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—¡No quelo!— Jeongin negó una y otra vez moviendo su cara de un lado a otro —¡No guta!
Seungmin se rindió dejando la papilla de lado y cortando pequeños trocitos de salchichas. —Creo que estamos malcriando al niño— le dijo a Hyunjin.
El pelinegro miró a Jeongin con la frente fruncida.
—Bebé, hazle caso a Minnie, no más comida de adulto.
—¡No quelo! Truuuuu— hizo ruidos mientras enseñaba su lengua, —quelo eso—, señaló las costillas.
Hyunjin se encogió de hombros. —Sólo dale un poco de los trocitos que hiciste.
—Pero pican— le advirtió Seungmin.
—Así aprenderá.
—A ver di aaaaa— le dijo al niño y este le obedeció, luego miró a Hyunjin pidiéndole con la mirada que terminará de darle de comer mientras el contestaba la llamada de su madre.
Charló un rato con ella, no le hablo de Jeongin, ni de que lo habían despedido de su trabajo hace días, tenía algunos ahorros para sobrevivir, sólo le dijo que pronto estaría en período de exámenes y que le estaba yendo bien en la universidad.
Cuando volvió Jeongin soplaba y soplaba, pero no dejaba de comer.
—"Así aprenderá"— le dijo a Hyunjin con sarcasmo.
Este sólo trato de ignorarlo. —Es un niño con gustos peculiares.
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