DOLL ☆Jaeren☆

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Pasamos por casa únicamente para cambiarnos.

Me arreglé primero yo, rebusque entre sus ropas algo que nunca me haya puesto, ahora me arrepentia que cuando Jaemin quiso comprarme ropa le dije que no. Quería verme bien.

Encontré una camisa cuadrículada color azul con líneas blancas, me peine bien y baje para que no me vea, estaba en la cocina y vi a su mamá preparándose para irse a trabajar.

- Hola Renjun, ¿Cómo les fue?

- Muy bien señora Na, estudiamos mucho así que espero que todo salga bien.

Le sonreí y me quedé callado.

- Renjun gracias por cuidar de Jaemin, no estoy mucho en casa pero vi muchos cambios en él. Me alegra que estés en casa, nos das felicidad.

Asentí felíz y la vi irse a saludar a Jaemin.

Señora Na, tendrá que cuidar mucho a Jaemin más adelante, pensé sonriendo un poco triste.

Los vi bajar riéndose, Jaemin tenía una camiseta gris y pantalones negros, se veía muy lindo.

- Nos vemos más tarde mamá.

Salimos y caminamos por la calle hasta el autobús.

- ¿A dónde iremos? ¿Usualmente a donde van las parejas?

- Las parejas tienen anillos de parejas cuando cumplen los 100 días, tienen ropa de pareja, van a la torre de Nam Sam a poner un candado que símbolize su amor eterno, etc.

Anillos ya tenemos.

Reí y tome su mano para jugar con ella.

- Hagamos algo distinto. Pero quiero ropa de pareja.

Asintió sonriendo.

Cuando salíamos no decíamos que era una "Cita", eran salidas, supongo porque aún no me había propuesto ser novios y ahora que lo éramos teníamos que reconfirmarlos.

Bajamos en unas calles que no conocía, Jaemin me llevaba por las calles sin decir nada.

- Te llevaré a un lugar que seguro que encantará.

Había un enorme Castillo en la entrada, solté su mano y salí corriendo.

- ¡¡Jaemin mira eso!! Es un castillo.

Era muy bonito, había mucha gente y un hombre en un disfraz de pingüino enorme me dio un globo.

Jaemin se acercó y sólo reía, habían muchos juegos y mucha gente por todos lados.

Pago las entradas y salio corriendo adentro.

- Me dijo la señora que no hay muchos juegos abiertos porque es día de clases, pero a donde quiero ir si esta.

Asentí y fuimos, gritaba por la cantidad de juegos y luces.

Empecé a sentir frío cuando note que estábamos en una pista de hielo.

- Vamos a patinar. Te prometo que otro día nos subiremos a todos los juegos en un solo día, pero hay que esperar a las vacaciones de verano.

No me importaba sólo ir a patinar, yo quería pasar mi día con él. Le besé rápido y corrí a ponerme los patines.

La pista era enorme, deje mi globo aún costado y me adentre solo, sólo un paso y me resbale cayendome.

- ¡¡Ren!!, Ahí voy.