión. Así era la vida, al parecer.

El primer indicio de Null para estallar fue las sensaciones que había sentido cada vez que hacía que el traje liberara descargas eléctricas que sacudirían las cosas con las que entraba en contacto. Era una extensión de él, trabajando como flexionando un músculo inexistente. Si quería que fuera a sus manos, tenía que concentrarse activamente en él, por lo que no había una gran posibilidad de que lo activara por accidente. Lo mismo ocurrió con sus pies, y con la expulsión de cuerpo completo.