Autor: Kely Prieto
Usuario: KelyPrieto
Relato: Volver a empezar
Perú, Lima
Bajo la mirada observando la ciudad donde nací desde las ventanas del taxi, mis hermanas están silencio al igual que yo. El auto se detiene frente al aeropuerto del país, las calles limeñas son tan similares que muy difícil saber en qué distrito te ubicas, las casas pre construidas en las faldas en un cerro aledaño, algunas con grandes edificios o mini departamentos, lugares con permiso a pase de los ciclistas y muchos buses informales creando caos al llamar a los pasajeros. Lima es todo un caos a estas horas de la mañana.
Bajo mis maletas y las tres nos dirigimos al interior. Mi hermana pequeña, Sofía, sostiene mi mano con gentileza. Le sonrió con tristeza y ella me abraza sin decir nada. Las personas entran y salen de la entrada principal, juego con mis pies en la sala de espera. Mi hermana Daniela se sienta a mi lado con mi pasaporte entre mis pertenencias.
—¿Lista para conocer la universidad de tus sueños? —Pregunta con una sonrisa, desvió la mirada y la ignoro. —Enana, sé que ahora no lo entiendes, pero es lo mejor para ti. —Indica sin observarme.
Observo el reloj en la parte superior del aeropuerto, aún falta una hora para mi avión abordé, sostengo los boletos de avión y al no ver la fecha de regreso siento un dolor en el pecho. Todo estará bien Macarena, es lo mejor, para los dos... Creo. Los recuerdos de esa noche y la discusión con mi novio regresan a mi mente una y otra vez.
—Venga Maca, ¿estás nerviosa? —Asiento sin dejar de observar el computador, mi hermana Daniela me abraza animándome—¿Revisarás las listas de los que ingresaron? —Inhalo profundamente y asiento.
Hace tres meses decidí tomar dos exámenes de admisión en el programa de becas PRONABEC que es para personas de escasos recursos o primeros puestos de distintos colegios del país. Y por fin estaba lista para ver los resultados. No me atreví a tomar un examen a una universidad del extranjero, aunque tengo una que siempre quise ingresar, pero no siento que pueda dejar mi vida en mi ciudad e irme sin más. No podría. Mis dos hermanas me observan con ansiedad mientras me animan a que vea esos resultados de una vez. Pero aún falta alguien por llegar y quiero que él sea primero en felicitarme por este logro, he estudiado demasiado y estoy segura de que al menos una me acepto. Unos toques suaves en la puerta me hacen dar un brinco y correr hacia la puerta principal de mi departamento.
Mi sonrisa es amplia al ver a mi novio observándome desde el borde la puerta. Nos abrazamos sellando el momento con un beso corto.
—Listo lleno mi galán, ahora si veamos esa lista, qué guapo estás hoy—Indico divertida, Gabriel sonríe acariciando mi cabello.
—¿Si soy muy guapo? —Pregunta observándome, hago una mueca de confusión y lo observo de pies a cabeza, sus tenis negros clásicos en él, su pantalón jean del mismo color y su polo celeste a cuadros acompañada de su casaca negra con cuadros blanca que aún lleva la etiqueta de precio me hace sentir.
ESTÁS LEYENDO
El rincón hispano
RandomAntología de relatos hispanoamericanos. Aquellos países donde nacimos, desde Argentina hasta México; relatos de todo tipo por escritores que vivieron o han vivido ahí gran parte de su vida. Por un américa hispano que nos enseñe más de nuestra cultur...