Diecisiete

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"El rey murió y la reina se atrinchero en la fortaleza" esas palabras se seguían reproduciendo en la mente de Rhaenyra mientras sentía que la sangre bajaba por sus muslos, estaba entrando en pánico y su hermano y esposo acudieron a ella para sostenerla cuando las piernas le fallaron, no supo quién grito por ayuda, pero pronto el maestre Gerardys y sus parteras la ayudaron y llevaron a la habitación donde habían nacido sus otros dos príncipes.

Sentía su vientre duro y tenía miedo, su bebé no, era algo tan inocente.

Lágrimas corrían por sus mejillas, la sensación de perder a su padre se apoderó de ella, pero sabía que tenía que luchar por su bebé.

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Daemon cómo en cada parto desde la muerte de su segunda esposa prefiero alejarse, a comparación de las otras veces esta vez tendría que planear como matar a la perra verde, pero primero debía probar lealtades, desenvaino a hermana oscura y la coloco sobre el cuello de Aemond que alzó las manos, aunque no parecía tan sorprendido, el chico estaba agotado y desarmado pero no le importaba eso a Daemon, ha matado a más inocentes.

"Te arrodillaras ante la reina Rhaenyra o irás a Desembarco del Rey a coronarte rey, solo dilo ahora y procederé"

"No hice un vuelo en tiempo récord con mis sobrinos a cuestas dejando que mi hermana volará sola en medio de la tormenta para que termine traicionado a la madre de mi esposo" dijo fríamente Aemond, pero aun así Daemon no bajo su espada, interesante que no se refiriera como reina sino que todo lo relacionara con Luke.

"Sobrino, si intentas hacer algo fuera del plan créeme que haré que desees morir rápido, o incluso lento, porque llegará un punto donde lo único que desees será morir de una u otra forma y yo no cederé"

"Regrese por Luke, y si dejas de ser dramático iré a alcanzar a mi hermana que probablemente debe estar asustada, su dragón no es tan grande y la tormenta es muy ruidosa"

Daemon bajo su espada y llamo a los guardias, aún no se fiaba de Aemond, el no creía en la fidelidad por amor, pero por el momento me daría el beneficio de la duda, de eso dependía el éxito de su plan, pero primero iría a probar lealtades con los caballeros de la guardia real y algunos señores, no quería escuchar los gritos de dolor de su esposa, no deseaba que el maestre lo buscara y le dijera que decidiera, porque el sabia que elegir esta vez, esta vez seguiría su corazón.

Su hermano había muerto, tendría que lamentarse en silencio, como protector del reino tendría que hacer justo eso, cuidar de los reinos mientras su esposa paria, quería iniciar una guerra, pero sabia que Rhaenyra no estaría de acuerdo, y como el estratega que era prefirió hacer un plan que sabia seria exitoso si aseguraba la lealtad de los participantes.

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Aemond retomo el vuelo con Vhagar, afortunadamente su hermana no esta muy lejos y la lluvia ya había bajado la intensidad, quería concentrarse en la sensación de humedad que se clavaba hasta sus huesos, no quería pensar en como su ausente padre había muerto, y su ambiciosa madre había tomado el trono para coronar a alguno de ellos, el no quería ser rey, pero era obvio que el seria coronado, no quería poner esa carga en Daeron que sería más manipulable, es posible que justo ahora alguien estuviera en camino a Rocadragon para llevarlo de vuelta Desembarco del rey, pero él ya había prometido regresar, pero primero tenia que hablar en secreto con Daemon.

Flashback...

El y Helaena se despidieron para dormir, él se despidió de sus sobrinos que se mostraban emocionados por verlo de nuevo, ni siquiera fue a sus antiguas habitaciones, aun recordaba que ahí Aegon y Jace habían tenido sexo, prefirió ir a la habitación donde tuvo sexo con Luke por primera vez, estaba en el torreón de Maegor, por lo que no quedaba tan lejos de su hermana por si hubiera algo de lo que hablar.

Fue poco después de que se pusiera la ropa para dormir que su puerta se abrió y entro Helaena muy agitada, era obvio que algo la había asustado, sino ella hubiera tocado.

