Nueve

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Toda la fortaleza estaba llena de pasadizos que llevaban a las habitaciones principales, todo esto por la paranoia del rey Maegor, pero a Aemond eso no le importaba, el solo aprovecharía que esos pasadizos no estaban protegidos e iría con Luke la misma noche que fue regañado.

Pero como siempre algo tenía que impedir sus maravillosos e inteligentes planes, en este caso fue su madre, que mando por el.

Claro que amaba a su madre, pero ella tenía un odio irracional por Rhaenyra que a él no le importaba demasiado, y menos ahora que estaba por contraer nupcias con Luke.

Supuso que debía enfrentar esa situación con su madre, no podía salir mal, o si?

Helaena estaba junto a su madre cuando llego al solar de la reina, su pobre hermana estaba incomoda porque seguramente su madre estaba presionando para que pusiera a Aegon en cintura, si tan solo el par de mujeres supiera que lo que su hermano amaba era a Jace dejaria de presionar al idiota.

Saludo a su madre y hermana con un asentimiento, esperando saber para que fue convocado.

"Debes esperar, tu abuelo y Aegon vendran a acompañarnos"

"Para que exactamente?"

"Bueno, es un tema que es importante para todos, es sobre el futuro de la familia"

"A cual te refiere?"

"Principe Aemond, tan curioso como siempre" dijo la mano del rey entrando con aires de supremacia, pero la imagen se arruinaba porque Aegon venia siendo arrastrado por el.

"Que quieres decir?"

"Ambos lo sabemos, al fin y al cabo tus futuras nupcias te tienen muy emocionado, tanto que tu cuerpo lo demuestra arrinconando al niño Strong en cada pasillo que puedas" contesto el anciano.

"Fijate con quien hablas" Aemond no queria que su prometido se involucrara en esta platica.

"Es justo de lo que tratara esta reunión"

mierda

"No se que se necesita hablar, todo esta dicho, en una semana el y yo seremos esposos ante los dioses y los hombres"

"No te pongas religioso, no te queda hijo" hablo la reina.

"Lo que quiero decir es que despues de esa boda tu te mudaras a Rocadragon, eso se decidio con el consejo privado"

"Y quieren decirme que me extrañaran?"

"Yo no lo hare" hipo Aegon

"No hijo, lo que queremos es que nos informes los movimientos que haga Rhaenyra" Vale, ese no era aun un buen plan.

"Sere un espia?"

"Si, y debes enamorar al chico para que produzca un heredero y con ello asegurar el control de los puertos del reino, ademas de toda la flota wue viene con el" Cuando Aemond creia que el era muy ambicioso su familia siempre lo dejaba atonito con su propia ambición, acaso querian que usara a su pequeño Luke? e hijos? nisiquiera recordaba que todos los niños cono sangre valyria eran capaces de dar a luz y ya tenia que ser padre.

"Que dijeron sobre embarazar a alguien?" Aegon se enderezo de donde habia estado sentado, su embriaguez parecio disminuir rapidamente

"Le recordaba su deber a tu hermano, y como ayudara con la causa"

"Confiamos en ti, y que pondras varios hijos en el bastardo, que afortunadamente tendrán el nombre Targaryen y podrían contraer nupcias con los hijos de Aegon"

Aemond pensó que era mucho para procesar, pero debía tomar una decision rapidamente.
Por un lado debía elegir si apoyar a su madre y tener que traicionar la confianza y traicionar su propios sentimientos con el fin de coronar a su estupido hermano como rey o seguir a su recien descubierto corazon y amar a Luke libremente en Rocadragon y básicamente unirse al bando de su media herman, pero con la seguridad de estaria mas seguro el reino bajo el mando de Rhaenyra que la del borracho de Aegon, la decision era obvia, solo debia encontrar el valor para tomarla.

Al final no dijo nada y solo asintió a todo lo que le dijeron, pero decidió que el tomaría sus propias decisiones.

Cuando salió para ir a ver a Luke y colarse en su habitación, pero Aegon lo tomo del brazo y le susurro algo que le arruinó la noche.

"Quiero secuestrar a Jace y casarme con el, me prestas a Vhagar para huir?"

✿✿✿✿✿✿✿

Luke estaba aburrido, habían pasado dos días, nisiquiera se le permitia tener visitas, o bueno, si podía pero eran de su madre o padrastro y en estos momentos lo ultimo que queria era hablar con ellos, no era justo, el no habia hecho nada malo, solo llevarse bien con su prometido y eso era decir mucho, la mayoría de los matrimonios arreglados eran infelices, pero el de el probablemente sería bueno, al fin y al cabo Aemond dijo que lo quería.

El pequeño Luke se sonrojo al recordar la confesión que le hizo su tío y los besos que vinieron después, sino fuera por su hermano el estaría felizmente en los fuertes brazos de Aemond.

Usaba solo la parte superior de su pijama, porque nadie importante lo visitaria, así que no había porque arreglarse, su cuerpo como el de todo adolescente estaba en constante cambio, y a veces deseaba parecerse más a un chico fornido y no tener un cuerpo delicado, pero también se sentía feliz de ser así, porque siempre fue considerado el más guapo de los tres hermanos y tal vez por eso su abuelo lo eligio como pareja de Aemond.

Estaba perdido en sus pensamientos cuando una puerta que no conocía se abrió...de la pared.

Se asusto y corrió a tomar su espada y esconderse en una esquina, pero cuando se enfrentó a la mirada del intruso, aún en la penumbra descubrió que era Aemond que llevaba puesto su traje de fechorías y tenía plasmada una sonrisa de orgullo al ver las piernas desnudas de su sobrino, Luke sin importar estar semidesnudo corrió y abrazarlo, Aemond lo recibió cariñosamente, al parecer dos días de no verse ya les afectaba.
Rápidamente buscaron los labios del contrario y chocaron dientes y lengua, había sonrisas entre los besos, ambos estaba muy felices de verse, pero Aemond tenía otros planes.

"Debes vestirte rápido, aunque déjame decirte que esa camisa hace que tus piernas luzcan increíbles" comento con picardía mientras le entregaba ropa que parecía de campesino. Luke se sonrojo al recordar que no usaba casi nada, pero aún cuando penso que Aemond fue a follar con el y desvestirlo, igual no pregunto y comenzó a vestirse.

Una vez cambiado uso una capa parecida a la de Aemond y ambos salieron por los pasillos secretos que no sabía que existian en su habitación, ese no lo conocía.

"Por cierto, a dónde vamos?" Pregunto ya con curiosidad.

"A una boda"

Estúpido y odioso.... pero lo amoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora