Congratulations - A Gabenath Songfic Story for Insta-love.

[Verse II: Part III]

[Verse II: Part III]

Now we got our own apartment, same box for the mail

Ahora tenemos nuestro propio apartamento, la misma caja para el correo

Same hamper for the laundry, the food in the fridge is stale

El mismo cesto para la ropa, la comida en la nevera está rancia

And this mornin' you cooked the eggs with the kale

Y esta mañana cocinaste los huevos con la col rizada

I tried to hit it while you was gettin' dressed

Intenté golpearlo mientras te vestías

You said, "All you ever think about is sex"

Dijiste «Todo lo que piensas es sexo»

I'm like, "Oh well, you know me so well

Estoy como, «Oh bueno, me conoces tan bien

And if this what make you late, I swear, I won't tell

Y si esto te hará recostar, lo juro, no lo contaré

NARRADOR

Se había convertido en costumbre para Gabriel que siempre que Adrien estuviera en alguna excursión escolar o de vacaciones con su madre él terminaría en el apartamento de Nathalie.

Ya tenía ropa guardada en las gavetas.

Perfumes, lacas y su cepillo de dientes en el baño.

Tenía una computadora con pantalla táctil diseñada en una habitación que Nathalie usaba para leer sus libros y algunas telas cuando buscaba colores y texturas.

Se había acostumbrado a que la puerta principal tenía maña para abrir, que en la parte de la lavandería había un obstáculo muy engorroso y que el correo llegaba los jueves.

Adrien estuvo una semana en casa después de sus vacaciones con su madre pero ayer salió a un viaje con los padres de "una amiga" como decía el chico, así que hoy Gabriel y Nathalie han pasado de la empresa directamente al apartamento de Nathalie.

Gabriel había ido a la nevera y notado que había comida vencida, lo hablo con Nathalie y después de botarla, bajo a comprar más comida ya que faltaba alguna mientras Nathalie hacia una parte de la cena con lo que había.

Bajo al minimarket que estaba cruzando la calle con un pantalón de gabardina negro y camisa blanca así que no era reconocible por faltar la corbata, el chaleco y el prolijo peinado de siempre.

Pero al parecer alguien conocía ese aspecto de él, porque mientras escogía frutas alguien lo llamó.

—¿Gabriel Agreste? — preguntó la persona, quien reconoció como una mujer. El volteo y se encontró con una chica rubia de cabello corto con ojos avellana y un vestido beis de su misma marca.

Intentó pensar pero se le hizo irreconocible

—Disculpe, ¿Necesita algo? Sé que soy conocido pero...

—Oh no tranquilo, no vengo a pedirte autógrafo o algo así, puedo entender que no me reconozcas, pero estudiamos juntos en la universidad.

—Oh... lo siento pero no recuerdo mucho de esa época, además estudié en dos universidades diferentes y...