"Papá murió, escuche que madre decía que cerraran las puertas y llamaran a los príncipes, ósea a nosotros, quiero irme, llévame a Rocadragon con mis hijos" hablo muy agitada y apresurada que era difícil comprender.

"Respira, siéntate y hablemos"

"Debemos irnos, por favor, si nos quedamos es posible que nos casen y te corones, madre y el abuelo creen que son silenciosos pero hablan cuando estoy presente, siempre conspiraron contra Rhaenyra y sus hijos" susurro Helaena como si eso fuera un secreto

"Pero yo estoy casado con Luke"

"Y yo con Aegon, pero eso no impidió que el se casara con Jace, así que creo que esas reglas ya no aplican para nuestra familia" hablo angustiada Helaena, y Aemond la comprendió, su familia era capaz de hacer de todo, específicamente su madre y abuelo.

Se quedaron un rato sentados juntos, sin tocarse porque Helaena siempre odio el contacto físico, incluso de su hermano favorito, y Aemond entendió eso, la cabeza de ambos era un lio, hasta que Helaena rompió el silencio.

"Y si te conviertes en rey?"

"Que cosa?" Aemond la miro fijamente.

"Si, eso sería lo mejor, seria engañar a madre y al abuelo, te coronas rey y abdicas a favor de nuestra hermana, de esa forma se evitará el derramamiento de sangre"

"Quieres traicionar a la familia?"

"tú no?" Helaena dijo cum una fiereza que le desconocía.

Y Aemond supo que su hermana era mas inteligente que cualquiera de ellos al escuchar su plan, parecía algo imposible pero con suerte saldría bien.

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La reina convoco a ambos en la penumbra de la madrugada, Helaena estaba nerviosa, nunca fue muy buena para mentirle a su madre, su corazón latía fuertemente mientras la mirada de su madre se posaba en ellos, intento no parecer que ya sabia de lo que se trataba, cuando claramente ya sabía todo y había planeado como resolverlo.

"Mis querido hijos los convoco para darles la triste noticia, una desgracia ha caído sobre nosotros, su padre, el rey ha muerto, después de la dura batalla contra su enfermedad el extraño vino por él, así que para asegurarnos de atravesar esta tragedia lo más tranquilamente posible, por eso su abuelo y yo hemos decidido hacer algo diferente"

"Hemos decidido que Aemond debe coronarse rey, así que espero estés listo nieto mío" dijo la Mano, y Aemond sonrió, el plan debía continuar.

"Sera un gran honor convertirme en rey, pero Rhaenyra no creo que se lo tomo bien"

"No, por ello debemos coronarte lo más pronto posible, frente a todo los ciudadanos, así el pueblo admitirá que tú eres el legítimo rey"

"Y no crees que iniciaran una guerra?" pregunto Aemond, y Helaena estaba nerviosa, debían convencer a los adultos.

"Si lo hacen estaremos listos, tenemos a Vhagar el dragón más grande del mundo" dijo su abuelo.

"No creen que sería mejor si tuviéramos un rehén?"

"Que quieres decir?" pregunto su madre a Aemond

"Creo que lo mejor sería engañarlos, yo partiría esta misma noche con Helaena y los gemelos para Rocadragon, les daré las noticias y fingiré preocupación por la sucesión, en el proceso regresare con mi esposo, y el niño menor, lo que hará que los negros se queden sin dos dragones, tendríamos la ventaja, porque Helaena estaría incapacitada mientras nos envía cuervos con noticias, ya que Dreamfyre no peleara"

"Y que harás cuando se enteren de tu traición?" pregunto con interés Otto

"Les diré que si intentan algo matare a sus hijos, y posiblemente al hijo que ya debí haber engendrado con el bastardo, el corazón suave de Rhaenyra cederá"

"Ese es un buen plan, pero tenemos que modificarlo, una vez que regreses y seas coronado tu matrimonio se anulara y te casaras con tu hermana" y ambos se miraron y asintieron, tal vez su madre lo vio como un signo de compromiso pero para ellos significo que su plan estaba funcionando.

"Entonces partiremos ahora"

Y así ambos fueron junto a los gemelos hacia pozo dragón y montaron a su respectivo dragón, Helaena se sintió más emocionada que nunca.

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Estúpido y odioso.... pero lo amoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora